Capítulo 18: Los tres hermanos Didier

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Esa misma noche al salirme de bañar encontré a dos personas vestidas con trajes negros sentados a la mesa de la cocina, una de esas personas era Caroline y la otra era ... ¡¿Jeremy?!

- ¡Oh! Aquí está señorita Gia.

Dijo Jeremy detrás de mí haciendo que me sobresaltara, volteé a verlo, estaba con ropa normal.

- Pero si tú estás aquí ¿Quién es el Jeremy que está sentado a la mesa?

Rio tiernamente, me tomó de los hombros y me condujo hacia la mesa.

- No es un Jeremy, pero si un Didier. Señorita Gia, usted por su puesto conoce a Caroline Didier, mi hermana menor, pero permítame presentarle a mi hermano gemelo, Jerome Didier, es mayor que yo por tres minutos.

¡¿Gemelo?! ¡¿Jeremy tenía un gemelo y no lo sabía?! Jerome se paró y ¡¿Qué demonios habían hecho esos tres minutos?!, Jeremy era alto pero Jerome ¡Era altísimo! Fácilmente media más de 1.90 metros.

- Es un placer conocerla señorita Gia.

Hizo una reverencia como saludo. Su voz era muy gruesa y varonil, por completo diferente a la voz suave y amable de Jeremy, era más musculoso que él y a pesar de que tenían la misma cara, sus múltiples cicatrices en todo el cuerpo y su cabello tan corto como el de un militar los hacían ver completamente diferente, era como un Jeremy pero más alto, más rudo, más fuerte e imponente, para ser sincera me daba un poco de miedo, sentía que quería esconderme detrás de Didi, como un perro con la cola entre las patas.

- Fueron contratados por tu padre para que fueran tus "guardaespaldas falsos" Ellos se vestirán como tal para desviar la atención de la prensa mientras que yo seguiré protegiéndote en las sombras haciéndome pasar por civil.

Todos miramos a Jeremy.

- ¿Qué?

Preguntó confundido.

- ¿Le estás hablando de "tú"? Jamás le hablas de "tú" a nadie.

Preguntó Caroline.

- ¡Ah! Lo siento señorita Gia no me di cuenta.

Comencé a reír.

- No te preocupes te he dicho que puedes hablarme de "tú".

- Aunque se lo digas no lo hará - dijo Caroline - hasta a nosotros nos habla de usted, ¡Es tan correcto el señorito!

Jeremy se puso rojo y todos reímos, mientras lo hacía miré a Jerome, estaba muy serio. Definitivamente era completamente diferente a su gemelo.

Después de explicarme como nos íbamos manejar los siguientes días y durante el viaje a Francia se fueron.

- ¡Gracias por la cena Jer! Cómo siempre estuvo deliciosa.

Caroline abrazo a Jeremy, se veía que tenía un gran aprecio por él, a diferencia de Jerome que apenas y había hablado durante la cena, poco después se fueron y cerré la puerta.

- Ya es tarde mi linda señorita Gia, iré a preparar la cama para que podamos dormir.

Me besó en la mejilla y se fue, mientras salía del trance de su tierno y sorpresivo beso tocaron a la puerta, tal vez habían olvidado algo. Abrí la puerta y era Jerome.

- ¿Qué sucede?

Pregunté.

Jerome observó minuciosamente todo el departamento.

- Ten cuidado con Jeremy.

- Por su puesto, lo cuidaré bien.

Dije alegremente.

¿Y si nuestro amor nos mata? ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora