El frío helaba sus huesos, su ropa no calentaba lo suficiente su erizada piel. Se abrazaba a sí mismo, temblando levemente, sus dientes chasqueaban, sus ojos estaban entrecerrados, sus labios congelados empezaban a teñirse de morado, su nariz y mejillas estaban rojas, contrastando con su pálida piel. Juntaba sus finas piernas mientras movía los dedos de sus pies, los cuales parecía que se iban a helar.
El invierno era duro en esa zona, los copos de nieve se volvían granizo y el viento se convertía en una borrasca. Lo único que le tapaba un poco de ese frío infernal era el techo de la parada del tren, estaba solo en medio ventisca, rodeado de pinos decorados de blanco.
Oyó el sonido de la nieve al ser pisada cada vez más cerca suya,, giro la cabeza curioso, con la boca entreabierta y sus párpados aún algo dormidos. Un chico lleno de cicatrices andaba, más bien corría, a su lado.
-¡Muichiro!, Genya adelantó su paso hacia el, su mirada lucia preocupada.
-Genya... dijo algo aliviado, ¿que haces aquí?, titiritó.
-Tu cuervo avisó de que ya habías terminado tu misión y que no tenías dinero para el tren, pediste que alguien fuese a por ti.
-A- cierto.... me había olvidado de lo último, sonrió enternecedoramente, provocando un notable sonrojo en Genya.
El cicatrizado miró el cartel, todavía quedaba media hora para que el tren llegase, el clima no parecía suavizar y el viento cada vez movía los árboles con más agresividad.
Observó a su pareja, cabizbaja y sonrojada, con su cuerpo estremeciéndose por la baja temperatura, su ropa no parecía lo suficientemente gruesa, el estaba bastante abrigado, se había preparado antes de salir, pero como el pilar salió hace dos días y el tiempo cambió de uno a otro, no se sentía tan bien.
Se desabrochó los botones de su cardigán, poniéndose detrás del menor, este se giró sorprendido.
-¿No tienes frío?, el rapado solo sonrió, su chaleco era muy grande así que se acomodó en su espada, pasando su prenda por los laterales del cuerpo del ojiceleste, abrazándole, de un modo que ambos pudiesen estar tapados.
-Ge-Genya, se ruborizó, notando los fuertes brazos de su pareja en el, que le rodeaban con delicadeza, no pudo evitar sonreír.
-¿Mejor?, Muichiro asintió con los ojos cerrados alegremente.
-Te quiero, Genya apoyaba su barbilla en la cabeza del chico, sonriendo con las mejillas pintadas de un tono carmesí.
-Yo también, posos besos en su pelo, haciendo reír al menor.
Levantó su cabeza, rozando su nariz con la de su pareja, sacó una de sus mejores sonrisas, que relucía entre la niebla, sin poder evitar sonreír también.
-¿Porque eres tan lindo?, preguntó a punto de un ataque de diabetes, notaba sus mofletes arder aunque hiciese frío, el menor se sonrojó también.
-No lo soy, dijo acomodándose de nuevo, pegando más su cuerpo al del contrario, notó como Genya cerraba más su abrigo para calentarle, apretándole de una manera cómoda y agradable.
-Eres lo más tierno del mundo, puso su cabeza entre su cuello como tanto le gustaba, intentado esconder su rostro ruborizado.
Muichiro se rió, notaba la voz de su pareja tartamudear, sabía como le costaba decir cosas debido a su timidez.
-Tu también, dijo restregándose en su pecho.
Genya estaba a punto de morir de una taquicardia.
El frío se volvía cálido debido al abrazo que unía a ambos, Muichiro notaba la débil respiración del mayor en su cuello y como su pecho subía y bajaba pegado a su espalda , este había unido sus manos en la cintura del pilar, como si se fuese a escapar. Cerró los ojos, se había olvidado del horrible clima, solo podía pensar en el mayor, se sentía feliz, el calor que transmitía su pareja era agradable, le hacía querer estar en esa posición toda la vida, no le importaría que el tren se retrase, no mientras estuviese con Genya a su lado.
Los raíles del tren empezaron a temblar, chispas de energía chisporroteaban por las ruedas. Unas humeantes nubes grises salían disparadas al cielo desde el corazón de la máquina.
-Muichiro,ya llegó el tren, dijo en un bostezo, no hubo repuesta de vuelta, acercó su rostro al de su pareja.
Estaba dormido, su boca levemente abierta, dejando caer su peso en el, dando cabezadas mientras roncaba en voz baja.
-A... que lindo, dijo en un susurro, mientras cerraba sus ojos con fuerza, controlando sus ganas de abrazarle con más fuerza.
Se separó de él, con cuidado de no dejarle caer, agarrándole por los hombros, le levantó del suelo, agarrándole por sus muslos y su espalda, pegándole a su pecho, su cabeza se movía por cada paso que daba , al igual que sus mechones, los cuales caían por sus hombros como agua.
Pagó el billete y acomodó al menor en un asiento, se puso a su lado y con cuidado, le acomodó en su costado, dejándole dormir tranquilo. Puso su abrigo en el menor, como si fuese una manta, en el tren el aire estaba cargado de calor artificial, pero su cuerpo aún seguía frío debido a la nieve que cayó en él, no quería que enfermase así que prefirió ponerle la mayor cantidad de capas posibles.
Se apoyó en el húmedo cristal, junto sus dedos con los del pilar, el cual soñaba plácidamente, la nieve había reducido su fuerza, siendo sólo unos pequeños copos los que caían al campo, esa tarde de invierno, aunque fuese una de las más frías, se hizo la más agradable y feliz.
La idea principal para este cap era otra, y es que lo escribí entero pero cuando lo iba a publicar lo borré porque no me gustó KSNSLSN, y no me arrepiento porque creo que este es mi cap favorito 👉👈, se me hizo tierno y me encanta escribir o leer sobre este tipo de climas fríos, llevan a escenas tan AAAA, seguramente algún día habrá una escena de lluvia zkzsmaksm.
Gracias por leer!!💕💕
P.D: Me gustaría saber terminar historias .____.
Yanagi~
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30 Days of Genmui
FanfictionEl reto de 30 días de tu otp version Genmui 😔👌🏻. Amo esta ship y quería escribir one shots cortitos de ellos. Espero que les guste ^^