¿Que tanto puede doler el alma cundo está llena de recuerdos, esperanzas y promesas vacías? ¿Puede doler más? ¿Cuánto daño eres capaz de hacer? Que ni mi alma salió ilesa de este encuentro.
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Una historia donde el amor se pone a prueba, una y otra...
Abrí mis ojos sintiendo una pequeña presión sobre mi vientre que me impedía moverme. Al mirar en esa dirección pude ver a Ignacio acostado junto a mi, con su rostro al costado de mi vientre y sus manos al rededor de ella.
Seguro habían dormido muy cómodos... ¿pero y mamá que?
Me moví un poco intentando no despertarlo pero fue inútil, apenas tenía espacio para mí en esta cama.
- Amor... — sus ojos se posaron en los míos y solo esperaban temor haciendo que mi corazón comenzara a latir horrible... ¿quien despierta asustado?
- Ey ey... Ignacio — dije sentandome un poco en la cama y él recostó su cabeza en mi regazo mientras yo pasaba mis manos por su cabello
- Tuve un sueño re horrible — dijo mientras volteaba quedando frente a mi pancita... quedándose ahí unos segundos sin decir más
- ¿Y qué pasó? — insistí
- Va a sonar raro lo que te voy a decir viste, pero es re importante que sepas... — mi corazón volvió a latir desbocado
- ¿Ahora que mierda hiciste Ignacio? — él me dedicó una sonrisa y decidió ignorar por completo mi pregunta para al fin hablar
- Soñé que Alana tenía pila de wachos encima de ella queriendo ser sus novios — volvió a mirarme con esa expresión de terror en sus ojos
- ¿Me estás jodiendo Matías? — probablemente buscaba su muerte... — ¿Por qué me asustas así? — dije mientras volteaba a verlo dándole un golpe
- Eu — dijo mirándome totalmente serio — Es re importante flaca... no tendrá novio hasta los 30 años, 40, quizá 50.
- Déjala nacer primero ¿Si? — le di un pico en los labios y caminé hacia el baño
Al salir, noté que Ignacio se había vuelto a dormir así que decidí salir sin despertarlo... necesitaba un poco de descanso después de ese sueño "tan pesado".
Me dirigí a la cocina mientras ponía un poco de música para comenzar el día. Volví a tomar mi celular entrando a todos los mensajes sin leer...
Era todos del grupo de las chicas. Apenas había tenido oportunidad de hablar con ellas sobre todo esto. Respondí haciéndoles un pequeño resumen de todo y ellas claramente se volvieron locas.
Volví a mirar mis redes sociales y decidí entrar a IG y comenzar un vivo. Hace mucho no hacía uno y con Ignacio durmiendo apenas había algo divertido para hacer.
Tan pronto comencé se unieron...
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- Holaaaaaaaa... estoy muy nerviosa por alguna razón. Hace mucho no hago uno de estos. — dije mientras esperaba un poco a lo que llegaban más personas... — Estaré acá para responder preguntas. Para ser muy honesta, no tengo mucho que hacer debido al virus así que a ver... cuéntenme como les va a ustedes, háganme algunas preguntas... no lo sé.
