Crystals Of Love [MewGulf]

NINETEEN

Gulf no daba crédito a lo que sus ojos miraban, por separado, cada uno de los amigos de Mew eran guapísimos. Pero juntos era el paradigma de la belleza absoluta mezclada con arrogancia y dinero. Gulf no se paró a mirar a los dos que estaban sentados porque...

El, ¿cómo podría siquiera ver más allá de esos tres machos alfa que se habían juntado ante sus narices?

—Gulf, te presento a mis amigos y socios de trabajo, Singto y Kaownah.

El que se llamaba Singto dio un paso al frente con una sonrisa enorme dibujada en su rostro. Extendió su mano y él se estremeció cuando sus pieles hicieron contacto.

—Me alegro mucho de conocerte, Gulf—dijo Singto con una voz ronca que gritaba sexualidad en cada palabra—. Lo había estado esperando con ansia.

—Es un placer conocerte a ti también —murmuró Gulf.

Se volvió hacia Bright y tragó saliva. El hombre era el polo opuesto de Mew. Serio y pensativo donde Mew era más despreocupado y aparentemente menos pensativo, pero Gulf sabía que las apariencias engañaban.

La de Mew era completamente contraria a su verdadera personalidad. Podría parecer relajado y despreocupado, pero era totalmente serio. Al menos con él lo era. Kao le tendió la mano con una sonrisa que hacía que sus ojos marrones parecieran sensuales y seductores.

—He oído hablar mucho de ti, Gulf. Me alegro de que Mew por fin te dejara salir de su apartamento el tiempo suficiente para encontrarte con todos nosotros.

Él se rio y se relajó y luego centró su atención en las otras dos personas sentadas. Cualquiera que se las arreglará para capturar y cautivar a dos hombres como Singto y Kaownah tenía que ser increíblemente especial. Según Mew, ambos estaban totalmente cautivados y completa e irremediablemente enamorados.

Él quería eso. Lo ansiaba. Lo quería con Mew, y si sus palabras eran ciertas, estaban en ello. Aún le desconcertaba que hubiera ocurrido tan rápido, pero luego él le explicó que había ocurrido exactamente igual de rápido con sus amigos. Con ese historial, a lo mejor no era tan raro que la relación entre él y Mew se hubiera vuelto tan seria en tan poco tiempo.

—Gulf, te presento a dos personas muy especiales, Krist y Turbo.

Krist es el recién casado y estoy seguro de que si Kao se sale con la suya, Turbo no se quedará muy atrás en lo que al matrimonios refiere.

—Totalmente cierto —gruñó Kao.

—Hola, Gulf—dijo Krist con una sonrisa abierta y simpática. Era el primo de Kao según le había dicho Mew.

—Hola —contestó Gulf —. Me alegro mucho de conocerlos a ambos.

—Hola, Gulf —dijo Turbo con una sonrisa no menos simpática que la de Krist, pero era evidente que el muchacho era más tímido y más reservado que Krist.

Acordándose de todo lo que Mew le había dicho sobre Win, Gulf lo estudió y asimiló que el joven sentado justo al lado de donde Kao había vuelto a tomar asiento había pasado por muchas cosas y había tenido una vida muy dura. Y también estaba el detalle de que había estado en la cama con Mew.

Gulf no sabía si sentir celos de que Turbo hubiera tenido las manos de Mew sobre su cuerpo, o envidia de que hubiera podido disfrutar de un trío con dos machos alfa increíblemente atractivos. La segunda opción estaba ganando por goleada.

—Hola, Turbo—le devolvió Gulf con amabilidad—. He oído hablar mucho de todos ustedes. Son muy importantes para Mew. Su familia, como él los llama. Me moría de ganas por conocerlos a todos.