Codigos ; Trueno [terminada]

•Capítulo 10•

Escucho como Ro cierra la puerta de la entrada, para después venir al living, se sienta en un sillón individual al lado del sillón y se queda callada.

—no me vas a contar que mierda hacia Luna arriba tuyo?— corta el silencio.

—me estaba ayudando— digo.

—en que ayuda que este arriba tuyo, mientras vos le sonreís, Mateo ya te dije que con ella no, y vengo y estabas tirado en el piso con ella, arriba para aclarar— dice enojada.

—ya se, pero bajaste con ese pibe, y no volviste más...— me interrumpe.

—claro, me voy y vos te vas con Luna no?— dice casi gritando.

—no pasa nada con ella, pero te vas, tardas un montón, quería ver si te pasó algo, las muletas estaban en la otra punta de la pieza, me intenté parar para agarrarla, me caí— hago una pausa —Luna viene asustada porque me re mate, después me ayudo a bajar, nos caímos, y veo que estabas con un pibe que nunca vi en mi puta vida.

—por lo menos te ayudó— dice.

—por lo menos estoy bien— agrego.

—tenez razón— dice mirándome.

—pero sabe que no tengo nada con Luna, ochenta veces te lo dije— digo.

—bueno, te hago caso, pero verla arriba tuyo me parece un poco raro— dice y me río bajo —no te rías es verdad.

—no quería que pase eso— digo mintiendo un poco, porque por algo la volví a tirar arriba mío.

—bueno, te creo— dice y sonrío mientras ella me miraba con los brazos cruzados.

—ay dios, vení dame un abrazo— digo y ella se acerca —te amo hasta cuando estás enojada.

—gracias— dice y se separa para volverse a sentar en el sillón en donde estaba antes.

—sos re forra— digo y ella se ríe —y quien era el pibe ese?— pregunto cambiando de tema

—valentín, quería preguntarme de si quería salir hoy— dice.

—y que vas a hacer?

—voy a ir, quiere salir a caminar a la noche, y comer por ahí— dice.

—bueno bien, yo ahora le digo a mi papá que me venga a buscar, porque después se hace tarde

—bueno decile, y si queres te doy hielo para la rodilla— dice y yo asiento.

Me dio un poco de hielo y esperamos a que mi papá me venga a buscar mientras hablamos de boludeces.

Cuando llegó, agarre las muletas, salude a Ro y salimos a la puerta.

. . .

Ya había llegado hace unas horas a mi casa, y ahora estaba con Cami que se vino a dormir.

—amigo, Ro me contó lo que pasó hoy cuando fuiste a su casa, como es eso de que quedaste abajo de Luna?— dice y yo suspiro.

—nos caímos de la escalera, me estaba ayudando a bajar— digo.

—y que? porque a Ro le podes mentir si querés, porque sabemos que ella no quiere que le des ni cabida a Luna, pero mínimo decime que te gusto que este arriba tuyo.

—Camilo la concha de la lora basta— digo tirándole un almohadón.

—perdón jaja— dice mientras se reía.