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Christopher aprovechó que era amigo del encargado de la entrada para que dejara pasar a Joel, pues se había complicado un poco al pedirle el documento para verificar que sí fuera mayor de edad. Podía sentir la incomodidad de él y la entendía, no tenían mucha confianza ni mucho tiempo de conocerse, pero de alguna u otra forma debían entablar una conversación para pasar las horas ahí.

El lugar lo frecuentaba mucho, por eso le fue fácil identificar unos rostros conocidos por ahí. Solía salir con la chica que más cerca estuvo de ser su novia y llevarla a ese lugar, siempre terminaban peleándose, pero valía la pena la reconciliación cada fin de semana. Era demasiado celosa, tal vez eso fue lo que hizo que se decidiera a no continuar con ella.

—Christopher, llevaba tiempo sin verte por aquí —miró por última vez el segundo piso y dirigió la vista a su lado izquierdo, donde puso reconocer a una chica de cabello corto —. ¿Qué te trae tan solo a este lugar?

—Karla, ¿cómo estás? —se acercó hasta dejar un beso en su mejilla —. Te presento a un amigo, él es Joel.

—Mucho gusto —el rizado estrechó la mano que ella le ofreció amablemente.

—Lo mismo —los tres empezaron a adentrarse en el lugar, ella caminando un poco más adelantada para guiarlos a una mesa desocupada —. ¿Y cómo sigue Richard?, hablé con él y me comentó lo que había pasado.

—Está mejor, supongo que ya salió y está en su casa.

—Es muy peligroso enfrentar a alguien en un robo, nunca se sabe si la otra persona esté armada. Mira lo que le pasó, pobre.

—¿Esto te dijo? —rio suavemente, pero solo Joel logró escucharlo al estar al lado —. Sí, tienes razón.

Joel se ubicó al lado derecho de Christopher, quien estaba en la mitad. No tenía la más mínima idea de quién era ella, pero no parecía tan arrogante como la chica con la que fue al hospital. Ariana lo miraba como si quisiera eliminarlo de ese planeta.

—Joel, ¿tú estás esperando a alguien? —Christopher se adelantó y negó con la cabeza —. Es que te veo por ahí mirando a la multitud, ¿te sientes bien?

Joel alternó la mirada entre ella y él, no se sentía cómodo, pero no era algo que quisiera expresar, al menos no aún. Simplemente se limitó a asentir.

—Sí.

—Hombre de pocas palabras, es como Richard cuando apenas me conoció —la vio sonreír mientras hablaba, ¿quién era Richard?

—Esa es una buena comparación, supongo que esos dos se llevarían bien —el castaño volvió a mirar al menor —. ¿Vamos por algo de tomar?

—No quiero nada, vayan ustedes.

—Pues yo sí quiero tomar tequila —Karla se estiró, su vestido se subió un poco, ella sabía que el castaño observaba —. ¿Vamos, Chris?

—Una botella de agua, tal vez vaya más tarde para que se conserve el frío.

Joel siguió con la mirada a la chica que se alejaba hasta llegar a la barra. Sentía que estaba sobrando ahí, quizá Christopher ya había conseguido lo que quería. Era exactamente el momento en el cual se arrepentía de haber dejado que eso sucediera entre los dos de nuevo.

Sentía la mirada intensa del mayor sobre él, estaba incómodo, tal vez un poco nervioso. Quería irse, pero no llevaba ni quince minutos de haber llegado y quería al menos completar la media hora para poder decirle que en serio no estaba haciendo nada ahí. Tal vez lo único que pudo haber existido entre ambos fue sexo, porque no tenían cosas en común para ser al menos amigos.

Aléjate De Mí ||Virgato||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora