BNHA: Amor entre las adversidades

Villanos e hypocritas

-¿¡Perdona?!- exclamó Osamu delante de la mesa de los directivos de la organización.

Ese día, por razones desconocidas, habia acudido la gran mayoria de plazas de gran importancia de la empresa.

Los asientos de aquéllos que no vinieron fueron otrorgados temporalmente a Shigaraki Tomura, Kurogiri y un tal Dalí.

Lo cierto es que los empresarios lo llamaban Dalí por su... ehem... cuadro facial.

A Dabi esos motes no le importaban lo más minimo.

De hecho, Resshõ se llevaba bien con él.

Por la forma de... intentar ir al grano lo más rapida y eficientemente posible y evitar estupidas reuniones de organización social y militar.

Para cumplir un objetivo solo se necesitaban tres cosas:

Un ideal.

Un plan.

Y poder.

Y esos "empresarios" gozaban de este ultimo en demasía.

Tenían la segunda de antemano.

Pero carecían de la primera y eso les podía costar bastante caro.

Eso los atrajo.

¿Los?

Si.

Los villanos, aquellos más inteligentes, decidieron unirse al enemigo.

Como se dijo una vez.

Si no puedes con tu enemigo... unete a él.

Volvamos a la mesa de reuniones.

Osamu tiene los nervios ardiendo.

Se imaginaba que Resshõ pudiera ser egolatra y poco respectuoso.

Pero hablar con Tomura era como discutir con un niño.

Era agotador, ademas si ese niño tenía todas la capacidades necesarias para destruirte.

En unos segundos.

-Te perdono, pero que sea la ultima vez...- dijo Shigaraki de la forma más provocativa posibles.

Osamu se frotó el entrecejo.

Un hombre intervino antes de que se creara más tensión.

-Considerando las propuestas, no son realmente necesarias, lo más importante es si nos vais a apoyar como venías diciendo...- hizo una pausa -Vuestras condiciones serán escuchadas y seleccionaremos las más ajustadas para ambas asociaciones, solo necesitamos saber si estáis con nosotros, vuestro futuro depende de ello- Dabi sonrió, estaban siendo muy inteligentes para la negociación.

-Habeis encarcelado a la chica que normalmente suele ir conmigo- dijo él inexpresivo y con un brillo letal en sus ojos turquesas.

-Naturalmente podemos soltarla, curaremos cualquier herida que hayan podido causarle nuestros agentes y... -El hombre no acabó de hablar cuando Dabi empezó a reirse levemente.

-¿Pero que dices?- le tuteo con una sonrisa siniestra que desagrado a la mayoría menos a Tomura y Resshõ.

-Esa chica me trae sin cuidado, por mi como si la desollais viva, no quiero estorbos emocionales cuando tengamos que actuar- su tono se calmó.

"Estorbos emocionales"
Tomura sabía bien a que se refería el hombre de espesas cicatrices.

Fue Dabi el que informó de la relación de la asesina y el alumno.