CUANDO ARDE LA LLUVIA...

"Porque al final no estamos solos..."

Dormí mucho mejor que otros días, son las 9 de la mañana y no me siento tan miserable como de costumbre, inclusive tengo ganas de considerar la posibilidad de que como bien dice mi madre

–"en algún punto todo va a estar bien"

Quizá debería de intentarlo nuevamente. Después de lavarme los dientes y de hacer "pis" me dirijo a la cocina porque tengo un hambre feroz y reviso el refri y la alacena, a ver, ¿que tenemos? Bien, pan tostado, mermelada de naranja –mi favorita – y café eso bastará, nada mal, por primera vez en meses mi actitud se relaja y mientras tomo el desayuno me doy la oportunidad de fantasear.

Debo ir al supermercado, los "víveres" no durarán mucho y le agradezco una vez más a mi padre por su bondadosa –y bien generosa –caridad, el dinero que me dio ayudara a mi supervivencia durante una semana más, termino de comer el desayuno y me dirijo a mi laptop para ver si tengo alguna respuesta de las miles de solicitudes de empleo que he mandado, cuando la abro y miro las iniciales de la marca Hp me rio de la pequeña broma que me suele hacer algunas veces mi dulce verdugo, Rodrigo, sobre todo cuando mi humor esta asqueroso

-ves, hasta la computadora es amable contigo y te saluda ¡Hola puta! Hp. Si, ella también te conoce y sabe quién eres.

-vete a la mierda...

¿A quién se habrá tirado él cabrón? ¡Oh! Tengo una cita, una entrevista de trabajo para hoy a las 6 de la tarde, no recuerdo haber enviado solicitud a esta empresa, dice que es de asistente personal de un contador, no tengo ni la menor idea de quien sea pero por el momento no estoy para ponerme exigente y me alegra el mensaje en mi buzón, tecleo rápidamente una respuesta y confirmo mi asistencia a la entrevista a las 6 pm.

Tengo que llamarle a Rodrigo para que me desee suerte, mmm que rara estoy últimamente, yo no creo en la suerte, las mujeres como yo sabemos que esa perra no da paso en falso, a la primera te descuidas y te cobra con una ofensiva taza de intereses, pero acabo de pensar en ello de forma contundente, en fin como sea, debo llamar a mi verdugo. Después de 5 timbres una voz nada familiar me contesta del otro lado, estoy algo alarmada, Rodrigo siempre me contesta al tercer timbrazo sin importar en donde se encuentre ni la situación y... ¿una mujer? ¿Dónde estará este cabrón?

-¿bueno?- la voz femenina del otro lado suena agresiva

-hola, buen día –me emputa su tono pero soy educada y la diplomacia es mi mejor carta de presentación – deseo hablar con Rodrigo.

-¿Quién eres?

¿Qué le pasa a esta tipa? yo no tengo porque darle explicaciones

-comunícame con Rodrigo –ordeno desafiante cuando a lo lejos escucho "¿Quién es? – Gala – le espeto para que se entere de una vez por todas quien soy

Ella suaviza su tono al verse observada he intenta estratégicamente sonar despistada para quedar bien con él, ¡Ja! A mí no me engaña señorita, más le vale tenerme como "amiga" sino, será gracias a mi una más de su memorable lista

-dice que es Gala –dice con falsa melosidad

-dámelo –ordena

-¿Qué onda culera? –su voz suena alegre y al mismo tiempo protectora

-¿Dónde carajo estas? ¿Y esa dulzura de donde la sacaste? –se ríe de mi marcada postura de desaprobación

-de una cajita feliz –eso significa que nadie importante y que despertó en su habitación

-uff pues sal corriendo porque es la típica hembra posesiva que amanece con alguien después de una noche y cree que ya es de su adquisición