Capítulo VI

1.8K 307 59
                                    

    —¿Por qué tenemos que ir caminando si podemos volar? —se quejó Hayden.

    Rodé los ojos y pedí al cielo que me diera paciencia con aquello, era como la décima vez que preguntaba lo mismo. —Hayden, por favor, llevamos días de viaje, necesitan descansar y recuperar energías —respondí como mismo había respondido las otras diez veces.

    Llevábamos tres días de viaje, el pergamino había marcado otra dirección y debíamos ir allí. Esta vez fue bastante diferente, teníamos que llegar a algún lugar que se encontraba en alguna parte del bosque donde estábamos actualmente.

    Habíamos viajado volando la mayor parte del tiempo, pero mis hermanos y Ulises necesitaban descansar para que no perdieran toda la energía, así que de vez en cuando nos tocaba caminar, como ahora.

    Ya hacía algunas horas que habíamos llegado a ese bosque, no tenía la menor idea de qué estábamos buscando, pero estaba cayendo la noche y necesitábamos un lugar para descansar y comer así que decidimos parar el viaje. Un rato después me encontraba revisando la bolsa de las provisiones que habíamos tomado de Mistwheat y noté que no quedaba nada.

    —¡Hayden! —grité furiosa y fui hasta ella— ¡Se puede saber, qué significa esto! —Mi hermana tragó grueso al ver la bolsa vacía y miró hacia otro lado. Yo estaba convencida, esas provisiones debían durar al menos dos días más.

    —Arden...

    —¿Te las comiste, verdad? —no la dejé acabar, estaba furiosa.

    —Es que tenía mucha hambre, sabes que necesito comer cuando estoy sin energías.

    —¿Eres una niña o qué? ¡No estamos en el palacio, no puedes comer todo sin pensar en los demás! —Tiré la bolsa agresivamente sobre el suelo y pude ver como sus ojos se cristalizaban.

    —Ya basta, Arden —me pidió Kian, acercándose a mí—. Te estás pasando.

    —¡No me estoy pasando, Kian! ¡Si iba a dar problemas se hubiese quedado en el palacio!

    —Arden, por favor, cálmate, esta actitud no es la correcta.

    Respiré hondo y me fui de allí, ardía en ira y necesitaba sacarla con algo. Fui hasta unos árboles y comencé a cortarlos con mi espada, eso no fue una gran idea ya que los cortaba de un solo golpe y lo que hice fue tumbar como cinco árboles antes de que Ulises me detuviera.

    —¡Para, Arden! ¿Estás loca?

    —¡Déjame, estoy muy molesta! —Traté de soltarme sin conseguir nada.

    —Arden, ya va anochecer, además esto puede llamar la atención de lo que sea que estemos buscando.

    —Está bien. —Bufé, soltando mis espadas molesta aún, él las tomó.

    —No te preocupes por la comida, yo iré a cazar.

    —¿Crees que encontrarás algo?

    —Sabes que tengo mis habilidades —Hizo brillar sus ojos azules para darme entender a lo que se refería.

    Sí, Ulises era un ángel negro de ojos azules como su madre, lo cual nos daba una ventaja tremenda a la hora de cazar. Él podía sentir a sus presas a muchos metros de distancia.

    Volví a donde estaban Kian y Hayden poco después, ella estaba llorando sentada bajo un árbol. —Perdóname, Hayden —Sí, me estaba disculpando porque no debía haberle hecho daño. El hecho de no sentir amor hace que cuando estoy molesta suelte todo sin importar los daños, pero mamá me enseñó que eso no está bien y que debo pedir perdón por ello.

Arden (Dark Angel II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora