Bravucona (Spidervel)

Capítulo 28

Carol: ¿Qué pasa? Has estado de mal humor todo el día - Dijo suspirando y arrojando su mochila al suelo de su habitación.

Peter: No lo sé.... Será porque me diste un calzón chino atómico! - Dijo enojado mientras se acostaba en la cama.

Carol: ¿Todavía no has superado eso? - Dijo riéndose entre dientes mientras movía la parte posterior de la oreja del niño, algo que ella sabía que él despreciaba absolutamente.

Peter: ¡Carol! - Refunfuñó, alejándose de la chica, pero ella no se lo permitió. Menos de dos segundos después se arrojó en la cama a su lado - Basta, me estás poniendo de los nervios!

Carol: ¿Por qué? ¿Qué hay de malo en que una chica quiera que su novio... - Y fue entonces cuando su mano le rozó la caja torácica, y Peter soltó la risa más adorable que Carol jamás había escuchado.

Ambos se congelaron. Peter se puso rojo cuando una pequeña sonrisa apareció en el rostro de su novia.

Peter: Carol, no..

Carol: ¿Qué fue eso? - Dijo con una sonrisa diabólica mientras se acercaba a él. Ella se puso encima de Peter.

Peter: Nada... - Murmuró asustado.

Peter: ¿Fue una risita lo que escuché, Señor Parker? - Preguntó con una sonrisa Malvada y deslizó su mano por debajo de la camisa de Peter, acariciando la sensible piel.

Peter: No! Ah.. jajaja - En el segundo en que las manos de Carol hicieron contacto, Peter inmediatamente comenzó a reír de nuevo, esa risa aguda es jodidamente adorable y lo que fue aún más adorable fue la forma en que la nariz de Peter se arrugó mientras intentaba contener la risa pero no pudo - ¡Carol! ¡Detente!

Carol: ¿Detener Qué? No estoy haciendo nada - Ella inclinó la cabeza inocentemente y continuó haciéndole cosquillas.

Peter: No.. no me hagas cosquillas! - Suplicó mientras se retorcía.

Carol: mhh.. porque debería? - Preguntó en un tono burlón mientras lamía un poco la mejilla de Peter.

El castaño chilló mientras trataba desesperadamente de alejarse de ella. No servía de nada, Carol se estaba divirtiendo demasiado. Carol sabía que debía detenerse, especialmente cuando él se las arregló para gritar de agonía entre cada carcajada, pero no pudo evitarlo. Él estaba sonriendo y después de ver nada más que pucheros todo el día, su cerebro le dijo que no podía ser algo malo, aunque ella sabía que lo era. Sabía que él no quería sonreír en ese momento, pero no se atrevía a detenerse, incluso cuando Peter trató de ponerse boca abajo para evadirla.

Por eso ella no se dio cuenta cuando intentó cruzar las piernas. Ella confundió el movimiento con él simplemente tratando de apartarla de él, pero no pudo confundir lo que sucedió después.

Peter: Carol! ¡Por favor! Voy a.....

Antes de que Peter pudiera terminar su oración, Carol se dió cuenta de inmediato de lo que había estado tratando de decir. Vio como una pequeña mancha húmeda apareció en la parte delantera de los jeans grises de Peter, extendiéndose rápidamente. Incluso cuando rápidamente apartó las manos y se apartó de Peter, la mancha siguió creciendo y se extendió por las piernas del niño cuando se levantó, tratando de minimizar el daño a la cama de la chica.

Pero para cuando Peter se levantó, ya había una mancha del tamaño de una pelota de béisbol en sus sábanas, Peter miró horrorizado por lo que acababa de suceder.

Carol: Oh, mierda - Dijo con los ojos como platos y se tapó la boca.

Peter: te dije que no me hagas cosquillas - Murmuró entre dientes.