Todas contra Draco Malfoy [Dramione]

Capítulo 34

— Ayer no me contestaste cuando te llamé por teléfono. Supongo que leíste mi mensaje — Draco caminaba a mi lado

Lo miré a través de mis lentes de sol. No iba a hablarle ni acercármele.

— Hermione, háblame. Me siento tonto de... de decirte que me gustas y tú ni siquiera has dicho pio.

— "Todos los alumnos que serán parte del paseo del día de mañana al gimnasio por favor"

Me giré rápidamente y me dirigí al gimnasio ignorándolo. Cuando llegué, todos se posicionaban en las gradas. Me acerqué a las chicas. Pansy me sonrió y yo le sonreí de vuelta.

— Bueno chicos, como saben, mañana es el viaje a...— "Blah, blah, blah, solo da las autorizaciones luego" — Las autorizaciones se entregarán cuando lleguen a sus clases, habrán unos encargados que lo harán. Les pido por favor que estos 5 días que estén allá se comporten, el que hizo de las suyas allá, verá de las mías acá. No estoy bromeando... — Y luego más blah, blah — Y por último, suerte al equipo de futbol, ya que el día de hoy es el último partido y esperamos que ganen. Pueden retirarse.

— ¿Hay partido?

— Sí y también fiesta en el bosque. De seguro ganan. Y además, si no lo hacen habrá fiesta igual, debemos ir ¿le entran? — Pansy chillo emocionada

— Si claro — Dije yo.

— A mí me va bien — Fleur se encogió de hombros.

El resto del día no me despegué de las chicas. Es que no quería estar con Draco, había dicho que no me acercaría, pero no es solo por eso... si no que era por lo que había descubierto. Él me confundía más que la mierda y yo no quería dañar a mi mejor amiga y terminar enamorándome de él. No quería... pero tampoco lo quería ver sufrir a él. No sabía qué hacer.

Las chicas me esperaban, y yo como estúpida me quedaba dormida en casa. El partido estaba por comenzar. Corrí y choqué con alguien, como era típico.

— Lo siento — me disculpé.

— Vaya, y yo pensé que la tierra te había tragado.

— ¡Oliver! — Lo abracé y le besé la mejilla.

— Estoy nervioso. Deséame suerte, hermosa.

— ¡Suerte! — Rió y me besó la frente.

— Me voy — Dijo y salió corriendo.

Iba a seguir caminando pero tomaron mi brazo. No era necesario mirar para atrás porque su olor lo delataba. Era a cigarro y a un fuerte perfume.

— Pensé que no podías hablar — Dijo este molesto — O quizás solo no me querías hablar.

No podía evitarlo estaba vez.

— Lo siento. Es que yo no puedo porque... — Me calló un con un beso tierno.

Al instante me quise apartar, pero este me apretó más a él. Y por una extraña razón... yo quería estar con él así por un buen instante. Así que después de forcejear, le respondí casi desesperada.

Me hizo entrar al cuarto del conserje mientras me besaba. Sonrió mientras le mordía el labio.

— Me debo ir, bonita — Me dijo y me besó de nuevo para salir corriendo. Una puntada de arrepentimiento llego a mi corazón.

Había traicionada de nuevo a Pansy.