Encontramos el amor, donde no se supone que debe estar.
Fecha de Inicio: 23/11/2020
Fecha de finalización: 02/01/2021
Prohibida su adaptación o copia.
Portada por: @Kimjongdaesang
Co-Escrita por :@Kimjongdaesang
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Crees que es una buena idea?— Tomé asiento en la parada de autobuses, Rin me había acompañado de camino a casa. Pasé por la editorial para firmar algunos libros que serían lanzados la próxima semana.
—Claro que sí.— La castaña se dejó caer a mi lado.— Pero, tengo una duda...
Voltee mirarla con preocupación, Rin siempre estaba emocionada cuando un nuevo libro era publicado. Sin embargo, en este momento se veía nerviosa.— ¿Qué sucede?
—Las autobiografías se suelen hacer cuando ya ha logrado todo lo que quiere en esta vida.— Llevó su mirada hacia adelante, la fijo en un punto cualquiera de la carretera.— ¿Se va a retirar?
Imite su postura, dejándome llevar por mis pensamientos. ¿Me tendría que retirar? Si lo hacía, podía tener una vida tranquila... Quizás mudarme a las montañas, sin preocupaciones. Respirar el aire fresco y deleitarme con el canto de las aves, y, tal vez, junto a JaeMin.
—No lo sé, Rin.— Me recosté contra su hombro, a lo que su cuerpo se tenso por unos segundos.— ¿Debería hacerlo?
—Al señor Nakamoto no le caerá nada bien la idea.— Rio levemente.— Pero, si usted siente que ha vivido una vida satisfactoria, o necesita paz, este es un buen momento. Con las regalías que recibe de sus libros, puede vivir cómodamente por un largo tiempo.
—¿Eso crees?— Asintió con su cabeza.— Entonces creo que lo pensaré.
—Le vendría bien un cambio de aires, el señor Nakamoto es de Osaka, podría recomendarle algún lugar bonito.— La mayor se quedó viendo a lo lejos, fijamente.— Oh, creo que ese es su autobús.
Me puse de pie y sacudí la parte trasera de mi pantalón. El autobús ya estaba a unos metros de llegar a la parada.— Gracias, Rin.
—No hay de qué.— Alzó su mano para despedirse.— Qué tenga un buen día.
—Igualmente.— Me di la vuelta para ingresar al vehículo, el mismo estaba completamente vacío. Caminé hasta el fondo y tomé asiento en el lugar a un lado de la ventana, recostándome sobre la misma y cerrando los ojos.
Había salido de casa temprano por la mañana, Yuta había insistido en tener una entrevista para el lanzamiento de mi último libro. Aunque, mi atención estaba totalmente puesta en mi biografía. Tenía algunos escritos revueltos, hace unos días había decidido empezar a escribir, junto con la ayuda de JaeMin.
JaeMin... Me dijo que iba a ir a la estación nuevamente, últimamente había estado recordando pequeñas cosas sobre su pasado. Me emocionaba, de hecho, que recuperará su memoria. Pero, ¿Y si decidía regresar a su país natal? No podía evitar ser egoísta y querer mantenerlo junto a mí, él era...
Todo lo que tenía.
(...)
Abrí la puerta del estudio de mi padre en busca de Shotaro. Caminé hasta el escritorio, buscando debajo del mismo.