Entrenar / El hierro tambien se quiebra

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Este día hacía una temperatura agradable, podría decirse.

Había pocas nubes, el sol se elevaba con fuerza y las cigarras coreaban con su melodica (o insufrible) forma de comunicarse.

Las viviendas no acabadas de construir, cubiertas por el musgo y las crecientes plantas que demostraban su abandono.

Y las calles semi arenosas que apenas se definían con la tierra de campo.

Y por supuesto nuestros heroes, los alumnos de la clase A1 de la U.A que escuchaban interesados las palabras de All Might, no había ningún otro profesor ahí.

-Teniendo en cuenta todo el "tiempo libre" que teneis, he de sugeriros, que aprovecheis estos momentos para entrenar vuestros Quirks y vuestra forma física habló All Might.

Se oyó un sordo quejido aparte del incesante y estridente ronroneo de las cigarras.

Decidieron no hacerle caso.

Los alumnos adoptaron poses pensativas.

-A mi parecer creo que ciertos momentos del día deberían emplearse en aumentar el control de vuestro poder, esta vez, tendrá que ser sin profesores... -se paró fingiendo una pausa para tomar el aliento, pensaba en Midnight y 13- ...pues nuestras ocupaciones para intentar mantener la situación bajo control y nuestras busquedas para encontrar más heroes no nos dejaran tiempo- finalizó.

Todos asintieron.

Algunos con tono quejajumbroso.

Y asi se sucedieron los días.

Cada uno le dedicó las horas que quiso, por tanto siempre había algunos que después de apenas una hora se iban a dormir placidamente y se pasaban horas no haciendo nada.

Otros sin embargo hasta se excedían, pensando claramente en la situación, en el estado de sus familias, en sus parejas, en el odio aferrimo a las maquinas humanoides que destruyeron la U.A, al "desgraciado" enmascarado como solían llamarlo, y también en ellos mismos, en el miedo a ser capturados, atrapados, metidos en salas oscuras y cerradas como simples animales, para ver privada su libertad, para ser torturados, para ser utilizados y para vivir bajo el humillante control de unos seres tan cinicos como esos "empresarios".

Ya no sabían como llamarlos.

Pasaban horas haciendo ejercicios fisicos, meditando para elevar la concentración y efectividad de su Quirk (aunque esto solo lo hicieran Todoroki y Momo), o simplemente entrenar y utilizar sus Quirks a diario para perfeccionar las acciones imperfectas.

"Joder" pensó Kirishima "198, 199, ¡200!".

Kirishima no se creía lo que estaba viendo.

Contabilizaba las flexiones de Ashido, que hacía con una mano levantando todo el cuerpo, que mantenía en equilibrio en el aire. Ashido saltó y viendo sus extremidades entumecidas se calló sentada sonriendo y lanzandose vitores a si misma.

Kirishima tambien la habría felicitado pero estaba algo... ¿atontado?

Ashido acababa de hacer delante de él ese tipo de flexiones, doscientas con la mano izquierda, otras doscientas con la mano derecha.

Creyó estar en el cielo, cuando pensó que su novia compartiría uno de sus hobbies más preciados.

Entrenar como un enfermo.
(Más o menos)

Kirishima se posicionó detras de Ashido y empezó a masagearle los hombros viendo que sus brazos temblaban ligeramente.

-Oye, nunca me dijiste que estabas en tan buena forma- dijo mientras veía Ashido mover la cabeza de un lado a otro intentando estirar su cuello.

BNHA: Amor entre las adversidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora