•Capítulo 25•

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Ya pasaron unas semanas desde que paso lo que pasó con Rosario.

Camilo estaba muy raro, cuando iba al colegio me sentaba con él pero se que no es lo mismo de antes.

Mi mamá ya está mucho mejor, tanto como yo, aunque sigo llorando por lo mismo de hace dos semanas, estoy mejor.

Y sin Luna no se que haría, además de cada vez quererla más, y verla más, aunque es re de forro por lo que paso, es la única que me esta ayudando.

Aunque no se como me banca, si siempre que viene termino llorandole por lo flor de boludo que soy.

Ayer no la ví igual, y hoy tampoco, pero hace un ratito hicimos llamada.

Ahora estoy haciendo un trabajo práctico para el colegio que me está costando un huevo.

Aunque capaz que si hoy lo termino salga a caminar no se, tengo unas re ganas también de salir de joda, pero no se, igual hoy es jueves, así que mañana veré.

Me quedé un toque más con la tarea hasta que por fin termine el trabajo choto, entonces guarde todo y me fuí a acostar, ya que son las 2:03am, sí, siempre dejando todo para último momento yo.

Así que apague las luces, prendí el ventilador y me fuí a dormir.

. . .

Estaba en el colegio, ya había empezado la primer hora, teníamos que entregar el trabajo, así que simplemente lo saqué de mi carpeta y esperé a que pase la profe a buscarlo.

Hoy era viernes, todos estaban hablando de a donde salían, previa en la casa de no se quien y así, yo no se ni si iba salir, aunque tengo ganas, porque hace mil años no salgo, pero no voy a ir solo, así que después veo, ahora tenía que entregar el trabajo.

Camilo lo había hecho con Ro, la verdad me gustaría saber si les daba pena, a Rosario era obvio que no, aunque ojalá si, pero a Camilo sí, espero, aunque a veces hablaba con él.

—lo hiciste solo Palacios?— pregunta la profe mientras le entregaba el folio con las hojas, y yo asiento.

—y por qué será? si ya no tiene amigos— escucho a Julian que ya no estaba en la mesa de al lado mío, porque desde lo que paso, lo cambiaron.

—la próxima hablá sabiendo, tarado, porque estás mintiendo— me defiende Camilo y sonrío por eso.

—basta! ya se pelearon una vez, ahora otra? ya son grandes, están en sexto de secundaria, son los más grandes del colegio y se pelean— dice la profesora logrando que todos hagan silencio, así podía seguir recibiendo los los trabajos.

Se terminó este horario y salimos al recreo, lo cual salí con Cami pero yo no dije nada.

—eu, estás bien?

—me estas jodiendo?

—no, pero me preocupa.

—bueno, tarde te empecé a preocupar, porque ya pasaron dos semanas.

—bueno wacho mira, estuviste mal, lo sabes, entonces por esa parte estoy del lado de Rosario, pero ayer estaba pensando, y amigo la estas pasando re mal.

—sí, te lo vengo diciendo hace rato, pero ni bola, me preguntas, "ti siguiste jintindi con lini"— digo imitandolo. —y es obvio que sí, si Rosario ya ni me ve, y vos no se, me querés cuando te pinta— digo comiendo las galletitas.

—bueno, te entendí, porque me juntó con ella y vos faltas, los dos nos damos cuenta, y no me gusta además estar así.

—a mi tampoco me gusta estar así, ustedes me faltan.

Codigos ; Trueno [terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora