#Capitulo 24*

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Luke's pov

Mack se levantó temprano y le dije que la llevaría. Era el día. Ella no parecía insegura, se veía decidida. Había servido traer a la loca de Eleanor y al cursi de Ed.

Es que en serio, ellos merecen ser sus amigos. A veces me ponía a pensar en que Ed era el ángel de su conciencia y Eleanor el pequeño diablillo. Pero no. Creo que Mack maneja como quiere a su angel y demonio interno.

Sobre todo ese demonio cuando se lo propone. Y ella se vería absolutamente caliente vestida de diablita. Inconscientemente estoy mordiendo mi labio inferior.

Espera. ¿Que carajos pienso?

Sacudí mi cabeza mientras daba la vuelta para estacionarme. Aparqué como se debía y despues de apagar el motor me voltée suspirando hacia mi chica.

-¿Puedo entrar contigo? - pregunté tímido. No sabía si podía pero quería entrar con ella.

Ella me miró con una tierna sonrisa -No amor, quisiera pero no. Solo puede papá y... Heather- dijo su nombre con recelo

Hice una mueca de lado -De acuerdo -acepté suspirando. Yo quería estar a su lado -Pero te esperaré aquí -dije con una sonrisa mientras la abrazaba

Escondió su rostro en mi pecho asintiendo. Sus finos brazos me rodearon y después de suspirar, apoyó su barbilla sobre mi pecho para mirarme con una sonrisa traviesa

-Eres el mejor novio...-se detuvo y su sonrisa se extendió -El mejor prometido de todo el mundo -me dijo con los ojos iluminados, se veía feliz

Mi corazón se estrujó y tuve que abrazarla para que mis ojos no me delataran la culpa y vergüenza

-Te amo -le dije

-Y yo a ti -respondió abrazándome fuerte




Mack's pov

La reunión era a las 8 de la mañana en punto pero aun eran las 7:25 de la mañana. Luke se había quedado en la camioneta esperándome. Quise regresar de nuevo con él para hacer tiempo pero me distraje al pasar por los salones de ensayo.

Pensé por un momento que habría gente ensayando pero al entrar, estaba vacío.

Mi mirada divagó por todo el salón como si fuera la primera vez que entraba. El piso de madera clara, lisa, pulcra y brillante tenían un color que daba luz al cuarto. El gran espejo que ocupaba toda la extensión de la pared de enfrente estaba completamente limpio y reflejaba claramente mi imagen, sola ahi en aquel salón.

Los vestuarios estaban a un lado y en una esquina estaba el equipo de música. Siempre me encantó la música. Era increíble lo mucho que una melodía podía ser motivo para maravillosos pasos y movimientos. O cómo el cuerpo podía ser el mejor instrumento.

Cuando era pequeña, papá solía llevarme cambiada a las clases de ballet. El salón de baile era muy parecido a este, solo que más pequeño. Yo nunca supe que mi mamá, mi verdadera mamá, hubiera sido bailarina. Sé que solo por un tiempo ya que... ella murió joven. Me duele saber que murió al darme a luz. Hubiera querido conocerla. Papá dice que tengo sus ojos. También que mamá a pesar de que amaba el baile, siempre quiso tener una vida aventurera. Eso le recordaba a mi. Ella quería viajar por todo el mundo, llegar a tener una casa enorme y pasearse y todo eso. Papá también me dijo que cuando él compró la casa que ahora tiene, la compró pensando en ella. Una vez le dijo cómo soñaba que fuera su casa.  Cuando papa vio la casa, se acordó de ella.

FOREVER BESIDE YOU 「Libro#3」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora