30 Days of Genmui

18) Haciendo algo juntos

Muichiro y Genya caminaban de la mano, el cicatrizado aún no se acostumbraba a hacer esto en público, se le notaba por su rostro de un color no muy natural, al pilar también le daba vergüenza, pero quería hacer como las otras parejas, y tenía que dar ese paso.

-¿Qu-quieres comer algo?, Muichiro asintió con una de sus pequeñas sonrisas que tanto le caracterizaban.

Iban de camino a una tienda de ramen la cuál el menor solía acudir debido a sus excelentes sopas y sus económicos precios, había mucha gente por las calles debido a un mercadillo que se instaló ese fin de semana, era bastante complicado andar sin chocarse con las personas o de ver los puestos, esa fue una de las razones por las que Genya sostuvo la mano del contrario, Muichiro tendía a perderse, se distraía con todo y su memoria no le permitiría acordarse las calles para volver, y con tanta gente y su poca altura, sería difícil que le encontrase.

El pilar se paró de repente, ocasionado un tirón al mayor, se soltó de su mano y se adentró a un callejón. Genya le siguió confuso , llamándole por su nombre, pero no le hacía caso, corría por la estrecha calle como si buscase algo, o alguien.

-¿Muichiro qué pasa?, preguntó preocupado cuando el menor se paró de repente, se acercó un poco más y vio lo que Muichiro había oído y la razón de esa corta carrera. 

Un niño de unos 5 años sollozaba mientras comía una galleta, la cual estaba húmeda debido a las lágrimas que caían en ella, pelo negro y desordenado, ojos con fracciones asiáticas que mostraban unas profundas pupilas verdes.

Muichiro se agachó, quedando de cuclillas ante el pequeño, sus ojos nublados tenían un tono amable, sonrió para calmar al chico el cual aún lloraba.

-Hola, ¿que haces aquí?, ¿te has perdido?, preguntó calmado.

Asintió cabizbajo, miró el rostro del pilar, cuando le vio sintió confianza hacia el debido a la tranquilidad que desprendía, más lágrimas desbordaron de sus ojos y abrazó a Muichiro, el cual casi se cae por el repentino movimiento, rodeó al menor con sus brazos y lo levantó del suelo, cargándolo. Genya no entendía muy bien, y para ser sinceros, el menor tampoco, pero parecía que el niño necesitaba desahogarse y compañía.

-¿Y tus padres?, preguntó el cicatrizado, este le miró fijamente con la boca abierta, seguro que me tiene miedo y empieza a llorar, pensó debido a situaciones que anteriormente le habían metido en problemas, pero a su sorpresa empezó a reír a carcajadas,  olvidando sus lágrimas y sustituyéndolas por sonrisas.

Genya y Muichiro se miraron confusos, no entendían porque se reía pero así era mejor.

- Tiene pintada la cara y no se ha dado cuenta, dijo señalando las cicatrices cuando ya se calmo, Muichiro se empezó a reír haciendo a Genya ruborizarse avergonzado.

Cuando salieron del callejón empezó el interrogatorio.

- ¿Cuál es tu nombre?, ¿porque estabas solo?, preguntó el Pilar, el cual aún lo tenía entre sus brazos, mientras este le abrazaba el cuello.

- Ranpo, mis padres desaparecieron de repente, Muichiro le miró sorprendido, por un momento pensó en demonios, pero era de día, no era posible, la otra opción... se había perdido solo que no lo sabía. Genya se dio cuenta antes y siguió cuestionando al ojiverde.

- ¿Donde los viste por última vez?, el chico dudó un poco, luego subió sus hombros en un gesto de que no lo sabía, iba a ser una misión difícil.

-Bueno, nosotros los encontraremos, no te preocupes, dijo Muichiro sonriéndole, Genya se sentía más enamorado que nunca.

Caminaron por las ajetreadas calles, el chico les describió a sus padres así que tuvieron que estar atentos a la gente de su alrededor. Pasarán más de dos horas buscando, Ranpo lloró algunas veces pero Genya se acercaba e intentaba hacerle reír, cosa que conseguía.