48 HORAS AL DIA Parte 1 Terminada

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Habían pasado dos días desde que Zhang Heng informó del caso sobrenatural a la policía. Después de eso, no se encontró con ningún caso relacionado con lo desconocido. Antes, se sorprendió cuando recibió un mensaje de Hayase Asuka. Ella quería invitarlo a un parque de diversiones en la víspera de Navidad, donde algunos de sus amigos también lo acompañarían. No era la primera vez que invitaba a Zhang Heng a salir. Ella era del tipo que no podía quedarse en casa por mucho tiempo, saliendo cuando se le presentaba la oportunidad.

Lo que más sorprendió a Zhang Heng fueron sus resultados académicos. Aunque siempre salía, se las arreglaba para pasar sus exámenes con éxito, nunca antes había suspendido ninguna asignatura. Incluso la vio tonteando en la víspera de los finales.

La forma en que se comportó fue en realidad muy similar a alguien que Zhang Heng conocía. Alguien a quien él había rechazado previamente unas cuantas veces. Nunca esperó que Hayase Asuka fuera el tipo de chica persistente. Esta vez, se sintió terrible por haber rechazado siempre sus invitaciones, y así, se adelantó y pidió a sus amigos que se unieran a él si no tenían nada mejor que hacer. A Ma Wei le apasionaba hacer bien sus estudios. En cuanto a Wei Jiangyang y Chen Huadong, habían estado intentando memorizar todo lo que habían estudiado hasta ahora. Ambos se morían por un poco de entretenimiento fuera de los confines del dormitorio.

"¿Estás hablando de la chica japonesa que salvaste en la calle Food? La cosa es que no hablamos japonés."

"Erm... ella estará allí con algunos de sus amigos. Parece que son de China, Japón, y uno de ellos es en realidad de Ucrania", respondió Zhang Heng mientras leía el texto de Hayase Asuka.

"No importa. No creo que me una a ustedes".

Aunque Wei Jiangyang estaba interesado en ser amigo de chicas de diferentes países, todavía pensaba que su vida era su prioridad. No se atrevía a abandonar a su novia y en cambio se divertía con otras. En cuanto a Chen Huadong, estaba devastado porque su último intento de cortejar a Xu Jing había fracasado una vez más miserablemente. Sería un buen cambio para él salir y distraerse de todo el dolor. Por lo tanto, se ofreció como voluntario para ir con Zhang Heng. Por último, Ma Wei, el genio, había terminado de estudiar. Él también decidió ir con Zhang Heng.

Después de eso, Zhang Heng le dijo a Hayase Asuka que traería un par de amigos con él. Todo fue de buena fe, y ella estaba totalmente de acuerdo con ello. Ambas partes habían acordado que se encontrarían en la entrada del parque de diversiones. Viendo que todavía quedaba algo de tiempo antes de que se dirigieran allí, Zhang Heng jugó unas cuantas rondas de baloncesto con Chen Huadong en su ordenador.

Después del juego, se dirigieron a la cafetería para comer algo antes de partir. Como los tres habían llegado diez minutos antes, compraron las entradas primero. Cuando salieron, vieron a Hayase Asuke y su grupo de amigos caminando hacia ellos.

En su cabeza había una gorrita con dos bolas de pelo colgando de ella. Se balanceaban mientras ella corría hacia ellos. Rápidamente le hizo un gesto con las manos a Zhang Heng en el momento en que lo vio. Dos chicos y cinco chicas estaban aquí con ella. El guapo rubio debería ser el estudiante de intercambio de Ucrania. Puede que se viera imponente y genial desde fuera, pero una vez que lo conocieron, resultó ser algo tímido.

Todos ellos hicieron una simple introducción sobre sí mismos. Hayase Asuka incluso deletreó su nombre en chino. Se dieron cuenta de lo bueno que era el mandarín de los estudiantes de intercambio en el momento en que comenzaron las presentaciones. Entre ellos, el chico de Ucrania tenía el mayor dominio del mandarín, su bisabuela era de China. Así que se llamó a sí mismo Zhang Wei.

En cuanto al resto de las chicas japonesas, sólo una de ellas sabía hablar bien el mandarín. Dicho esto, todas podían comunicarse entre ellas sin problemas. Lo único era que tenían que decir las palabras lentamente, considerando que no era su lengua materna. La última chica japonesa ya había empezado a usar algunas de las frases chinas más complejas. Entre ellas, Hayase Asuka tenía el menor dominio del mandarín. Justo después de presentarse, instantáneamente volvió al japonés cuando habló con las dos chicas. Aparte de esas dos, las otras dos que podían entenderla eran Zhang Heng y otro chico que estaba tomando clases de japonés.

Viendo que todos estaban aquí, Zhang Heng distribuyó las entradas a cada uno de ellos. El parque de atracciones estaba lleno de miles de personas porque era Nochebuena, y la mayoría de los visitantes eran parejas. Incluso había unos cuantos Papá Noel de pie en la entrada para dar regalos a los que estaban a punto de entrar en el parque de atracciones, repartiendo regalos a los visitantes que entraban.

El grupo también recibió sus regalos, y cuando abrieron los suyos, descubrieron que todos habían recibido diferentes artículos. Zhang Heng consiguió un cortauñas, y Ma Wei encontró un llavero. Sin embargo, Chen Huadong fue el más afortunado de todos, recibiendo un pase de cortesía de la administración del parque de diversiones. En el momento en que Hayase Asuke abrió su regalo, ¡su cara se puso roja inmediatamente! Rápidamente lo escondió en su bolso antes de que nadie lo viera.

Uno de los chicos la persuadió para que mostrara a todos lo que recibió, aunque Zhang Heng podía adivinar el artículo que recibió. Inmediatamente, buscó un tema para distraer a todos. En su rápido pensamiento, Hayase Asuka miró a Zhang Heng con gratitud. Para ser honesta, el parque de diversiones no fue tan entretenido durante la noche. Por razones de seguridad, los paseos como montañas rusas y otras emociones fueron cerrados. Afortunadamente, el parque lo compensó con espectaculares actuaciones en directo.

Zhang Heng y sus amigos hicieron cola para probar algunos de los juegos que se ofrecían en las cabinas cercanas. Viendo que el espectáculo en vivo estaba a punto de comenzar, algunas de las chicas sugirieron que deberían verlo primero.

"Adelante, chicos. Yo le haré compañía", dijo Zhang Heng cuando vio que Hayase Asuka estaba más interesada en los juegos que estaba jugando.

"Yo también le haré compañía", dijo el otro tipo que hablaba japonés.

Zhang Heng no lo rechazó, notando que estaba tratando de cortejar a Hayase Asuka. En la dirección de darles más tiempo a solas, Zhang Heng se ofreció a ayudar a mantener sus pertenencias personales. Hayase Asuka estaba tan emocionada que no sospechó que algo andaba mal. Sin embargo, en secreto, el tipo estaba extremadamente agradecido por lo que Zhang Heng hizo.

Mientras Hayase y el tipo visitaban la casa embrujada, Zhang Heng se sentó en un banco para responder a una llamada. La llamada vino de Irlanda y eran sus padres. Ambos le desearon una feliz Navidad. Al mismo tiempo, se burlaban de él y le pedían que tomara una foto de la chica que estaba cerca de él. Zhang Heng entonces tomó una foto de la pareja a su izquierda.

"Eso es patético..."

Ahora, sus padres le regañaban, lamentándose de su vida en la universidad. A juzgar por el ruido de fondo, Zhang Heng dedujo que sus padres probablemente estaban frente a un teatro o un estadio de algún tipo. Como se les estaba acabando el tiempo porque el evento al que iban a asistir estaba a punto de comenzar, tuvieron que volver a un tema más serio. Le informaron a Zhang Heng que volverían a celebrar el año nuevo con él. Incluso prepararon una sorpresa para él también.

Zhang Heng no confiaba completamente en todo lo que decían. Hacía dos años que sus padres no celebraban el año nuevo con él. El año pasado, ambos estaban de vacaciones pero habían elegido viajar a África en lugar de celebrar el Año Nuevo Chino con su hijo. Inicialmente, Zhang Heng quiso preguntarles sobre Moresby, Tapio, y los cuervos que aparecieron en su mente cuando usó la escultura de madera.

Aunque lo más probable es que no calificaran como padres del año, seguían siendo expertos en todas estas cosas místicas. Considerando que iban a volver en un mes, Zhang Heng decidió que sólo preguntaría cuando volvieran a casa. Hablar de asuntos como estos por teléfono podría resultar más confuso.

Después de colgar la llamada, Zhang Heng se sentó en el banco un poco más. De repente, vio a alguien familiar en la multitud. Frunció el ceño, cuando miró de nuevo, la persona había desaparecido.