Los siguientes días fueron un infierno y durante la noche me cole en la habitación de mi hermano porque no podía dormir, había llegado el día y por mi parte los nervios habían desatado un comportamiento violento que se veía reflejado en mi duelos y confrontaciones.
No hable con los chicos muchos menos con Miranda, no tenía nada que decirles y a ellos no parecía molestarles que estuviese lejos. Caminamos por el pasillo después de salir de su habitación y Brandon junto a sus amigos venían del lado opuesto. Sentí como todos clavaron su mirada en mí.
Se notaba que me juzgaban por quien era mi acompañante y me molestaba que se metieran en asuntos ajenos, especialmente porque eran míos.
Connor pareció darse cuenta porque me tomo de la mano y me jalo para que caminara más rápido dejándome frente a él de forma protectora, aunque ya no estaban dentro de mi campo de visión y mi hermano me cubriera por detrás con su gran cuerpo sentí sus miradas a mis espaldas hasta que voltee en la esquina.
Mantuvo su mano por un tiempo y cuando estuvimos lejos se acercó a mi oído, pero antes de que pudiese hablar le conteste de forma cortante que estaba bien y seguimos nuestro camino.
Nos aseguramos de que el pasillo estuviese vació y cuando nos acercamos a la puerta un brillo azul atravesó su chaqueta, el señor nos abrió antes de que tocáramos y al entrar vi el diamante de mi figura brillar.
— Lo más lógico sería poner el color opuesto en el espacio vació. Avise sacando el diamante de mi bolsillo y él tomo el mío, el señor se sentó frente a nosotros esperando a que actuáramos mientras nos veía.
Intercambie miradas con mi hermano esperando a que se animara para seguirlo, pero el parecía esperar que yo tomara la iniciativa. Me arme de valor y me acerque para dejar caer el cristal del lado opuesto al diamante rojo y el hizo lo mismo casi al mismo tiempo que yo.
Ambos diamantes comenzaron a brillar y un holograma salió del centro de cada símbolo. La imagen de mama se dibujó y sentí como mi pecho se apretó.
Su imagen se definió cada vez más y mostró la imagen de la mujer que tanto amaba, su cabello no estaba tan arreglado como de costumbre y su vestimenta se veía descuidada.
Pude notar la fina línea roja que pintaba sus ojos, ella había estado llorando, se notaba nerviosa pero no era porque tenía miedo de ser atacada o sorprendida, todo indicaba que las palabras que saldrían de su boca eran su principal problema. Sin darme cuenta había clavado mis uñas en la planta de mi mano.
Mama dijo nuestros nombres y suspiro intentando contener las lágrimas que amenazaban con escapar de sus ojos, mis nudillos se pusieron blancos por la fuerza de mi puño y tuve que obligarme a abrir la mano porque ya no soportaba el dolor de mis uñas contra mi palma.
Sentí como mi hermano se acercó a mí y le permití que pasara su brazo por mis hombros y me abrazara, en el holograma apareció la imagen del señor sentado frente a nosotros y mama tomo aire preparándose para hablar, pero antes de hacerlo miro a los lados y después fijo su vista al frente.
|| Si están viendo esto, significa que están juntos y que no me queda mucho tiempo o no me encuentro con ustedes, me disculpo por haberles ocultado tantas cosas, en especial que estoy enferma y que pronto moriré a raíz de la enfermedad
Él es Aaron un amigo de toda la vida y el único que sabe mi secreto, le pedí que les hiciera estudios a ambos para asegurarme de que estuviesen sanos después de que me entere de mi enfermedad y gracias a Dios así fue, pero no sé por cuanto tiempo será así o si estaré junto a ustedes para apoyarlos.
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Elemind
Science FictionPocos saben lo que quieren y como conseguirlo, él es una de esas personas y no tiene problema en aplastar a quienes lo rodeaban con tal de cumplir sus objetivos. Esa era la razón por la que ella decidió alejarse... y por la que le tenía tanto miedo...