Un Amor Diferente A Los Demás. - [Re-Publicando] ©

• Capítulo XI •

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9: 09 A.M

No me podía creer aún lo que en la madrugada había pasado entre Raúl y yo, no me lo esperaba, nunca me había imaginado que yo le gustará a Raúl de tal manera ni mucho menos de que lo hiciera desde hace años, era algo difícil de asimilar. 

Me encontraba tan feliz que esa sensación de cosquilleo se apoderaba de mi cuerpo y las mariposas en mi estómago no mataban de volar. Suspira amor. 

Nunca me espere pasar esto. 

Al fin se había dado lo que tanto había anhelado a su lado... 

Una de las cosas buenas de esto era que nos conocimos lo suficiente como para saber cada uno de nuestros defectos, nos conocíamos perfectamente... aunque el me conocía mejor que yo misma. 

Pero también me da algo de miedo creo que todo fluyo demasiado rápido y tan de la nada, él tiene más experiencia que yo en la vida amorosa ¿no?, y eso era uno de los mayores riesgos de que yo estuviera con él. 

¿Y si solo me quiere por jugar conmigo? 

No lo creo, Raúl seria incapaz de dañarme. 

Son tantas cosas. 

Bryan, mi padre. 

¡Mierda! 

Papá, eso sería un infierno si se entera de algo por nada del mundo aceptaría ninguna relación entre Raúl y yo. 

Aún me encontraba en cama junto a Raúl quien como de costumbre aum dormía plácidamente, mirarlo descarsar tan profundamente como si los problemas no extieran. 

No me quería levantar de la cama, me sentía tan cómoda a su lado, Raúl me transmitía mucha paz. Ya han sido cuatro días seguidos levantándome temprano al igual que Raúl y creo que debemos descansar un poco más, por lo menos mi padre y mi hermana están bien y eso me relajaba. 

Creo que ya me estoy empezando acostumbrar a dormir así de esta forma en sus brazos sintiendo el calor que enma de su cuerpo sobre el mío, se siente tan bien. 

Quien diría que todo se iba a dar a la luz en este tipo de situación y de la forma menos esperada. 

De tanto pensar en todo esto se me escapo una pequeña sonrisa de tonta. 

—¿Nena, por qué me miras tanto y sonríes así? — Murmuró con un tono de voz no muy audible y reí . 

—Por nada. Pensé que estabas dormido. — Rió un poco. 

Negó y me apego más a él haciéndo que me acurrucara en su pecho plácidamente, su corazón latía despacio. 

— ¿Sabes que me tiene la cabeza media charra? — Le pregunté levantando mi mirada hacia él y negó — Si Bryan se entera de esto nos mata a ambos. 

—Mami, él no va a matar a nadie a... 

—¡No, Raúl!, Si. si nos mata primero a ti por meterse conmigo y después a mi por a verme metido con uno de su amigo o hermano. — Estoy como loca — ¡Ay, no! — Agaché mi cabeza. 

—¿Sabes por qué no lo hará?, — Negué, — yo tampoco. — Reímos y me dio un casto beso. — Dejemos que pase todo esto, y luego vamos como le hacemos para decirle ¿si? 

—Esta bien, pero me da miedo,  imagina que diga "¿ustedes están locos?. Tu Raúl, ¿como carajos fuiste capaz de meterte con mi hija, no vez que solo es una nena?" odio cuando lo hace "y tu Bryannis, ¿como díablos...? " eso dirá, lo conozco perfectamente. — Dije y Raúl, sólo se limitóa reír. — No te rías es enserio.