Al terminar las clases con el profesor de ciencias, un grupo de chicos corría hacia las habitaciones de los alfa; allí un chico mayor que el resto residía y se disponía a dejar sus cosas para ir a la habitación de Asahina ,donde decidieron pasar un rato después de clases, las habitaciones no eran muy grandes, consistían de un espacio que hacia la función de dormitorio, un poco más allá estaba un pequeño balcón y al principio de la habitación se encontraba el baño, era algo así como una habitación de hotel, una parte de esta habitación era ocupada por una jaula bastante amplia que dentro tenía un hurón blanco que, al escuchar la puerta se levantó de inmediato y salió a saludar a su dueño con un pequeño mordisquito en su zapato.
Cuando el chico dejo sus pertenecías y comida para su mascota hicieron el mismo proceso, menos Chihiro ya que ella no tenía mascota, al final los 4 chicos terminaron en la habitación de la morena jugando juegos de mesa y uno que otro videojuego, y de vez en cuando Naegi salía a ver a su nuevo compañero de cuarto para ver cómo se encontraba.
- ¡UNO! - gritó Naegi al verse ganador.
- ¡No es justo Naegi, Ya es la quinta vez que ganas! - dijo Chihiro haciendo un puchero a la vez que junto a sus otros amigos le entregaban el dinero apostado al castaño quien sonrió victoriosamente recibiendo sus ganancias.
- No es mi culpa ser tan bueno, años de jugar esto con mi hermana me han hecho todo un experto, ahora ¿jugamos otra vez? - pregunto con un aura de malicia escondida tras un puchero adorable.
-¡De ninguna manera! -
- Oh vamos Asahina ¿acaso tienes miedo de que gane otra vez? -
- No, tengo miedo de quedarme en quiebra por tu culpa- susurró la morena al ver que su billetera estaba casi vacía.
- Ya es un poco tarde ¿qué les parece si vamos a comer algo? - Hagakure sonrió mientras se ponía de pie
-Pero yo no quiero salir ¡Vayan ustedes dos! -
-Eres una floja Hina - Naegi rio ante la actitud de su amiga.
Sin más ambos chicos salieron de la habitación dirigiéndose hacia la cafetería, había un silencio, pero no incomodo, era de esos silencios que expresaban sentimientos que no se podían entender con palabras, y, aunque Naegi no lo dijera se sentía desanimado ya que el chico que llamo su atención no lo trataba de la mejor forma posible, no sabía por qué, pero le dolía que lo ignorara y lo tratara de una forma tan grosera cuando él se intentaba acercar, era como si el destino le estuviera jugando una mala pasada encontrándolo por todos lados pero sintiendo que es una señal de esperanza ,de que él podría ser alguien importante en su vida, el chico suspiro y miro al cielo mientras seguía caminando junto con su amigo.
-Pasa algo con el chico rubio ¿no es así?
-¿Eh? Lo siento, pero no se de quien hablas -
-Oh vamos Naegi, sabes que puedes contarme, no te voy a juzgar y lo sabes -
-Lo sé - susurro para luego suspirar de nuevo.
- Ven, conozco un lugar en el que podemos hablar mejor, además, no creo que les moleste que tardemos un poco - Hagakure tomó la mano de Naegi y lo guió a una parte del campus que parecía ser un jardín, allí dieron un par de vueltas hasta llegar a una especie de claro oculto entre los árboles.
-Wow - dijo asombrado Naegi, tenía planeado explorar la escuela el fin de semana, sabía que era un lugar grande con muchas zonas verdes, pero no pensó que tuviera ese tipo de lugares ocultos.
-Genial ¿no? -
-¿Cómo es que encontraste este lugar? - Naegi miraba con asombro a su amigo, no llevaban más de una semana y él ya había encontrado ese tipo de lugares secretos.
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El aroma del amor
FanfictionMakoto Naegi, un chico común que no precisa de ninguna habilidad en especial, su vida es tan ordinaria como la tuya o la mía, se podría decir que es inclusive aburrida. Pero gracias a kibougamine eso deja de ser así, en aquella academia a la que sol...