Tamaki Amajiki. || One-shots

10. Coqueteo.

Los 4 grandes de U.A se dirigían a una cafetería cerca de la Academia, todos con unas sonrisas en su rostro, estaban felices por qué después de tantos estudios y pasantías, al fin habían decidido darles unas merecidas vacaciones, aunque sólo a los de 3-A.

Era invierno, así que el clima era muy frío. Todos iban bien abrigados y con bufandas.

Mirio y Hadou hablaban alegremente y detrás de ellos Tamaki e Inna sólo se veían se reojo y se sonreían levemente, con un sonrojo en sus mejillas.

-Hey, Amajiki-kun- Inna lo llamó y el chico al escucharla sintió un escalofrío recorrerlo- Con éste frío, ¿apoco no se te antoja el infierno que vivirás a mi lado?

Ella soltó unas risas al igual que Mirio y Nejire, quiénes a pesar de hablar entre ellos, seguían al pendientes de sus dos amigos. Tamaki se sonrojó hasta las orejas y tragó saliva, mientras buscaba de reojo una pared para pegar su cabeza.

-Y-yo no diría que sería un i-infierno, Inn-chan- murmuró y como pudo le dio una sonrisa, que ella respondió con dulzura.

Amaba a ese chico.

Llegaron a la cafetería y se sentaron, Inna y Nejire quedaron frente a Tamaki y Mirio. Pidieron sus órdenes y le pagaron por adelantado al mesero.

-¿Ya se pensaron a que agencia se irán una vez que nos graduemos?

-Aún no lo sé, tengo algunas en mente, pero después de todo aún tenemos tiempo para pensarlo.

Inna suspiró, el que hablaran de lo que harían después de la escuela le producía mucha nostalgia pues se preguntaba si los caminos de todos se separarían.

-¿Y tú, Inna-chan?- Nejire la miró atenta- ¿Ya lo pensaste?

La rubia asintió.

-Estaré un tiempo con Fatgum, pero el héroe Hawks me ofreció un buen trato, así que él va a ayudarme a hacer mi propia compañía- Inna sonrió orgullosa.

-Tienes grandes planes, Aihara-san- Mirio sonrió.

-Por supuesto, tengo altas expectativas sobre mi futuro. Estoy segura que aún si Hawks no me ayudara, yo podría poner mi propia compañía sola.

-¡Eso es genial, Inna-chan!

-S-si tú pones tu propia compañía- Tamaki, quién había estado callado un rato, se unió a la conversación, ganándose la mirada de sus tres amigos. Suspiró nervioso- ya no t-tendras tiempo para mi... ¡n-nosotros!

Inna sonrió con ternura y tomó la mano del azabache, quién se sonrojó al sentir su tacto.

-Siempre puedo hacer un espacio para pasar tiempo contigo, Amajiki-kun- Nejire carraspeó e Inna la miró a ella y a Mirio con una sonrisa apenada- ¡Y con ustedes igual!

Los susodichos cambiaron su expresión de reproche por una sonrisa.

-Además, Amajiki-kun, tú y yo nos vamos a casar, así que nos estaríamos viendo casi todo el tiempo- agregó con simpleza.

Tamaki se atragantó con su café y comenzó a toser, Mirio le dio palmaditas en su espalda y miró a Inna con una sonrisa divertida.

-Tus coqueteos siempre son tan directos.

-Ah, ¿sí?- Inna alzó una ceja, divertida.

-Aún así a Tamaki-kun no parece disgustarle- dijo Nejire mientras veía a Tamaki quién ya se había calmado y evitaba a toda costa las miradas atrevidas de la rubia- ¿Verdad que no, Tamaki-kun? ¿Te gustan los que coqueteos de Inna-chan? ¿Por qué estás tan sonrojado? ¿Y por qué lo niegas, Tamaki-kun? ¡Te estoy viendo, pareces un tomate?

-P-por favor, no lo hagas m-más difícil- murmuró el azabache mientras pegaba su frente en la mesa.

-¿Te parece un problema, Amajiki-kun?- Tamaki alzó la mirada hacia la rubia, quién lo miraba divertida y negó lentamente con la cabeza. Ella sonrió con malicia y se inclinó hacia adelante, apoyándose sobre sus codos- En ese caso, creo que debería seguir coqueteando contigo otro rato.

Le guiñó un ojo. Él se ruborizó de nuevo y volvió a pegar su frente, ésta vez con una sonrisa boba en su rostro.

-Cínica- murmuró Mirio hacia Nejire, refiriéndose a la rubia y Nejire soltó unas risas.