-Vamos a hacer una pijamada- dice Jane a lo asiento emocionada.
- en tu casa, en la mía hoy va a tener visitas de unos socios y no vamos a poder hacer ruido- me mira dudosa para luego asentir.
-esta bien pero nada de películas de tristeza, desde hace una semana que llegamos me has obligado a ver esas asquerosidades- hace cara de asco a lo que rio.
-tu eres la tonta siempre te duermes a media película o te la pasas quejándote de todo- gira los ojos.
-y tu te la pasas llorando y no digo nada- de hecho si lo dice pero bueno
-yo escogeré las películas está bien- asiento sabiendo que va a poner.
Pasamos el día entre risa y compras para luego en la noche llegar a casa y dejar todo en el cuarto de cada una ya que en su casa y en la mía cada una tiene su cuarto pero muy pocas veces lo usamos ya que siempre dormimos juntas, bajamos a la sala a ver películas, la tele de su cuarto no sirve y no a comprado una.
-acción- dice viendo la pantalla a lo que asiento resignada, empieza la película y nosotras nos la pasamos platicando mientras que me hace una trenza en mi negro cabello tiene esa costumbre siempre que esta distraída o para sacar la ansiedad.
-no tiene ningún chiste la película- le digo.
-lo dices por que elegí una donde no hay ninguna escena de amor o una mujer ingenua- ella aprieta más mi cabello a propósito.
-eres aburrida, pero yo se que muy en el fondo eres una creyente del amor- ella ríe con ganas jalándome más el cabello a lo que me quejo.
-te equivocas mi inocente amiga, yo no creo en el amor yo creo en los hombres guapos y buenos en la cama- ríe- como el pelirrojo de la escuela como lo extraño y a su..-la interrumpo rápido.
-basta, ya entendí, no hace falta que me lo digas, pero yo se que un día te enamorarás de un buen hombre el cual atormentaras y será tu sumiso- ella termina de hacer mi trenza y me mira.
-oye no es mala idea, hasta voy a hacer mi propia película, mil látigos de Jane y su sumiso sucio, aunque para qué tener uno si puedo tener más- lo piensa como si se lo creyera para luego reventar de risa igual que yo.
-Eres todo un caso, pero si vendría bien un sumiso- ella me da palmadas en la espalda.
-ay por favor Rai, tu eres mas la sumisa- ahora ella ríe y yo no.
-¿Quién es la sumisa?- pregunta una voz gruesa entrando a escena.
-Raisa- la miro mal- Raisa está en busca de un hombre dominante en la cama y buen muchacho en la calle- le pegue en las costillas haciendo que tosa, ay no por que a mi, ahora el me esta mirando fijamente con esos ojos penetrantes.
-ya veo- piensa- no deberían de hablar de eso- dice.
-¿Por qué no, acaso no podemos?, si es la verdad, estamos en busca de un hombre alto, fuerte, guapo y con buen paquete para mi pelinegra amiga, si conoces alguno que entre cumpla las expectativas háblanos si no chau- le pegó de nuevo a lo que me lo devuelve.
El mira para luego retirarse por donde vino.
-Eres una bruja, si antes me trataba mal ahora no me va a querer cerca porque va a pensar que soy una ninfómana loca- ella se echa a reír y pienso en cambiar de amistades.
-eres una tonta, que no te das cuenta que ese es el punto, con el tiempo sabrás cuál era mi propósito- sonríe.
-¿como?- está loca.
-ya lo veras mi inocente Raisa, ya lo veras, hazme caso yo soy experta en hombres y se perfectamente lo que piensa cada humano masculino de este mundo- antes yo creía eso pero ahora veo que no.
-hazme caso, si esto no funciona nada lo hará, ahora a mirar la película, que mi hermano ha de estar muy ocupado.- la miro raro para luego asentir.
ESTÁS LEYENDO
No me mandas
RomanceRaisa Bech la mejor amiga de jane Tuell de toda la vida, sus padres son ricos pero nada comparado con la fortuna de los Tuell, de las dos ella es la dulce y la que sigue las reglas, pero algo que pocos saben es que la dulce Raisa lleva toda su vid...