Alexa (2°Pt.)

35

Capítulo 35
~Marca II~

Cameron:

Mis manos sujetan su rostro con delicadeza, incapaces de soltarla, mi instinto primitivo por poseerla es tan fuerte que no puedo ni quiero reprimirlo, la deseo, la amo, la quiero para mi.

Muevo mis labios con ferocidad y rapidez sobre los suyos, incapaz de controlar mis ganas por devorarla, por poseer su cuerpo otra vez, por hacerla mía de mil maneras.

Un jadeo suave emerge de su boca y desaparece en la mía, su pequeño gesto de placer me enciende, envía una pequeña chispa allí abajo. Mis labios presionan con mayor fuerza mientras una de mis manos bajan a su nuca, mis dedos se pierden en hebras rubias y hago un puño atrayendola más, moviendo su cabeza lo suficiente para que mi lengua tenga poder sobre la suya.

Me encanta la respuesta inmediata que recibo, su boca me corresponde con la misma fiereza, me devora de igual manera y trata de quitarme el mando.

Alexa es como una leona indomable, nadie puede contra ella, nadie puede controlarla y eso es justo lo que amo de ella.

Sus manos, calidas y seguras, se mueven por mi pecho arrastrando las uñas a propósito, dejando marcas en mi cuerpo como una señal inconsciente de posesión.

Deja caer la cabeza hacia atrás y suelta suaves gemidos cuando bajo mis besos a su cuello, mis labios saborean la piel caliente y deliciosa que posee, en un arrebato succióno con fuerza, dejándolo un chupon. Alexa me matará cuando se de cuenta de eso mañana.

Sus manos suben hacia mi cuello y con fuerza extrema, me atrae a su pecho cubierto por un sujetador muy sexy de color rojo. No me hago de rogar, he deseado esto cada maldito segundo, y ahora que ella vino a mi no desperdiciare la oportunidad, sean cuales sean sus intensiones.

Muerdo suavemente su pezon izquierdo sobre la tela, ocasionando que Alexa jadee y arquee la espalda, entregándose por completo a mi. Repito la acción una y otra vez, mientras mis manos bajan suavemente por su espalda, acariciando un poco sus costados hasta llegar a sus muslos, aprieto con más fuerza de la que debería mientras la elevo y hago que rodee mi cintura. Sus manos automáticamente van a mis hombros, sujetándose para no caer.

Ahora que ya no debo agacharme hasta su pecho, desabrocho el ajuste delantero del sujetador, liberando así sus apetitosos senos. Saltan a mi vista una vez se ven libres de la tela.

Sujeto su cintura sin apretar demasiado y bajo la cabeza hasta sus senos, me detengo un par de segundos, dudando a cual ir primero. Me decido por el derecho, mis labios envuelven su pezon y mi lengua saborea su piel sensible, succiono levemente mientras ella gime y se arquea, ofreciéndome sus senos y restregandomelos en la cara.

Magreo el otro con una de mis manos, pellizco su pezon y apretó, hasta que mi boca decide que ya es hora de darle el mismo tratamiento.

Desde nuestro primer encuentro me di cuenta que Alexa es receptiva, muy sensible en los senos, le gusta que sepan que hacer con la boca antes del acto, y que ahora me los ofrezca de esta manera solo lo afirma. El embarazo la pone sensible, aún mas a mi tacto, sus senos son lo primero en lo que debo trabajar para hacerla llegar.

Estoy tan seguro que hasta podría tener un clímax solo chupandole los senos. Pero eso será en otra ocasión, los huevos me duelen demasiado y la ereccion que tengo parece querer explotar.

No ayuda que Alexa mueva sus caderas y restriege su entrepierna contra la mía desnuda. Solo sus bragas impiden la unión carnal.

Me separo de sus senos, dejándolos brillantes y con la punta rojiza por mis labios, muerdo suavemente una última vez subiendo hasta su boca, la beso con pasión, con todo lo que siento por ella.