Un Amor Diferente A Los Demás. - [Re-Publicando] ©

• Capítulo XLVI •

Desperté envuelta en las sábanas y lo digo de manera literal y con un agotamiento terrible en el cuerpo y la sensación de no haber dormido nada en lo que restó de madrugada y mañana.

Mi cabeza no paraba de dar vueltas por todo lo sucedido en la noche, no sabía qué era lo que quería hacer con mi vida, ahora no entiendo que es lo que estaría bien y lo que no.

Pensé que el volver a puerto rico sería como lo tenía en mente y no está fabulosa manera, pero no debía dejar que esto me agobiara por más difícil que fuera, no debía ser "débil" o por lo menos no tanto.

—¡Dios!

Lo que menos quería hoy era salir de la cama, no tenía ánimos de absolutamente nada.

Sentía mi cara sumamente hinchada, estaría terrible.

El agotamiento que tenía en el cuerpo estaba haciendo que me volviera a quedar dormida.

Mire la hora en el reloj que se encontraba en la mesa de noche y aún podía seguir durmiendo un ratito más.

Tocaron las puerta de mi cuarto, Fruncí mi ceño inmensamente, ¿Quién había tomado el abuso de entrar a mi casa sin antes tocar?

—¿Quién? — Pregunté algo temerosa.

—Demien…

¿Ah? ¿Que hacía aquí sin avisar?

—Pasa.

—Buenas tardes Bry.

— Buenas tardes Dem, ¿Qué haces aquí? — Tape mi cara con las sábanas.

—¿No puedo visitarte?

—Si, pero no sin avisar.

—Uy disculpe pues.

—Tranquilo.

Intentó quitar las sábanas de mi cara.

—¿Por qué te tapas la cara?

—Ando terrible.

—Te he visto peor Bry. — Jalo la sábana nuevamente.

—¡Deja!

—Bryanniss. — Dijo en tono irritante.

—¡Eah' diablo deja!

Jalo de la sábana fuertemente y está vez si logro quitarmela.

—¿Estabas llorando? — Tomó de mi mentón y me miró de los dos perfiles.

—Este... No, no estaba llorando ¿Por qué? — me senté en la cama.

—Tu no sabes mentir, – rió – vamos dime porque llorabas estás fea e hinchada.

—¡¡Demien!!

—¿Era por él? – Me miro serio.

No dije nada.

—Ya me harte de verte llorar por ese hombre que no te mereces Dassha, ¿Cuántas veces más te lo tengo que decir?

—Dem, para mi no es fácil, ya sabes todo al respecto. Él es mi debilidad literalmente.