Capítulo dedicado para ti que estás leyendo ésto.
No es tan largo pero iré haciéndolo así porque no queda mucho por acabar el libro. 😘😘
...
Bebemos, bailamos y nos divertimos a más no poder en el yate que se dirige a una isla pequeña cerca de Santa Lucía.
Miro a Brant disfrutando de Alexita y Ana, se basan, se tocan y se mueven al compas del tecno.
Steven se acerca y me abraza por detrás, me brinda de su trago y lo tomo pero no lo trago, me giro y acaricio su mejilla, lo beso y deposito en su boca parte de lo que he tomado.
En cuanto intento separarme me toma de la cintura y el beso se hace más intenso, me río en su boca.
—Ya sueltame tonto.
—El tonto que adoras.
Me quedo mirándolo fijamente, sus labios, esa barba, su rostro, su cuerpo.
¿Cómo no lo amaría?
Claro que si lo amo, de una forma única.
Creo que no me había sentido tan feliz en tanto tiempo.
—Me miras como tanto quise que una mujer me mirara —susurra con una traviesa sonrisa colada en esos labios tentadores.
—Deja de ser tan cursis.
Me giro y sonrío como una idiota. En cuanto el yate se mueve al compas de la ola casi me caigo de no ser porque Steven me sostiene.
—Siempre que creas que vas a caer, yo estaré ahí para socorrerte.
Mi cara debe delatarme.
Es tan cursi cuando una se enamora.
—¡Ya estamos llegando! —dice el chofer que ha contratado Brant porque pensó que era mejor tenerlo y así divertirnos más.
Y tuvo razón.
La isla es pequeña y se ve a poco minutos. Me siento junto a Steven en un asiento y me levanta las piernas para ponerla encima de las suyas. Brindamos y me abraza cuando el agua me salpica dejando mi boca salada.
Apoyo mi cabeza en su hombro y besa mi frente. Cierro los ojos un instante y sonrío al pensar que si él sigue demostradome que me ama, yo podría olvidar todo y darme la oportunidad.
Ahora no tengo tanto miedo como antes, ahora me siento un poco más segura de lo que siento.
Creo que merezco ser feliz.
Aunque sea un poquito, ¿no?
—Pagaría lo que fuera por seguir teniendote así conmigo, Karen. Me haces feliz —susurra y mi corazón palpita más rápido por la emoción. Levanto un poco la mirada y le sonrío.
—¿De verdad me amas?
Tras mi pregunta se sonroja y suspira como un tonto enamorado. Conozco esa mirada, no es la misma que le daba a Zoe, es mucho mejor.
—No me alcanzas las palabras para decirlo, ni siquiera los hechos, pero si te hace sentir mejor escucharlo, te amo, y es contigo con quién quiero estar. Estoy seguro que es a ti a quién quiero ver cuando abra mis ojos —se ríe al decirlo o al pensar en algo—, es a ti a quien quiero ver vestida de negro en nuestra boda, feliz, segura de ti misma.
Diablos, me mata. Me enamora.
Y el círculo de amor se rompe cuando los chicos vienen, Ana se sienta encima de Steven, y Brant a un lado con Alexita.
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La Diabla
Romance"Tan santa como me traten, Y tan diabla como me provoquen" Portada creada por @Elilu_14 (Segundo libro paralelo de el malo, no es necesario leerlo) solo que la historia va entrelazada con algunas cosas que pasaron ahí.