STORM ; N.MIKAELSON

chapter twenty three

LE GRAND GUIGNOL
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Hayley y yo trajimos a Celeste al pantano.  Ya era de mañana y la habíamos atado a un árbol, arranqué la cinta y me paré junto a Eve y Hayley, quienes tenían sus rifles apuntando a la bruja.  Los lobos crecientes estaban detrás de nosotros, atrapados en su forma lobuna.

－Entonces, ¿qué es esto, venganza? Mira. Lamento haberte engañado. No estaba detrás de ti－nos dijo la bruja.

Los lobos gruñeron.

－¿Qué, y solo somos daños colaterales? Casi quemaste a Thalia y Jackson vivos en el incendio de la plantación.－Eve habló.

Celeste luchó contra las cuerdas para liberarse, Hayley disparó un tiro de advertencia.

－Cuidado, Sabine o Celeste o como quieras llamarte. Movimientos repentinos me ponen nerviosa.－ Hayley ladeó el rifle.－Y homicida.

－¿Qué, me vas a matar, cariño?

－No. Planeamos algo mejor. Mira, sabemos todo sobre ti. Sabemos que te gusta salir de ti misma y luego saltar a los cuerpos de otras personas. Bueno, eso no va a pasar aquí.－ le dije.－Sé que no puedo matarte, pero trata de hechizarme, y nuestra amiga, Eve, aquí te golpeará con la rodilla. Ve por ellos, y luego, bueno, realmente lo haré doler.

－¿Entonces qué quieres?－Celeste preguntó.

－En los años 90, habitaste una bruja llamada Brynne Deveraux, ¿recuerdas? Marcel la tenía: maldijo a muchos hombres lobo para que solo se volvieran humanos en luna llena.

Celeste asintió.

－Ya veo. Sí. Esa fui yo. Déjame adivinar. Quieres venganza.

－Queremos que deshagas la maldición.

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QUITAMOS LOS ATAS, DEJANDO A CELESTE LIBRE.  Estaba mezclando una poción mágica que iba a ayudar a deshacer la maldición.

－Aquí.－Celeste me entregó el recipiente.－Son hierbas molidas en una pasta. Actuará como un conducto para el hechizo. En la próxima luna llena, tu gente se volverá humana. Aliméntala y la maldición se romperá.

－Gran manera de envenenarnos a todos a la vez－comenté.

－Mira. Sé que no tienes motivos para confiar en mí, pero, Thalia, en verdad me gustas. Fui como tú, cuidé de Elijah cuando se preocupaba más por su hermano, y al final, terminé muerta. Lo mismo hicieron muchas otras.  Esto, tomalo como una oportunidad que te estoy dando, que yo no pude aprovechar por que estaba demasiado enamorada. Una oportunidad para liberarte de los Originales.

－¿Le crees?－Eva preguntó.

Jackson gruñó y los otros lobos lo siguieron.  Miré lo que estaban viendo y vi que Elijah estaba aquí.

－Lo que sea que te prometió, es una mentira.

－Elijah, está bien. Estamos bien.

－No se puede confiar.

Hayley lo miró.

－Ella es la única que puede ayudar a nuestra manada.

－¿Tienen idea de lo que le ha hecho a nuestra familia?－Elijah nos miró a Hayley y a mí.

－Sé que quieres venganza, y cuando llegue la próxima luna llena, cuando esté segura de que su cura funciona, es toda tuya.－le dije.

－¿Estás sugiriendo que la mantengamos cautiva durante un mes entero?－ Él preguntó:－Se necesitaría un ejército.

－Y yo tengo uno－Los lobos aullaron, －Así que ayúdanos o sal de nuestro camino.

Elijah nos miró por un momento antes de quitarme el frasco y agarrar a Celeste, he irse rápidamente con ellos.

－Hijo de puta.

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(punto de vista externo)

ERA DE NOCHE EN EL CEMENTERIO LAFAYETTE.  Rebekah y Marcel huyeron de Klaus, pero luego volvieron a buscar a Davina.  Cuando finalmente la encontraron, la agarraron y salieron rápidamente del cementerio, el único problema era que Rebekah estaba atrapada.  Un hechizo de límite.

Elijah había ido al cementerio para hablar con Monique Deveraux y los dos se unieron para recuperar a Celeste en su cuerpo original y luego matarla con la espada de Papa Tunde, pero no antes de que tuviera la oportunidad de decirle a Elijah lo que ella y las otras brujas hicieron.

Habían creado un hechizo de límite.  Un hechizo lunar.  Los originales podían entrar al cementerio pero no salir.  Serían libres para la próxima salida de la luna.

Klaus entró en el cementerio.  Tenía una estaca de roble blanco en la mano, acababa de descubrir el por qué Rebekah y Marcel estaban allí.

－¡Rebekah! ¡Rebekah!－ Rugió.

－¡Aprecia el aliento en tus pulmones! Será tu último.

⌑

TODAVÍA EN EL CEMENTERIO, ELIJAH CAMINÓ PASANDO POR LAS CRIPTAS.  Rebekah caminó pero se detuvo cuando vio a su hermano.

－¿Elijah?－ Elijah se volvió hacia su hermana.

－¿Qué estás haciendo aquí? Rebekah, ya deberías estar al otro lado del mundo.

－Tú y yo sabemos que eso no hubiera sido suficiente.

Klaus llegó junto a sus hermanos.  Los vio parados juntos cerca de las criptas.

－¡Alejate de ella! Ella es mía.

Los ojos de Klaus se volvieron amarillos cuando las venas sobresalieron de su rostro y sus colmillos salieron.  Elijah mostró sus colmillos a Klaus mientras sostenía la espada de Papa Tunde, y Rebekah hizo lo mismo.  Parecían estar listos para matarse entre ellos.

－¡Detenganse!