Remember: 21

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La llevé al estudio de tatuajes de un viejo amigo. Tyler es conocido por como mantiene su lugar. Tiene todos sus permisos y la verdad, amo su trabajo. No la hubiera llevado con nadie más.

Imprimió su tatuaje con las letras que quiso y me dijo donde lo quería. Me ahorré decirle que la muñeca es un lugar algo doloroso para un tatuaje. No quiero asustarla y quiero que disfrute haciendoselo. No porque tenga que ver conmigo, sino por qué es su primer tatuaje.

Le pedí a Tyler que no le dijera tampoco que podía dolerle. Ver su carita llena de nervios fue la cosa más tierna que vi ese día.

Se sentó delante de Tyler y lo vió cambiar el material de la máquina. Me pareció gracioso asustarla un poco, así que comencé a preguntarle cosas a mi amigo.

—¿Cuántas agujas piensas ponerle?

Abrió un paquete nuevo y nos lo mostró. —Son Doce.

La cara de mi nena quedó pálida por un instante, cosa que me dio mucha risa.

—¿Todavía quieres hacerlo?

Levantó la mirada y me sonrió. —Claro que quiero.

Tyler marcó la plantilla del tatuaje sobre su muñeca y le puso un poco de anestesia. —¿Estás lista, Rye?

Asintió y dio un pequeño brinco al escuchar la máquina en marcha. Cerró fuertemente los ojos cuando Tyler comenzó a dibujar las líneas y apretó mi mano. Tyler trató de ser lo más cuidadoso posible con ella, pero pude ver qué de verdad le estaba doliendo.

—Nena, ¿Quieres que pare? — Negó y le pedí a Tyler que detuviera un poco el trabajo. —Hey, mírame. — La tomé del mentón. —Linda, podemos parar si quieres, no tienes que terminar hoy.

—Valdrá la pena el dolor.

Miró a Tyler y él entendió que quería que siguiera en lo suyo.

El tatuaje poco a poco comenzó a tomar forma y sus facciones se fueron relajando cada vez un poco más gracias a qué Tyler nunca dejó de aplicarle la crema de la anestesia. Llegó un momento en el que finalmente pudo respirar.

Una hora más tarde, Tyler aplicó un poco de desinfectante sobre su piel y le sonrió.

—Fuiste muy valiente, Rye.

—No fue tan insoportable como creí.

Rye le dio las gracias a Tyler y pagó su tatuaje. No me dejó hacerlo, así que estoy seguro que lo hizo para molestarme.

—¿Nos vamos?

Subimos al auto y llamó nuevamente a sus padres para avisarles que se quedaría conmigo otra vez y no dudaron en aceptar. Minutos después recibí un mensaje de su madre diciéndome que está contenta con que Fue quiera pasar más tiempo conmigo.

Nunca dejó de mirar su muñeca ni de tocar suavemente su piel. Notaba la emoción que sentía, al igual que yo.

—Ahora vas a estar conmigo siempre.

Su repentina confesión hizo que mis ojos se llenaran de lágrimas.

—Lo sé, amor... Y aunque no tuvieras el tatuaje, siempre estaré contigo... Por siempre, y un día más.




























¿Ustedes tienen tatuajes? :3


Hacerse un tatuaje es algo muy serio, es algo que tendrán siempre. Si no es algo que de verdad signifique algo, no lo hagan.




Remember •|Always, Vol. 2|•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora