Jane
Suspiro, estoy indecisa pensando en todas las probabilidades que pueden suceder con esta decisión, una decisión que nunca en mi vida creí tomar o siquiera pensar, siempre he sido directa y nunca pienso mas de dos veces para tomar una decisión, digo soy una mujer independiente de todas las formas mas no ahora ya que mi mente la ocupa el todo el tiempo, y es frustrante no poder saciarme de el por mas que lo pruebe no puedo estar con otro que no sea el, y no puedo dejar de verlo y no sentir los latidos de mi corazón y eso me jode de todas las maneras, siempre que me acuesto con el que es casi todos lo días no me aburro, frustrada golpeo el volante.
Nunca nadie me a dicho que hacer, me gusta estar sola y por ultimo no tengo que impresionar a nadie, no le debo respuestas a nadie, eso es bueno, muy bueno, pienso mientras manejo a su casa para tirarme desde el acantilado sin paracaídas con lo que voy a hacer pero no creo arrepentirme, el es el indicado me repito mil veces en la cabeza cuando estaciono en su casa.
-Al carajo- digo mientras salgo del carro para tocar su puerta como desesperada.
-Señorita Tuell que gusto verla- dice el hombre que creo que es el asistente de Massimo.
-El gusto es mío, ¿esta Massimo?- el asiente con una sonrisa.
-Esta en su cuarto vis..- no lo dejo terminar ya que si lo hago mas tardío me arrepentiré, paso a lado de el a las escaleras donde las subo con rapidez, su asistente no hace intento de seguirme y eso no me interesa como quiera, cuando llego a su puerta voy a tocar pero niego, así que la abro encontrándome a ese hombre que me tienta a cada minuto con la camisa desabotonada, enseñando todo lo que es mío, suena bien, es mío, el va a hablar cuando voltea a verme pero yo voy hacia el, lo tomo de la camisa y lo acerco a mi besándolo con hambre, el me abraza hacia el de inmediato siguiéndome el paso, me encanta pienso separándome.
-Acepto- digo volviéndolo a besar.
-¿Que es lo que aceptas mi tigresse?- dice cuando se separa.
-Acepto tu propuesta de ayer y lamento salir corriendo, no sabia que hacer pero hoy lo se todo, soy tu mujer y acepto que tu seas mío, acepto tener algo contigo mas que acostones, me embrujaste, me enamoraste - el abre los ojos con sorpresa para luego sonreír, y levantarme entre sus fuertes brazos en el aire y darme vueltas, haciendo ver evidente la diferencia de tamaños, sonrió ya que esto es lo que quiero y no me arrepentiré no esta vez, me baja.
-¿estas segura?, digo porque después de decir si te prometo que nunca te dejare ir, aunque tu me quieras lejos de ti y me odies nunca te dejare ir- me dice viéndome seriamente, sonrió niego, poniéndome de puntillas besándolo.
-Si- digo el sonríe tomándome entre sus brazos y llevándome estilo nupcial a la cama dejándome delicadamente.
-Eres la mujer que me complementa, nunca pensé encontrarte, perdón por todo, perdón por no esperarte perdón por mis errores y secretos, eres la persona mas importante en mi mundo, tu me haz enamorado- sus palabras son dulces pero a la vez melancólicas, no sabiendo a lo que se refiere lo tomo de su camisa jalándolo a mi, muy cerca de mi cara.
-Ya me estoy arrepintiendo, no me acordaba que eras tan cursi- me rio en su cara.
-Así te enamore- dice viéndome con burla.
-Cállate y hazme el amor- lo jalo besándolo con todo de mi, y pensando que es la primera vez que digo "hacer el amor", la Jane del pasado se estuviera muriendo de tan solo verme como estoy ahora por un hombre, sonrió en el beso pensando en eso, cambio de posición poniéndome arriba de el besando su cuello y pecho dejando marcas.
-Te amo Jane como nunca he amado a alguien- sonrió entre los besos llagando a sus labios nuevamente, lo beso mientras que entre caricias se fue la ropa de nuestros cuerpos quedando desnudos los dos, sin capas que nos estorben, el bajo sus caderas embistiendo mi cuerpo de manera lenta y fuerte, una sensación de vacío se desapareció para sentirme llena, el se movía profesionalmente contra mi mientras que en mi oído escuchaba sus gemidos y el escuchaba los míos haciendo sintonía, amaba este momento, el es mi hombre perfecto en todos los sentidos, siento como llega el clímax minutos después sintiendo mi cuerpo liberarse al mismo tiempo que el haciendo la sensación mas exquisita, el se acuesta a un lado de mi para a los minutos ponerse encima de mi denuevo, sonrió viendo a su amiguito denuevo despierto.
- Despierto todavía- digo y el sonríe.
-Siempre listo para ti, ya deberías de acostumbrarte, aunque tu siempre lo estas- sonrió volviendo a juntar mis labios con los de el, encajando perfectamente de todas las maneras, uniéndonos de todas las formas haciendo que este sea el mejor sexo de mi vida y sabiendo por primera vez que es hacer el amor.
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-Te amo- dice besándome cuando estamos simplemente acostados abrazándonos mutuamente disfrutando de nosotros, sin importar nada, sintiendo caricias mutuas, calmados viéndonos mutuamente.
-Massimo- empiezo a decir pero el niega.
-Esta bien que no me ames, no te fuerzo se que algún día lo obtendré, además siento que no lo merezco, no te merezco- sonrió, se que no me merece nadie me merece pero ¿Por qué siempre dice eso?, niego.
-Eres un idiota, no es que no te ame, solo que tiene tiempo que no se lo digo a nadie, solo se lo he dicho a dos personas, a mis padres y cuando era pequeña, pero sea lo que sea que siento por ti se que no es un simple capricho, ni un gusto ya que es un sentimiento extraño que nunca lo había experimentado pero si no es amor no se que mierda es- lo veo sonreír.
-Eres perfecta- sonrió.
-Lo se, me lo dicen siempre- lo beso.
-Yo te lo diré diario ahora aunque no creo que haga falta ya que lo sabes- lo abrazo mas a mi.
-Sobre hacer la relacion al publico- siento que se tensa- no quiero que se haga hasta que me sienta mas segura- lo siento relajarse, pero luego frunce el seño.
-¿no te sientes segura?- asiento.
-Claro solo no quiero que sea ahora, con un día saliendo- asiente y yo recuerdo algo.
-Pero le tengo que decir a Damián, no me malentiendas, no quiero su aprobación, solo quiero decirle, siento como si le hubiera robado la novia al salir con su mejor amigo y creo que único, además quiero que cada vez que te vea te imagine haciéndole cosas con su hermanita, será épico ver su cara de hilo con una mueca de asco - me rio y el sonríe.
-No es eso excitante- arrugo la nariz.
-Mucho y mas si es alguien tan sexi como usted mi francés amigo grande- el se ríe, pero luego se pone serio.
-No le digas nada- frunzo el seño.
-¿que?- digo.
-Yo tengo que hablar con el primero, seré yo el que lo enfrente- sonrió.
-Esta bien, tu ganas- Yo siempre gano pienso.
Me la pase toda la tarde con Massimo, sintiendo piel con piel, mientras que nos acariciábamos teniendo mucho "amor" por así decirlo en varias partes de su cuarto muchas veces que deje de contar haciendo que cuando salí de su casa sentir mis piernas muy poco, valió la pena pienso, si que valió la pena, me subo a mi carro después de decirle que no me lleve el ya que yo traigo carro, ganando después de unos minutos la disputa, comienzo a manejar unos minutos para luego estacionarme en la calle borrando mi sonrisa tomando mi celular, busco el numero de mi hermano llamándolo pero no contesta es un inútil, que se puede esperar de el, así que le mando un mensaje.
Agenda y haz espacio para mañana en la tarde, es un tema serio, tenemos que hablar, no te preocupes no es un tema tan importante, pero me debes de responder con sinceridad, nos vemos mañana, que no se te olvide o me conocerás, hasta mañana.
Mañana tendré que hablar con el idiota, quiero y siento que es lo mejor o hablar con el y no Massimo, una platica entre hermanos sobre que uno de los hermanos se esta cogiendo al mejor amigo del otro, veo que nos parecemos mas de lo que creía pienso riendo por ese pensamiento.
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Espero que comenten que le pareció o si ven algún error o no les pareció algo, en el próximo capitulo se sabrán las confusiones que tienen en este capitulo y también lo narrara Jane, nos vemos en el otro capitulo, los quiero.
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No me mandas
RomanceRaisa Bech la mejor amiga de jane Tuell de toda la vida, sus padres son ricos pero nada comparado con la fortuna de los Tuell, de las dos ella es la dulce y la que sigue las reglas, pero algo que pocos saben es que la dulce Raisa lleva toda su vid...