Remember: 31

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Quisiera esperar a Jon en la camioneta con los demás para ir al hotel a darnos un baño, pero pasó casi una hora cuando Doc nos dijo que Jon había decidido ir a tomarse un trago, lo cual es algo raro, ya tiene mucho tiempo que no lo hace.

En fin, cuando llegamos al hotel, Richie se ofreció a quedarse conmigo en la habitación para decorarla un poco, para que cuando Jon llegue, pueda darle la noticia tan increíble. Ojalá no llegue muy tarde o muy pasado de copas.

—¿Crees que se pondrá feliz? — Le pregunté de pronto a Richie.

—Claro que si. — Puso su mano en mi apenas abultado vientre y sonrió. —Él imaginaba esto, con nadie más que no fueras tu.

Tomé su mano y le sonreí. —Gracias...

Se acercó a mi y me abrazó contra su pecho. —Verás que todo saldrá bien, nosotros nunca te dejaremos sola.

Sonreí, y caí en la cuenta de que yo tampoco elegiría una vida que no fuera con él.
















Lo esperé durante mucho tiempo. Richie se fue a descansar y Jon aún no llegaba; le llamé, le envié mensajes y nunca me respondió. Me asusté, pero todo pasó cuando dieron más de las dos de la mañana.

Escuché la puerta abrirse y me levanté al instante de la cama, pero lo que vi no me agradó mucho.

—¿Jon...?

Me miró parada al pie de la cama y comenzó a reírse. —¿Q-Qué haces aquí?

Me acerque un poco a él y lo tomé por las mejillas. —Bebiste de más, Jon.

Me apartó las manos de una manera algo brusca, haciéndome caminar hacia atrás. —Eso no te importa. — Se recargó en la pared para no caerse y de paso, encendió la luz. Sus ojos estaban inyectados en sangre, parecía que había estado llorando, y emanaba un fuerte olor a Vodka.

—Dijiste que sólo tomarias un trago.

—Uno... Dos, diez... ¿A quien le importa?

—A mi... Porque tengo algo importante que decirte...

—¡Oh, es verdad! — Me gritó de pronto, interrumpiendome. —Cierto... Felicidades, d-deben estar muy contentos...

—¿De qué estás hablando?

—¡Riley! — Siguió gritando. —Espero que... Espero que tú y Richie estén muy contentos...

—¿Qué tiene que ver Richie en todo esto?

Metió torpemente su mano en la bolsa trasera de sus jeans y sacó un papel arrugado que me lanzó al piso, y mientras yo lo recogía, seguía oyendolo hablar, y cuando finalmente vi que era, lo entendí todo.

—Felicidades, Rye...

Lo miré a los ojos y me encontré a un completo desconocido. Ya no me miraba como antes, y entendí a qué se refería. No otra vez, por favor...

—Jon, no creerás q...-

—¡CÁLLATE!

Se abalanzó sobre mi, casi tirándome al piso, de no ser por la cama que estaba detrás de mi.

—¡ME MENTISTE!

Notó mis ojos llenos de miedo, pero no sé detuvo; su agarre sobre mis brazos se hizo más fuerte.

—¿¡De que hablas!?

—¡Deja de mentirme! ¡Sabes que ese hijo no es mío!

Mi forcejeo no sirvió de mucho, sólo sentí su peso aún más sobre mi, y no pude hacer más que gritar... La habitación de Richie está al final del pasillo, así que David es mi única salvación.

—¡DAVID! ¡DAVID!

—¡Deja de gritar, Maldita mentirosa!

—¡Jon, sueltame! ¡DAVID!

Y Le agradecí al cielo cuando escuché la puerta abrirse.

—¡Jon! ¡Sueltala!

Los jaloneos de David no sirvieron. Jon se había prensado a mis brazos y no me quería soltar... Me estaba lastimando.

—¡Jon! ¡Sueltala de una vez!

Y, finalmente... Me soltó.

Empujé con mis piernas lo que quedaba de su cuerpo junto a mi, y lo único que recordé ver, fue como David lo estampó contra la pared.

Remember •|Always, Vol. 2|•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora