Capitulo 32

2.3K 212 6
                                    

╱╲╱╳╲╱╲

Capitulo 32

╱╲╱╳╲╱╲

Pov. Rose

Meses después

Estaba en el patio de la casa mientras tomaba agua helada, ya que resulta que el calor ya estaba llegando aquí y no lo soportaba, además de que esto del embarazo no ayudaba mucho, incluso estaba un poco más irritante, pero Daniel como siempre me tenía una paciencia que, aunque no se lo dijera, agradecía enormemente.

Por otro lado, en estos meses pasaron muchas cosas, y gracias a Dios todas eran buenas, algo que sin duda me relajaba ya que parecía que mi mala suerte había desaparecido. Una de las cosas que no solo me había sorprendido a mí, sino que a todo el clan, era que Jack se había divorciado de Dolores.

Cuando me entere de esa noticia no dude en ir a su casa y darle un abraso, la verdad es que se había tardado mucho en dejar a esa mujer que lo único que hacía era envenenarlo. Y por lo visto, no era a la única que le alegraba esa noticia, ya que todos demostraron su apoyo al nuevo Alpha, que en una ocasión me aclaro que no se rendiría, y que buscaría a su compañera.

Y otra de las cosas que no me veía venir es que mi hermana realmente cumplido con su palabra, y una o dos veces al mes me manda postales de los lugares que está visitando. Yo realmente pensé que no volvería a saber de ella, pero me alegra que se mantuviera en contacto, aunque yo no podía mandarle ninguna carta ni nada por el estilo, esto porque nunca se mantenía mucho tiempo en un solo lugar. Pero realmente ya me había hecho a la idea de que ella se comunicaría cuando así lo deseara, y yo por supuesto, estaría dispuesta a leer sus cartas.

-Cariño, ya está listo, vamos a dentro. - me llamo mi prometido, que después de mucha insistencia pudo hacer un espacio en su día para instalar el aire acondicionado en la casa. Me levante y a paso moderado me acerque a él para darle un beso.

-Gracias. - le susurre apenada y él soltó una risita divertida para rodearme con sus hermosos brazos, que me sostuvieron en los peores y mejores momentos.

-No hace falta que agradezcas nena. - me dijo besándome de forma lenta y tortuosa. - En todo caso, yo lo siento, porque tuviste que sufrir por mi poco tiempo disponible. - me dijo de forma tierna, algo que en vez de gustarme me hizo sentir más culpable.

-Voy a darme un baño. - le dije soltándolo y caminando hasta adentro, y creo que él entendió mi indirecta ya que solo sonrío con diversión para después negar e ir a su oficina. Mientras estaba en la bañera me acaricié el vientre con cariño mientras pensaba que aún no habíamos pensado en los nombres, así que mientras pensaba en alguno que no fuera raro sentí un dolor en mi vientre bajo que me hizo soltar un grito al mismo tiempo que me encorvaba por el dolor.

Empecé a controlar la respiración justo en el momento que Daniel entro al baño como si estuviera corriendo del mismísimo diablo. Cuando me vio sus ojos se abrieron ansioso.

- ¿Ya? - me pregunto mientras yo me concentraba en no pegar otro grito, pero esa estúpida pregunta sin duda provocó mi siguiente grito.

-YA. - le dije viendo como él tomaba una toalla todo nervioso para ayudarme a salir de la bañera, y a continuación secarme mientras me sentaba en la tapa del baño, a los minutos mientras terminaba de vestirme sentí otra contracción que me hizo gritar otra vez mientras sostenía mi vientre.

-Ya nena, ya salimos. - me dijo tomándome en brazos mientras me llevaba al auto y me sentaba en el asiento del acompañante, pero al segundo volvió a correr hasta adentro para buscar los bolsos maternales que habíamos preparado hace unos pocos días. Y por lo visto también aprovecho para llamar al hospital para informar que los niños ya estaban en camino, porque justo cuando entro al auto corto la llamada.

Eres Mi PresaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora