25. Segura... No

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Fueron alrededor de cuarenta minutos los que me tarde en contarles todo o mejor dicho la parte más importante del porque actúe de esa forma estos días. Ahora me encontraba en mi habitación con Brandon quien no quiso dejarme sola después de todo lo que le dije, Connor me había dicho que se tardaría un poco más de lo previsto y después vendría a mi habitación.

    — Danna yo... perdón por todo, debí...

    Se corto y suspiró enojado, sabia lo arrepentido que estaba por lo que paso y por cómo se comportó, pero tenía cosas más importantes en las cuales debía poner mi energía como para perder mi tiempo culpándolo por su actitud. No estaba lista para otra pelea y en parte sabía que no era el único responsable.

    — Tranquilo tenías razones para hacer lo que hiciste. Lo mire de frente, sus ojos estaban más claros que antes y resaltaban entre su piel, él se acercó a mi hasta que su cabello me hizo cosquillas y nuestras respiraciones se mezclaron.

    Sabia cuáles eran sus intenciones pensé en separarme, pero él fue más rápido y comenzó a besarme mientras yo no estaba segura de si debía seguirle el beso o apartarlo.

    Durante mi batalla mental comencé a sentir sus labios calientes y me aleje de golpe cuando se intensifico y él también lo hizo golpeando su cabeza con el marco de la cama, ambos volteamos por la tos fingida y encontramos a Connor frente a la puerta de brazos cruzados.

    — Deberías quitarle el acceso a tu habitación. Susurro enojado y voltee los ojos para levantarme de la cama.

    Me acerque a mi hermano que me dio el cristal de mala gana sin mirarme ni decir nada y se me hizo imposible no sonreír a sus celos. Colgué mis brazos en su cuello y besé su mejilla.

    — Tú sabes que siempre tendrás el primer lugar. Intente sonreírle, pero él estaba muy serio.

    Sabes leí tu mente y no sé si me agradé que el chico besara a alguien más y quiera pretender que no hay consecuencias Asentí diciéndole que me encargaría de eso y le sonreí dándole la espalda para caminar a la caja fuerte, escuché a Connor decirle al chico que después hablarían antes de que un portazo retumbara en la habitación.

    — Tranquilo, perro que ladra no muerde.

    Brandon pareció darles vuelta a mis palabras y después me devolvió una sonrisa algo tímida, se acercó y beso mis labios, pero al darse cuenta de que no los moví se separó.

    — Creo que te debo una explicación sobre Miranda. Suspiré y jugué con mis dedos.

    — Brandon eres libre, tú y yo no estamos juntos, al menos no de forma oficial y entiendo que estos días estuve distante por lo que si quieres estar con ella no tengo ningún problema. Confesé y me obligué a mirar sus ojos.

    — Te juro que no la bese, ella se acercó a mí y solo rozo mis labios en el mismo momento que ustedes entraron, además tienes razones para estar molesta, no la aleje y estoy muy arrepentido de eso, pero escúchame tú eres la única para mí, te lo juro. Cerré los ojos apretándolos muy fuerte.

    — No tengo tiempo para pensar en una relación, hay muchas cosas pasando por mi cabeza en este momento.

    — Lo sé y por eso te daré espacio, pero quiero que sepas que te esperare hasta que estés lista. Me sonrió y beso mi mejilla, cerca de la comisura de mis labios.

    Un mensaje de Connor me fue enviado diciendo que dentro de una hora nos veríamos en el cuarto de los chicos por ser el más grande y nos explicaría todo. Le envié una confirmación y le avise a Brandon lo que pasaría ya que seguro mi hermano no le trasmitiría el mensaje a pesar de que su habitación fuese el centro de reunión.

ElemindDonde viven las historias. Descúbrelo ahora