You Found Me.

Capítulo 14.

Ocho semanas después.

Brian y Dara iban caminando de la mano con Olivia al frente, llevaban dos meses de relación, los meses más estables en la vida de la joven. Olivia tomó muy bien la noticia de que su papá por fin salía con la muchacha de cabellos rebeldes, se sentía la niña más feliz del universo.

Roger seguía siendo pareja de Julie, evidentemente no le contó nada sobre la noche de la carne asada, y aunque a Dara le incomodaba mucho verlo recurrentemente en las reuniones que John o Brian hacían, ya le estaba aprendiendo a restar importancia.

Freddie se había hecho muy cercano a los demás chicos y, por cosas del destino, Mary era muy buena amiga de Julie, quién fue el contacto que le ayudó a conseguir los documentos de Christopher Miller, pero obviamente Dara no estaba enterada, Freddie no quería alterarla en lo absoluto ya que, por primera vez en los cinco años que llevaba siendo amigo de la joven, la veía feliz.

¿La terapia? Ya no la había hecho de nuevo, Freddie por lo anterior mencionado ya no le insistía y Dara creía que era la mejor opción. Estaba disfrutando el presente con las dos personas más importantes en su vida. Pero la incógnita de saber qué sucedió con el padre de Jeremy realmente era algo que no la dejaba dormir.

—¿Qué piensas? —Brian tomó su mano y comenzó a acariciar el dorso de la misma.

—En algunos sueños que he tenido, pero nada grave, no te preocupes.

—Puedes confiar en mí…

—Lo sé, y te lo agradezco mucho, pero realmente no tengo nada, así que no hay de qué preocuparse…

—¿Sabes? Livi ha estado más contenta de lo usual. —Dijo Brian mientras miraba a su pequeña niña jugando en el área de juegos didácticos.

—¿De verdad? ¿Por qué lo dices?

—Siempre me contaba que le hacía falta alguien con quien hablar, sin desacreditar a Julie ni a mi madre,  pero desde que te conoció le has dado ese sentimiento de confianza y familiaridad que ni con mi madre tuvo…

—Y no sé a qué se deba, pero desde que la conocí yo también sentí lo mismo.

—¿Qué nos hiciste, Dara? —Inquirió Brian acariciando el rostro de la chica con su dedo pulgar.

—La pregunta aquí es, ¿qué me han hecho ustedes? —Tomó el rostro de su apuesto novio y lo besó.

Si bien era cierto que a Brian lo conoció en su vida pasada y se entendía el sentimiento que tenía hacia él, no sabía el por qué con Olivia sentía que ya no le faltaba nada.

Esa tarde irían al cine, y sí, la vida que pensó que tenían ellos el día que los conoció, era la vida que llevaban en ese momento. Armaban legos, veían películas infantiles, los viernes eran de pizza, domingos a la feria o al acuario, y entre semana ir por un helado. Y no, no vivían juntos, pero en tan poco tiempo no descartaban la posibilidad, claro, a largo plazo.

Llegó la noche y cada quien fue a su casa, no sin antes escuchar a Livi llorar mientras le imploraba a Dara que se quedara a dormir con ella. La chica se fue a su casa con el pretexto de ir por ropa limpia, ella ya había pasado con ellos el fin de semana y para nada durmió con Brian, ese hombre era tan casi perfecto que respetaba a su hija cuando se encontraba en casa, así que sus momentos íntimos se daban netamente en el departamento de la rizada.

Llegando a su hogar, acomodó la ropa sucia en la lavadora poniéndola en marcha y comenzó a ordenar un poco. Miró el teléfono y tenía veinte llamadas perdidas de Freddie, por lo que dejó lo que estaba haciendo y procedió a llamarlo.