La Diabla

47- el problema de Steven

Hola mis chicas, hoy narra Steven 😍😍  estaba de vacaciones y algo bloqueada mentalmente, pero sigo aquí 😍☺😘😘 estaré leyendo sus comentarios.

...

Steven:

Si pensé que dolería perder a la primera persona que me hizo enamorar cuando apenas era un jovencito, o a la segunda que pensé que era el amor de mi vida y que finalmente seríamos felices, Zoe, pues no, ese sentimiento no se compara con el dolor que me causa el rechazo de mi diabla, Karen, mi preciosa diablita.

Y duele mucho más el hecho de amarla profundamente, de ilusionarme como un tonto enamorado con la idea de que ella estuviese embarazada de mi, y no fue así.

Recordar que hace una hora la ví en esa camilla con ese hombre qué, aparte de ser su amante, es su doctor, y de mirar aquella pantalla en donde pensé que lo veía ahí (aunque en realidad no se veía nada) era mi hijo. El futro de nuestro amor. Porque sí, lo sé y lo siento, Karen me ama, tanto como yo a ella, lo veo en sus ojos que aún brillan como la primera vez, lo reflejo en cómo demuestra que soy su debilidad.

Pero es obvio que está cegada por venganza, que ella no me quiere a su lado porque teme de darlo todo por nada.

Lo que no sabe o entiende, es que cuando lo daba todo, yo era quién me prohibia amar y quién temía de hacerlo.

—¿Qué pasa, Steven? Te estoy hablando,

Escucho lejano la aguda voz femenina, levanto la mirada y me encuentro directamente con mi colega Olivia.

Olivia estudió conmigo en la Universidad, es una chica delgada, piel bronceada y de piernas largas, parece modelo de pasarela y mucho más porque le encanta vestir a la moda.

—Oh, perdón, no te estaba escuchando, estaba pensando en algo —respondo intentando mostrarme seguro de mis palabras.

—O alguien, quizás —dice con un tono irónico que no se me hace gracioso.

Odio cuando adivina las cosas.

Olivia ha sido una buena compañera, y ahora estamos trabajando juntos en un proyecto que podría llevarnos a la sociedad de la empresa. Si logramos convencer a la señorita Camila Paterson de firmar con nosotros un contrato millonario a cambio de que nos venda su terreno  de tierra ubicada en un buen lugar, excelente para construir un residencial.

Pero ella se niega hacerlo a vendernos a nosotros porque aún tiene dudas.

—No es nada, ¿lograste comunicarte con Paterson sobre la cita para el sábado?

Olivia parece pensarlo, no muy convencida.

—Ella quiere más dinero del que ofrecemos. He pensado en algo, —su mirada me dice que algo bueno no pasa por su mente—, que la intentes seducir o coquetear.

Me negué totalmente.

—No, no haré eso. No voy a mezclar mi trabajo con lo personal, además, ya mi corazón tiene dueña y no pienso arruinar todo.

Se sienta sobre mi escritorio dudando de mis palabras.

—Ya lo has arruinado, querido. Esa chica no va a volver contigo aunque encuentres a Nemo primero que Doris. Así de sencillo, necesitamos hacer éste contrato, enfocate.

De hecho con mi estado de salud, si quiero no trabajo, pero estaba muy aburrido sin hacer algo más que estar encerrado.

—No Olivia, eso no va a suceder, a mi no me interesa Camila, y aún si me interesara, no la utilizara para sacarle provecho. Si la seduzco podría tener serios problemas con el jefe si se interara. Y sobre lo de Karen, ella si me ama, solo que está enojado. Es más, me harás un favor.