𝙸𝚜𝚕𝚊𝚗𝚍 (𝖮𝗇𝖾𝗎𝗌) 𝚙𝚝3

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Los 6 chicos estaban caminando por la isla mientras tomaban todas las cosas comestibles que habían allí, vallas, bananas, cocos y etc, tranquilamente, ya ninguno se acordaba de cuanto tiempo habían pasado allí, pero suponían que esa sería su nueva vida.
-Chicos, esperen-(Murmuró Geonhak, parando a todos y haciéndoles una seña de silencio)
Todos callaron al instante, oscurecieron el día como a ellos se les antojaba, también comenzando a verse la niebla rodeandolos.
Todos se pusieron en un círculo, cubriendo todos los lados posibles con la mirada.
HwanWoong tomó la mano de YoungJo con fuerza, sintiendo su respiración pesada.
Kim entrelazo sus dedos, dándole por lo menos algo de seguridad.
No sabían que pasaba, solo sabía que era otra asquerosa prueba de esas que ponen para que el programa fuera divertido para los Androides que estaban mal de la cabeza.

Dongju entre cerro los ojos, mirando la pequeña luz a en fondo de la niebla, la cual lentamente se agrandaba como si se estuviera acercando, y cuando se dió cuenta gritó:
-ABAJO!-(Al instante todos se fueron al piso, la bola de fuego chocando contra una palmera y comenzando está a incendiarse)
-VAMONOS DE AQUÍ YA!-(Esta ves el que gritó fue Ravn, todos comenzando a correr mientras esquivaban las bolas de fuego que era directamente dirigidas a ellos)
La respiración de todos estaban agitadas, estaban asustados a más no poder, si una de las bolas de fuego los alcanza seguramente dejara a alguien gravemente herido.
Dongju y HwanWoong iban corriendo detrás de todos, intentando a duras penas esquivar estás.
El menor de los 6 miró como dos bolas se dirigían hacia ellos, de un momento a otro el miedo lo invadió, el no quería lastimarse, así que corrió más rápido, sin querer empujando al el más bajo, el cual casi tropieza, dejando así... Que la bola de fuego golpeara su brazo, causando que cayera al piso con un fuerte grito.
-HWANWOONG!-(El primero en quitar a todos del medio fue YoungJo, corriendo hacia Yeo y tomándolo en brazos)
La niebla desapareció, las bolas de fuego pararon de llegar y todo quedó en silencio, solo escuchándose los quejidos y llanto de Woong mientras trataba de respirar correctamente.
-ESTÁS MALDITAMENTE LOCO?!-(Gritó el mayor hacia el menor de todos, claramente enojado)
Dongju se encogió en su lugar, apretando sus manos.
-Y-Yo, no era mí intención yo no quería...-
-TU NO QUERIAS!?-(Interrumpió otra ves gritando, mirando el brazo del peli morado en carne viva, con algunas cenizas encima)-PUDO HABER MUERTO!-
-DEJA DE GRITARLE!-(Interrumpió esta ves Leedo, poniendo al más bajo detrás, protegiéndolo)
-TU NO TE METAS GEONHAK!-(Kim estaba más que enojado, teniendo al más bajo entre sus manos sollozando, no era un panorama lindo)-PUDO HABER MUERTO POR SU PUTA CULPA!-
-NO ERA SU INTENCIÓN IDIOTA-(Ravn se paró con intenciones de comenzar una pelea física, Leedo no se negó, acercándose también pero rápidamente Seoho y Keonhee reteniendolos)
-No, espera, Leedo no!-(Decía con dificultad Keonhee, parando como podía al mayor)
-YoungJo cálmate-(Gruñó Seoho, no dejando por mucho que quiera acercarse)
A este punto Xion lloraba abrazado a el rubio, el cual le acariciaba el pelo intentando calmarlo.
Se sentía terriblemente culpable, Kim tenía razón, pudo haber muerto por su culpa y entendía que estuviera enojado pero aún así se sentía mal cuando le gritaban.
-Que tal si en ves de enfocarte en pelear con Geonhak no ayudamos a Woong!?-(Dijo finalmente el Lee mayor, haciendo finalmente reaccionar al retenido)
Con un suspiro, nuevamente tomó al más bajo en brazos, rápidamente llevándolo a la cueva para por lo menos ponerle agua sobre la herida para limpiarla algo.
Keonhee suspiró, acercándose a el peli naranja y también acariciando su cabello, mientras los otros tres se iban de allí.
-Tranquilo Dongju, HwanWoong sabrá ver que no fue tu culpa cariño-(Dijo suavemente, el menor mirándolo con los ojos cristalinos)
-De verdad?-(Asintió, regalándole una sonrisa para calmarlo)
-Por ahora no volvamos a la cascada, no queremos otra pelea-

Peleaba por mantener los ojos abiertos, el dolor que sentía lo hacia empezar a ver las estrellas, realmente era insoportable, ardía, ardía como la maldita mierda, sentía que no podía moverse.
Y en el momento en que la primera gota de agua tocó su carne viva, gritó tan fuerte que juró desgarrarse la maldita garganta, llorando con más fuerza.

ᴇsᴀ ɪsʟᴀ ᴇʀᴀ ᴜɴ ᴍɪᴇʀᴅᴀ.

One shots randomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora