Se despertó, con los mismos brazos del día anterior aferrados a su cintura y una respiración irregular que le hacía cosquillas en su cuello. Volteó ligeramente la cabeza para observar aquellos ojos cerrados, con sus pestañas cayendo delicadamente sobre sus sonrojadas mejillas.
Era tan lindo.
Y ahora no sabía cómo pudo esperar tanto tiempo para estar así, cuando en su interior siempre lo supo, siempre estuvo presente.
Porque claro que Park JiMin tuvo su famoso "click" al verlo por primera vez, lo recuerda como un ligero temblor en sus piernas, la respiración entrecortada y un cosquilleo en su estómago.
Si tanto lo sabía, ¿por qué no había dicho nada y se había reprimido? por miedo, claramente. El miedo de estar equivocado, de confundir las cosas y arruinar su amistad aún más. Y aunque ahora demostraba más confianza, en ese tiempo tan solo era un niño que no tenía experiencia con esos sentimientos.
Acarició levemente las mejillas contrarias, delineando sus facciones con apenas un toque delicado para no arruinar su siesta, suspiró con unas crecientes ganas de probar esos rosados y esponjosos labios.
Se acercó sólo unos centímetros hasta rozar su nariz y frotar ambas, sintiendo el frío en la punta de la contraria.
Antes de darse cuenta, las manos en su cintura afirmaron el agarre y lo acercaron aún más al cuerpo contrario, al igual que sellando sus labios. JiMin fue dejando su sorpresa de lado para corresponder el movimiento del beso, tan dulce.
Al separarse pudo notar a YoonGi abriendo los ojos, mirándolo con ilusión y un brillo que siempre había estado ahí, pero jamás había notado.
— ¿Desde cuándo estás despierto?— habló tímidamente al ser descubierto admirando a su Hyung.
— No hace mucho— sonrió, más duró mucho al ver los ojos cristalinos del menor — ¿qué sucede? ¿hice algo malo?
JiMin inmediatamente negó con la cabeza antes de abrazarse más al peliazul y esconder el rostro en su cuello.
— Lo siento— sollozó apretando más sus brazos — lo siento, Hyung, sé que hice mal las cosas, por favor perdóname.
— JiMin, no estabas obligado a corresponderme, no te disculpes.
— No es eso, es que... — respiró profundo tratando de calmar su llanto — siento no haberme dado cuenta antes y haberte lastimado de esa forma, también a Tae, ninguno se merecía eso, fui muy egoísta con ambos, de verdad lo siento.
— Está bien, ya pasó, no importa ¿sí? sé que lo sientes y con eso es suficiente para mí — se alejó del abrazo para verse cara a cara , acariciando sus mejillas y dando un beso en su frente. — ahora lo que importa es si ya te sientes mejor, ya sabes, por lo de ayer.
Entonces recordó la razón por la que YoonGi estaba ahí y un ligero carmín lo cubrió hasta la punta de las orejas.
— A-ah, pues sí, en realidad no sé por qué estoy tan tranquilo, se supone que mi celo dura dos días completos.
— Aún así, toma supresores, por si las dudas...
— Claro — mas el mayor no soltó su cintura, viéndolo a los ojos como perdido en su brillo — mmm, Hyung... necesito que me sueltes para buscar los supresores.
Se separaron por fin, sintiendo el calor corporal del otro desvanecerse y una profunda necesidad de volver a juntarse. El rubio caminó hasta el tocador, abriendo el primer cajón visible y tomando la cajita de pastillas. Después de tragarlos, volvió a la cama, encontrando al mayor sumergido en sus pensamientos.
— ¿Qué sucede?
— Pensaba en qué pasará a partir de ahora.
— ¿Pasará algo? — YoonGi volteó a verlo.
— Pues... no lo sé, te besé y no me rechazaste, supongo que significa algo... Aunque en realidad creo que necesitamos hablar sobre eso — un silencio los inundó, mientras JiMin se acercaba al Alfa, para abrazarse a su torso.
— Bueno... YoonGi Hyung— recargó su barbilla en su pecho y lo miró a los ojos— me gustas, mucho y desde hace bastante tiempo, pero fui un idiota y no lo acepté, ahora estoy seguro de lo que siento — ambos sintieron sus rostros calientes, con un notable sonrojo.
— Es mi turno. Ya lo sabes, pero no está de más repetirlo... Me gustas, Jimin, no, estoy enamorado de tí, puedo asegurarlo y decirlo sin titubear porque no hay una mínima duda en lo que siento.
Dieron una sonrisa brillante al contrario, sintiendo sus latidos sincronizarse.
— Entonces... — JiMin agrandó su sonrisa, hasta convertir sus ojos en dos pequeñas lunas — ¿lo intentamos, Alfa? — sin esperar respuesta, volvió a besarlo.
Y lo besó hasta que sintió que todos esos años sin hacerlo fueron recompensados.
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Hola, no m maten.
Medio año sin actualizar y la verdad es que estaba dudando de hacerlo, pues como saben (si leyeron "antes de leer") tengo muchas dudas sobre si dejar pública esta historia, pero bueno, aquí estamos.
Si bien, subí este capítulo para todos aquellos que estaban esperando la actualización y que me comentaban en el último capítulo, también lo hice para hacer spam sobre una nueva historia que estoy pensando subir y que espero que le den una oportunidad, pues realmente me costó empezarla.
bueno, gracias por leer y disculpen cualquier error o falta de ortografía, nos vemos en el próximo capítulo y en la otra historia, prometo actualizar.
bye~
PD: me di cuenta de que en todos estos 37 capítulos Yoongi y Jimin nunca se han besado, así que disfruten :))
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El Hilo Rojo~ YoonMin/KookTae Omegaverse [Corrigiendo]
Random"El Hilo Rojo conecta a aquellos que estan destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El Hilo Rojo se puede estirar, contraer o enredar, pero nunca romper." JiMin estaba seguro de que JeonGguk era el chico que siempre bus...