48 HORAS AL DIA Parte 1 Terminada

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Esa ave gigante sin nombre era tan fea que era desagradable y sabía sorprendentemente bien.

Zhang Heng había sido marisco durante tanto tiempo que casi había olvidado a qué sabía el pollo. La sopa de "pollo" que hirvió para la cena le trajo recuerdos.

En realidad, estrictamente hablando, la carne de esta criatura era mucho más dura que la de pollo. Su textura era en realidad más parecida a la de las palomas.

Pero para Zhang Heng, que casi se vuelve loco pensando en la carne, este era el pollo más delicioso que había probado. Incapaz de terminar los 15 sosos "pollos" en una sola comida, Zhang Heng quitó los órganos internos, empapó la carne en agua de mar y luego la ahumó. La cecina de pollo ahora estaba colgada bajo el alero de su casa.

Detrás de la casa, Zhang Heng encontró un terreno que recibió una buena cantidad de luz solar y plantó las papas que salvó. También quemó algo de hierba y madera, rociando sus cultivos como fertilizante. Finalmente, cercó la parcela de tierra, esperando ver la sorpresa que le traería después de medio mes.

Al principio, Zhang Heng había registrado la hora en la pared de la cueva, pero no podía mover la pared a su nueva casa, así que confió en el reloj de su muñeca.

Con la dureza científicamente inexplicable del reloj, Zhang Heng lo había usado para afilar piedras en los primeros días en la isla. Observando las posiciones de la manecilla de la hora y la de los segundos, podía usar un simple cálculo para determinar la fecha. Hoy, habían pasado 201 días desde que fue "arrastrado a la orilla".

La ropa que llevaba puesta fue la primera en desmoronarse, luego sus zapatos adquirieron un gran agujero. Tuvo suerte de haber estado en los trópicos, no tuvo que preocuparse por la temperatura aunque fuera invierno. Zhang Heng incluso se decidió a pasar el día completamente desnudo.

Su piel era ahora un tono bronceado, su barba despeinada y su pelo un desastre crespo. Parecía un poco desaliñado.

Hoy por la tarde, Zhang Heng dejó todo lo que estaba haciendo, y se subió a un acantilado en la playa. Se sentó con las piernas cruzadas, mirando a la distancia.

Después de media hora, el viejo amigo que había estado esperando apareció.

El aventurero estaba luchando contra las olas, parecía como si pudiera ahogarse en cualquier momento.

Zhang Heng miró la silueta que subía y bajaba con la marea, en conflicto.

El gran filósofo, matemático e historiador Russel1 dijo una vez que su vida estaba gobernada por tres pasiones puras pero abrumadoramente fuertes: el anhelo de amor, la búsqueda de conocimiento y la insoportable lástima por el sufrimiento de la humanidad.

Las cosas para Zhang Heng, en este momento, eran mucho más simples.

Sólo había dos cosas que lo mantendrían vivo durante estos quinientos días: explorar el centro de la isla y ver al hombre en el agua que aparecería cada cuarenta días. La primera lo mantenía ocupado y evitaba que su mente vagara; la segunda le recordaba que no estaba solo.

Tantas veces, Zhang Heng había estado tentado de salvar al aventurero.

Salvarlo significaba tener a alguien con él durante diecinueve días, proporcionándole la tan necesaria interacción, compañía y calor de una criatura del mismo tipo.

Pero Zhang Heng nunca había tomado ninguna medida.

Pensó en una película que había visto llamada "Cast Away". El avión en el que viajaba el protagonista se había estrellado y fue arrastrado a tierra con un montón de paquetes. Para sobrevivir, abrió todos los paquetes dejando sólo uno porque simbolizaba la esperanza para él.

Ver al aventurero cada cuarenta días tenía el mismo significado para Zhang Heng.

Había estado en esta isla por más de doscientos días. Eso sería el equivalente a cinco rondas de juego para el jugador promedio. Todavía estaba muy lejos del día de su regreso a la realidad.

Si volvía ahora, el hombre moriría después de diecinueve días, y estaría verdadera y completamente solo durante el resto de sus días en la isla.

Incluso después de que sus habilidades de supervivencia de la vida salvaje hubieran alcanzado el nivel 1, todavía le faltaban muchas cosas (por ejemplo, realmente quería una consola de juegos, aunque sólo fuera Tetris o Snake). Aún así, el nivelar no era tan urgente como cuando llegó a la isla por primera vez.

Por el contrario, necesitaba un ayudante para explorar la isla. Podía hacerlo solo, por supuesto. Pero definitivamente sería mucho más seguro cuando hay dos personas.

Zhang Heng había planeado llevar al aventurero con él al bosque después de rescatarlo.

Pudo confirmar en su encuentro con Ed y el muchacho en pantalones cortos que aunque ambos eran expertos en supervivencia en la selva, las áreas de su conocimiento diferían. Las habilidades y conocimientos que Ed había impartido eran habilidades básicas de supervivencia, mientras que el muchacho en pantalones cortos se inclinaba más hacia la construcción y la creación. Habiendo observado la vestimenta del aventurero, Zhang Heng supuso que probablemente era un experto en exploración. Sería incómodo para él salvar a la persona ahora.

Zhang Heng tuvo que reprimir el ardiente deseo de salvar al hombre mientras veía las olas tragarse las suyas por cuarta vez.

Con una última mirada al lugar donde el explorador había desaparecido, Zhang Heng saltó desde el acantilado y continuó su práctica de tiro con arco.

Le llevó tres meses conseguir una precisión del 90% a 30 metros.

Como resultado, no hubo notificación de ninguna mejora en sus habilidades. Pero esto no desanimó a Zhang Heng. Él ya lo esperaba. Este juego era un punto de referencia muy exigente para las habilidades. El inglés, que había aprendido durante catorce años, y su lengua materna, sólo fue calificado como nivel 1. Pero considerando la cantidad de idiomas que hay en el mundo, esta clasificación parecía bastante justa.

Lo mismo se aplicaba a la supervivencia en la naturaleza. Zhang Heng sintió que si todos en el mundo fueran arrojados a esta isla, aunque no fuera la última persona viva, al menos sería uno de los diez mejores sobrevivientes. Pero de nuevo, sus habilidades estaban severamente sesgadas. Si se le hubiera colocado en otro tipo de entorno duro, podría no haberlo hecho tan bien, tomar las regiones polares o un desierto. Apenas sería capaz de sobrevivir. Esa era la mayor diferencia entre él y los expertos.

Por lo tanto, Zhang Heng no tenía prisa por nivelar sus habilidades de arquería.

Una vez que dominó sus 30 metros de tiro, comenzó a practicar con blancos móviles.

Al principio, usaba los peces que nadaban cerca de los arrecifes de coral como práctica, pero después de dos disparos, se le recordó que lo que podía ver por encima del agua era en realidad un desviado. Si continuaba practicando así, sus habilidades de tiro con arco se torcerían.

Entonces se dedicó a practicar con cangrejos. Pero estos crustáceos eran el tipo de presa que no se mueve si el enemigo permanece quieto. Demostraron ser terribles objetivos de práctica. Zhang Heng nunca consideró practicar con aves, principalmente porque se paraban en las copas de los árboles. Si fallaba, le sería muy difícil recuperar sus flechas.

Al final, Zhang Heng se colocó sobre las piezas de cerámica rotas, colgándolas en las ramas para que cuando el viento soplara, se balancearan.

Esto hizo que fuera muy difícil disparar.

Le tomó a Zhang Heng dos meses de práctica para aprender las cuerdas. Durante este período de tiempo, atrapó otra horrible ave en perfecto estado. De alguna manera, esa criatura se había metido en la parcela de vegetales de Zhang Heng, probablemente para comer un desayuno gratis, pero en cambio se le atascó la cabeza en las cercas.

Zhang Heng lo pensó y decidió que no tenía prisa por comérsela, así que ató la pata de la criatura a un palo de madera. Ahora tenía un objetivo móvil mejorado.

Zhang Heng envolvió la cabeza de sus flechas carbonizadas y luego comenzó un ataque inhumano contra el "ave".