capitulo 2

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por fin en casa. Después de haber acabado la preparatoria jane y yo fuimos a estudiar a Princeton, ya que era nuestra universidad soñada ella estudió negocios internacionales y yo administración de empresas, además en esa universidad estudio Damián el cual es un año y medio mayor, hablando de el nuestra relacion en estos años no a mejorado mucho, el solo me ignora o cuando me habla es solo unas palabras y lo veo por jane más que nada, el a tenido muchas "amigas" y digamos que eso dolía mucho ya que cuando lo volteaba a ver el las manoseaba o besaba, y me sentía como una mierda, dolía más que los golpes que me deba Jane por torturarme viendolo, aunque ella no es muy diferente a su hermano, ella también tenía "amigos" aunque ella les nombra como juguetes.

-deja de pensar, ya llegamos- la volteo a ver para después mirar por el cristal la casa que tanto extrañe y en la que prácticamente me he criado gran parte de mi niñez, la mansión de los Tuell.

-extraño a mis padres y a los tíos- digo cuando bajamos.

-yo igual- me tomó de la mano y entramos a la casa donde nos esperan mis padres y los tíos.

-mis niñas-grita la tía Rose y mi madre, casi llorando.

nos abalanzamos a ellas en un cálido abrazo que tanto me hacía falta y Jane aunque no le agradan tanto los abrazos se ve muy mas emocionada de lo qie quiere mestrar.

-las extrañamos- dice mi tía viéndonos examinando que estemos bien.

-nosotras también- me separo un poco.

-y a estos viejos no los saludan.

miro a mi papá y al tío Harry con una sonrisa de oreja a oreja y los brazos extendidos, yo no dudo y me lanzo a sus brazos, quien viera a esos hombres de negocios fríos e intimidantes así de cálidos no lo creería, pero ellos con la familia son lo mas tierno del mundo.

-te extrañe-mi padre me da un beso en la coronilla.

- yo también-me separo de su abrazo.

Miro a Jane impaciente esperando a que haga la pregunta, ella solo gira los ojos con los brazos cruzados y niega, la miró con más intensidad a lo que solo suspira resignada.

-y ¿Dónde está el idiota?- tía Rose la mira mal para después reprenderla.

-niña es tu hermano- Jane mueve su rubio cabello, tan parecido al de su madre y la mira.

-Eso no le quita lo idiota- se encoje de hombros.

-es unos minutos viene, dijo que había tráfico, ya vez ha estado muy ocupado en la empresa aprendiendo- él es el vicepresidente de la empresa de su padre y uno de los próximos herederos del imperio Tuell.

Luego de un rato escuchamos que habría la puerta y era él, tan guapo como siempre, con esa postura tan envidiable usando un traje a su medida y su pelo rubio revuelto, que con solo verlo sentí que mi corazón se alborota.

-buenas tardes- dice caminando como si nada y mirando a todos para fijar su mirada tan impresionante en mi unos segundos para luego ver a la nada.

-cómo que buenas tardes, que no vez que han llegado las niñas- habla tía rose, no hace falta decir que ella es la que manda en la relación de mis tíos, él se para enfrente de Jane y esta dice:

-hola idiota- el la mira mal.

-hola rabiosa, tiempo sin verte- le resta importancia, y se acerca a su hermana para abrazarla a lo que aunque Jane sea fría se deja abrazar y es mas le devuelve el abrazo, el se separa besando su coronilla, me mira desinteresado para ponerse a un lado de su padre.

-saluda a Raisa, seguro estás emocionado de verla de nuevo- dice tía rose, mirándolo a lo que él se encoge de hombros y camina hacia mi.

- demasiado- dice con un tono sarcástico y se para enfrente de mí, mi corazón está a mil por segundo, tiene seis meses que no lo veo desde navidad y lo extrañaba tanto.

Él me extiende la mano, a lo que mi corazón que iba a mil por hora para y siento que me duele, pensando que me iba a abrazar como a su hermana pero resignada, tomo su mano y la estrecho como si de unos extraños se tratara, pero una estúpida parte de mi siente cosquillas en todo mi cuerpo cuando mi piel hace contacto con la suya, el rápido suelta mi mano.

-hola, tiempo sin verte- digo con poca fuerza.

-aja- se va a el comedor dejándome parada como tonta con ganas de llorar por ser una idiota por enamorarme de ese hombre cruel.

-bueno vamos a el comedor, deben de estar hambrientas- dice la tía Rose dejando a lado el incómodo momento.

todos avanzan pero Jane se queda parada para luego caminar hacia mi.

-No vale la pena Raisa, el no vale tus lagrimas- me toma la mano para darle leves caricias.

-lo se pero no puedo superarlo mi corazón no me deja por mas que lo intento- me toma de la cara para que la mire.

-pues lo vas a hacer, vas a agarrar ese ingenuo corazón y le vas a decir que deje de pensar en ese idiota o si no lo voy hacer yo- asiento sonriendo, ella es admirable ojala algún día sea siquiera la mitad de mujer que es ella.

-ahora vamos y te prohíbo siquiera mirarlo- toma mi mano para empezar a caminar al comedor.

cuando llegamos me siento junto mi tía y Jane, ya que mis padres están enfrente como también Damián y así paso la comida, entre preguntas de cómo nos fue y felicitándonos por habernos graduado, también nombrando la gran felicidad que sienten por los honoríficos que ha sacado Jane, ella nació para el éxito, una que otro vez miraba a Damián sin poder evitarlo, a lo que Jane me pellizcaba la mano y tía Rose me la sobaba como dándome ánimos.

...

No me mandasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora