Sábado 8 de Febrero, 2020
El vuelo iba a salir pronto, era un viaje largo de varias horas, catorce si su memoria no le fallaba, catorce horas que venía planificando desde hace un tiempo y del que no había hablado con nadie del tema hasta estar cien por ciento seguro de llevarlo a cabo, sin duda lo que más le alivió fue ver las sonrisas de sus amigos en señal de apoyo, aún sabiendo lo que el viaje podría significar para ellos.
Era un viaje largo y de gran peso emocional.
Tampoco negaba que muchas de las noches en que se preguntaba así mismo sobre si estaba seguro de hacerlo, había llorado, cientos y cientos de lágrimas que le terminaban quemando los ojos y el alma, le lloraba a la ausencia de su persona especial a su lado para poder contenerlo.
Los altavoces del aeropuerto le anunciaron la salida de su vuelo, tomó una bocanada de aire que le llenó los pulmones con un oxígeno más pesado de lo normal y así cruzó la puerta de embarque, miró por última vez atrás, dos de sus amigos y su primo fueron al terminal con él a despedirse, los iba a extrañar mucho.
Fue así que emprendió tal ansiado viaje, con su maleta llena de ropa y su corazón lleno de sentimientos encontrados.
Subió al avión con la pequeña bebé de apenas un mes en brazos, aún no hacía acto de presencia su compañero de asiento en el lugar y sólo deseaba que fuera alguien con paciencia ya que viajar con una bebé muy pequeña podía ser problemático.
Desde hace poco más de un mes que Johnny no estaba con él, ahora estaba en Chicago y había decidido luego de meditarlo un poco más a fondo el poder viajar y residir allá también, había contado con el apoyo de Myoryon y de Seo Joon para ello, cabe mencionar que también terminaría sus estudios en una universidad cercana.
Jeanette se había quedado dormida hace poco rato en sus brazos por lo que estaba consciente de que podía despertar en cualquier momento. Cuando ya todos los pasajeros estuvieron a bordo les dieron las instrucciones de seguridad antes de despegar.
Estaba muy nervioso.
Tenía sueño porque apenas podía dormir una hora, tenía bastante dolor de espalda ya que el asiento del avión era incómodo y también moría de hambre ya que lo que le ofrecieron las azafatas dejaba mucho que desear.
Al salir del aeropuerto luego de recoger sus cosas, detuvo un taxi que venía llegando por la salida del lugar, subió el equipaje con ayuda del taxista y recordando las lecciones de inglés que Johnny le dió, indicó de forma impecable la dirección de la casa de los padres del mismo que también habían regresado a vivir en Chicago.
La pequeña bebé mantenía abiertos sus ojitos, mirando atentamente por la ventanilla del taxi todo el paisaje que ofrecía el recorrido. No quería pensar mucho en su llegada ya que de por si le sudaban las manos desde que descendió del avión y le temblaban un poco las piernas.
El taxista detuvo el auto al llegar a una hermosa casa bastante apartada de lo que era el bullicio de la ciudad, era un barrio tranquilo por lo que se podía apreciar a primera vista. Todas las casas tenían bastante patio y las calles estaban bastante limpias. Bajó del auto y bajó su maleta mientras escuchaba la puerta oírse y la tan familiar voz de Myoryon saludarlo mientras se acercaba.
--¡Al fin llegan! --sonrió mientras le ayudaba cargando a la pequeña bebé.
Hyuck le pagó al hombre de mediana edad y este agradecido se fue dejándole con sus cosas. Tomó su maleta grande y la mochila con cosas de la bebé para así caminar con la mayor al interior de la casa, era bastante temprano tal vez las 8 am ya que aún no estaba tan claro el día.
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❀~ La Vie en Rose ~❀~ JohnHyuck ~❀
FanfictionLuego de lo que él creía su ruptura amorosa más dolorosa, Lee Donghyuck o "Pudú" conoce a quien le devolvería parte del color que creyó perdido en su vida, Johnny Suh se convierte en su todo a pesar de las barreras que creían difíciles de superar. P...