Sonrisa de colmillos rotos

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No se como de sensibles son, pero esta capitulo tiene escenas  sangrientas desagradables.

Nada más abrirse la puerta, un proyectil demasiado pequeño para verlo, rozó limpiamente la mejilla de Dabi, provocando un pequeño pero violento sangrado.

El corte era limpió y poco profundo y sangraba lo suciciente como para poner algún punto.

Dabi abrió lo ojos y se puso un mano en la mejilla herida, con calma y lentitud.

-Vaya...- dijo él dirigiendo la mirada a la sonriente (y destrozada) Toga.

Tenia un aspecto horrible, y al rededor suyo habia restos de dos robots, los cuales no habian sido recogidos por falta de ganas.

La chica estaba sobre una camilla en vertical, con una cintas de alguna poderosa aleación de metal muy resistente y flexible.

Su cuerpo reposaba recto y perfectamente alineado, solo podia mover del cuello para arriba y su blanquecina piel apenas se veia por el rojo, el negro y el morado de la sangre y los ematomas.

Su cara era algo desagradable, su parpado izquierdo estaba cerrado con un horrible color morado oscuro.

Sus labios inferiores estaban partidos, las mejillas rojas y amoratadas.

Apenas podia abrir el ojo izquierdo, rojo a más no poder injectado en sangre.

Clavicula rota en proceso de reconstrucción.

Sus muñecas estaban amoratadas, indice y pulgar derecho rotos, meñique dislocado.

Rodilla entumecida...

Y una larga y angustiosa lista de horribles heridas de menor grado.

Pero la chica sonreia.

-Mier...da... he f-falla...do- farfulló mientras escupia sangre.

Dabi pasó un dedo por su sangrante mejilla y lo limpió sobre una de las paredes de la celda.

Resshõ no se inmuto.

Toga profundizó una sonrisa en la cual se notaba algo... diferente.

Pues habia solo tres de los cuatro caninos.

Dabi profirió una risa interna.

Le parecia una ecena sublime, pero debia controlarse.

Uno de sus moños estaba deshecho y por tanto, la mitad derecha de su pelo estaba suelta y los rubios mechones cubrian parte de su cara.

Dabi se acerco a la cara de Himiko para mirarla a los ojos.

-¿Creiste que no nos dariamos cuenta de tu cuento de hadas con el chico de las explosiones?- preguntó él con un tono amenazante y tranquilo.

Toga fue a decir algo pero en vez de soltar palabras ecupió sangre sobre el rostro de su excompañero.

El hombre dibujó una mirada aburrida mientras intentaba quitarse la sangre.

La chica paso la lengua por sus dientes hasta que llegó al que faltaba, de donde sacó un extraño alfiler.

"O sea... que lo que disparó era un alfiler" afirmó Resshõ mentalmente.

-No tardaremos en darle caza a él tambien... y entonces sera cuando grites de dolor- Dabi hablaba como si supiera perfectamente de que estaba hablando.

Esi fue un dato que se le escapo a Toga.

-El amor es esa sensación tan "maravillosa" que has experimentado... -formó una siniestra sonrisa- pero tambien duele, mucho-

Himiko sacudió la cabeza para apartar una idea recien llegada a su mente.

-Si... exacto- continuó con sus sonrisa- Cuando lo atrapemos, lo torturaremos aqui mismo, lo veras y oiras gritar de dolor y no podras evitarlo juju- nadie lo notó, pero algo se revolvió en el estomago de Toga.

-Mons...truo- balbuceó la chica.

-Tu tambien lo eras Himiko- respondió al insulto con tono severo.

Un tenso silencio se generó en la habitación.

-Espero que te lo pases en grande pudriendote aqui... traidora- dijo irguiendose.

-Podria... ser p-peor- jadeó.

-Cierto, si yo estuviera a tu cargo desearias morir en cuestion de minutos- sus ojos se clavaron en los de Toga.

-Cuando salga de aqui... te matare... sera, una muerte lenta... y dolorosa- la chica sonrió haciendo surgir el alfiler lentamente de entre los dientes.

Dabi fue bajando la mirada, su uniforme de colegiala estaba intacto si obviabamos las manchas de su sangre.

A los pies de la silla se encontraba un visinle charco de... más sangre.

Aquella habitación daba escalofrios.

Dabi volvió a mirarla a los ojos una vez más y dió media vuelta.

-Hasta nunca Himiko Toga- dijo al salir y que la puerta se cerrara tras él.

Himiko clavo el alfiler sobre la parte de los hombros del uniforme escolar.

Y un fuerte ataque de tos sacidió su organismo acompañado con el liquido rojo tan común en aquel lugar.

Una linea de sangre se deslizó desde la boca a la barbilla y esta, comenzo a gotear desde el mentón, cayendo en pequeñas gotas sobre el charco.

Abrió la boca apretando sus dientes mientras unas lagrimas se derramaban por sus mejillas mezclandose con la sangre y cayendo de igual forma al charco bajo sus pies.

"Duele".

Y poco a poco se durmió, le faltaban fuerzas, le faltaban enegias.

Le faltaba sangre

Se le acababa todo, lo unico que le quedaba era confiar en que Katsuki hubiera conseguido escapar.

"Espero que a ti... no te hayan encontrado".

.

Katsuki: ¡MUERE AUTOR, MUERE!

Ayuda.

Creo que me pase un poquito con las torturas, no se.

En todo caso... ¿Que sucederia si Bakugou se encontrara esta escena?

No quiero ni imaginarmelo.

Adios 🐧

BNHA: Amor entre las adversidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora