Parte dos de dos
Han Solo no era cobarde... O al menos eso quería pensar... Había negociado con tipos rudos que amenazaban con asesinarlo y gángsters como Java el Hutt, y en ningún momento se vió afectado por sus constantes amenazas. Muchos pensaban que Han Solo era uno de los mejores "negociadores" y contrabandistas de la galaxia, no solo por su increíble chatarra voladora, sinó también por sus ágiles tácticas de supervivencia.
Había olvidado lo difícil que eran la negociaciones, y quizá era por eso que estar frente a la atenta mirada de los príncipes y la amenazante vigilancia del jedi le hacía comparar esos momentos con su rutina de escape.
Mientras tanto, Lando y la senadora Amidala compartían una calmada plática sobre Cloud City y su aleación a la República. Claro, no todo iba muy bien, de hecho, Han casi sentía un sable de luz enterrarse en su corazón cada que veía a Anakin a los ojos, y Lando parecía no percatarse de esto, por lo que Han tuvo que aguantar su muerte varios minutos más de lo que deseaba.- ¡Perfecto! Será la mejor alianza que empezará en el senado desde hace años. -Dijo Padmé un tanto emocionada con el resultado. -¿Qué les parece si ahora hablamos sobre la boda? -Lando vió a Han con una sonrisa bastante divertida, aunque lo suficientemente disimulada para que los otros no la notaran. Leia vió a Luke dándole ánimos con la mirada y ambos asintieron hacia su madre -Entonces hay que ponernos de acuerdo. Gobernador Calrissian, me encantaría proporcionar el lugar para la boda, es un estupendo jardín de flores de colores cerca del palacio de la Reina, ella aceptó gustosa que la boda se ejecutara allí y tenemos su autorización para usarlo.
-Suena como un hermoso lugar, y por supuesto que la boda será allí. Me encantaría saber también si el número de invitados no se excederá, pues puede que el jardín no tenga suficiente espacio como para que todos estén presentes. -Lando estaba dudoso con espacio del jardín, pues planeaba invitar también a algunos comerciantes con los que no había tenido mucha relación, así quizá se pudieran forjar nuevas negociaciones sin que se descubra que él y Han no eran hermanos.
-No se preocupe, habrá suficiente espacio como para más de 500 invitados. -Luke y Han se preocuparon por razones distintas; Luke porque no deseaba ser visto por tantas personas y Han porque era probable que entre ellas se encontrara alguna a la que hubiera estafado o con la que haya negociado. Igual Lando tenía sus dudas.
-Está bien entonces. Propongo que cada quién invite a sus conocidos y luego los comparemos para que no hayan repeticiones. -Lando ya tenía a varios invitados en su mente. Han obviamente estaría junto con Chewi y probablemente no invitaría a nadie más. Luke por otra parte, no deseaba invitar a nadie, mientras sean menos personas que lo conozcan mejor.
-Muy buena idea. Ahora, ¿Ha pensado en las decoraciones? Porque si no ha sido así, ya me he adelantado y he decidido por algunas cosas...
-Perfecto. Es cierto, no he pensado en decoraciones y supongo que usted ha elegido los mejores, así que creo que ese tema ya está solucionado.
Siguieron hablando de diferentes cuestiones, a veces Han intervenía en algunas cosas o se dirigían a Luke para saber si estaba de acuerdo con algún detalle. Padmé seguía quitando y agregando decoraciones al jardín en su mente y Leia torturaba junto con Anakin a Han con un sable imaginario. *Nada digno de un jedi...*
Mientras que Han ya había experimentado más de 100 tipos de muertes imaginarias diferentes sin saberlo, Luke trataba de mantenerse calmado e intentaba analizar la situación para su conveniencia. «Quizá si intento convencer a los hermanos y a mi madre de que únicamente inviten a las personas necesarias...» o «tal tez pueda usar solo un smoking y alguna otra cosa para no hacer el ridículo con un vestido...» cosas así pensaba Luke.
De un momento a otro, sin que nadie se diera cuenta, ya había sonado el gran reloj indicando que ya era medio día, ¡y ninguno había aún desayunado! Padmé se disculpó por haberlos entretenido en el comedor sin haberlos invitado a comer en cuanto llegaron.
Padmé dió la orden para que las doncellas sirvieran lo que habían preparado con esmero esa misma mañana. Les mostraron a los Calrissian los elegantes platillos y los finos utensilios que combinaban a la perfección con el comedor decorado anteriormente por Padmé.-Sírvanse todo lo que deseen, se que fue un viaje agotador y más si aún no han comido algo. -Padmé los invitó a comer lo que se encontraba en la mesa y ella misma se sirvió un poco de ensalada. Tanto Han como Lando agradecieron por la comida.
Pasaron algunos minutos sin que nadie hablara para nada, básicamente lo único que se escuchaba eran las copas de cristal chocar con la superficie de la mesa y el tintineo de los cubiertos al ser colocados en los platos. El ambiente era muy denso e incómodo, tanto que todos preferían ignorarse unos a otros. Tal vez el ambiente se debía a que al inicio todos notaron perfectamente que Anakin estaba retando con la mirada a Han y que él estuvo a punto de echarse a correr de allí, y no, no era cobarde, (*si, ajá*) pero estar frente a un jedi experimentado que te observa fijamente mientras sostiene un sable de luz en su mano robótica es para que cualquiera saliera disparado de ahí.
•••
-Ejem... -Padmé hizo un intento de plática que fracasó brutalmente. Todos la ignoraron.
•••
-Que... lindo clima... ¿No es así? -Preguntó Leia intentando desviar las miradas asesinas entre su madre y padre. Lando asintió. Anakin solo hizo un "uhmm" viendo de nuevo a Han que solo pudo tragar saliva por el nerviosismo. Luke siguió viendo a su plato casi sin haber comido algo de lo que se había servido, mientras que Padmé solo despegó su vista de Anakin para tratar de digerir un bocado de lechuga.
•••
-Creo que... Me retiro... -Nadie lo volteó a ver -Provecho -Luke tomó su plato lo más rápido posible y se levantó de su lugar en silencio para intentar no captar la atención de nadie más.
Logró su cometido.-También terminé, nos vemos después -Leia también se fue rápido para salir del incomodo momento y después seguir a su hermano.
-Necesito hablar sobre algo urgente con la reina, hasta luego -Padmé prefirió irse de allí, aunque dejara a los Calrissian y a su esposo en un solo lugar.
Anakin siguió viendo a Han casi con fuego en los ojos. Lando, completamente abrumado se fue lentamente de ahí sin querer interrumpir la mirada de láser del jedi.
Para cuando Han se dió cuenta de que estaba solo (*como bien dice su nombre*) en el comedor, fue demasiado tarde. Anakin se levantó como resorte y tomó el sable que colgaba de su cinturón, Han reaccionó a tiempo y trató de disparar con su blaster en son de paz. Anakin arrojó lejos de su vista el blaster con ayuda de la Fuerza, para ese momento Han ya corría como Jedi siendo ejecutada la orden 66 y Anakin no tuvo que esperar para correr trás él como si fuera un lord Sith.- ¡Ayudaaaaaa! ¡Me quiere descuartizar! -Dijo Han esquivando los troncos que Anakin atraía con la Fuerza para que chocara.
- ¡En realidad quiero darte como cena de un monstruo espacial!
Y así fue como Han rompió el récord de más kilómetros corridos en toda la galaxia...
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Cómo dato corto y poco interesante:
Estuve a punto de escribir "corría como General Grievous trás sable de luz" en lugar de «corría como Jedi siendo ejecutada la orden 66».
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El príncipe contrabandista y el príncipe Jedi
FanfictionLuke es un príncipe hijo de Anakin Skywalker y Padmé Amidala. Él es un Jedi en entrenamiento, así como su padre antes que el. Han Solo es el príncipe casi autoproclamado de las apuestas y de las estafas que se volvían rutinarias para el. Cuando Han...