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Sasuke caminaba con el ceño fruncido y confundido. Se supone que tuvieran una semana libre, pero no entendía por qué le dieron una misión a él, lo encontraba muy extraño.

El joven pelinegro entró a la oficina del Hokage tan pronto fue llamado. Dentro vio a Kakashi parado en una esquina y al mismo Tercer Hokage sentado en el escritorio con mucho papeleo.

-Hola Sasuke, tenemos una pequeña misión para tí-

-¿Mision?-

-Asi es, todo lo que tienes que saber esta dentro de este rollo. Luego que salgas de la oficina lo leeras, hoy comienza tu misión, ¿de acuerdo?-

Explicaba mostrando una caja con un rollo azul, Sasuke estaba dudoso pero lo tomó. Salió lentamente de la oficina sin notar que el viejo y Kakashi suspiraban aliviados.

-¿Crees que pueda con él, Hokage?-

-No lo sé, pero si es así su relación debe tener al menos un poco de porciento en éxito-

Sasuke sacaba el rollo y lo abrió notando que era cuidar de Naruto. Esto le resultó muy raro pero si era así, podría acercarse más a Naruto. En el rollo estaba la dirección del rubio, así que saltó en los tejados para llegar rápido.

Mientras Naruto estaba en su apartamento respirando agitado en la cama. Llevaba ropa delgada al sentirse muy caliente casi para sofocarse.

-<<Esto...no es fiebre, ¿qué diablos es?>>-

Se preguntaba mientras recordaba que cuando volvían la aldea un gato negro. Salto hacia el rasgoñando sus brazos mientras huía de unos perros. Desde entonces se había sentido raro, su cuerpo estaba muy débil y la ropa, incluso las sábanas lo incomodaban demasiado.

-<<Soy inmune a muchos venenos, pero no sé que diablos pasa>>-

Naruto se sentía molesto e irritado mientras salía de la cama. Para tomar agua, se sentía deshidratado, fue a la cocina. Tomando un vaso de agua con rapidez, sintió la temperatura de su cuerpo bajar pero no lo suficiente. Chasqueo su lengua molesto y cuando se giró. Se encontró con una máscara de madera tallada crudamente.

En esa máscara veía unos ojos azules muy oscuros. Fue tomado de sorpresa, tenía las trampas activadas y una persona logró entrar.

-¿Pero qué...?-

No pudo terminar al su mentón ser tomado por esta persona extraña. La sujetaba con fuerza, se ría de forma divertida.

-Así que~ Este veneno funcionó en tí~ Estoy tan emocionado~

Naruto lo miro furioso al saber que estaba envenenado pero no podía ejercer fuerza. Sólo podía sostener el brazo con sus dos manos. Mientras respiraba agitado, como si la calor de su cuerpo no permitiera que el oxígeno estuviera por bastante tiempo en sus pulmones.

-Mm~ Tu cuerpo es muy débil con el afrodisíaco~

Decía con su voz tetrica tocando con la mano libre el abdomen. Haciendo temblar a Naruto, a su cuerpo le gustaba al reaccionar de forma indecente. Pero a Naruto no le gustaba para nada, lo enfurecía.

-Debo decirte que no es uno cualquiera~ Mientras más tiempo estés sin satisfacer tu cuerpo más fuerte se volverá hasta que pierdas la cabeza~ Claro~ Tocarte no será suficiente~

Comenzó a reír divertido mientras Naruto tenía muchas ganas de matarlo. Pero su cuerpo dejaba que esta persona extraña hiciera lo que quisiera con él. Apretaba sus dientes pero esa mano sabía donde tocar haciendo que soltara suaves gemidos.

-¿Ves?~ No puedes resistir~

Susurraba de forma venenosa mientras más deseos de matar surgían en el alma de Naruto. Hasta que de momento alguien toco la puerta deteniendo las acciones de este ser extraño.

-Naruto, soy Sasuke-

Gritó el pelinegro desde afuera haciendo que esta persona extraña gruñera como un animal enfurecido. Miro a Naruto que tenía las mejillas más rosadas pero su mirada azulada. Mostraba un fuego ardiente de asesinato, alejó lentamente su mano.

-Veremos cuanto resistes~ Serás mío~ Es una promesa~

De repente desapareció del apartamento, las piernas de Naruto temblaban. No podían resistir su peso así que Naruto calló en el suelo. Dejando caer el vaso rompiendose en pedazos. Esto alertó a Sasuke y abrió rápidamente la puerta. Encontrando a Naruto arrodillado en el suelo respirando agitado.

-¡Naruto!-

Corrió hacia él levantandolo lentamente, sentía su cuerpo muy caliente. Sasuke no pudo evitar sentirse preocupado y lo acostó en la cama.

-Tienes mucha fiebre, te daré medicinas-

Sasuke buscaba en los estantes encontrando medicina. Se las dio a Naruto con agua fría y comenzó a poner paños húmedos en la frente del rubio. Estaba muy preocupado, nunca había visto así al rubio.

Los siguientes días lo visitaba, le daba medicina y le cambiaba el paño. Pero no mejoraba, tenía que llevarlo al hospital lo más rápido posible. Así que hoy fue temprano para llevar a Naruto hacia el hospital. Abrió la puerta con la segunda llave que Naruto le había dado. Ya que el mismo no podía abrir la puerta, cuando entró y fue a la habitación.

Vio al rubio respirando agitado en la cama, acurrucado entre las sábanas. Sasuke trago saliva ya que en estos días había visto a Naruto. Con ropa muy delgada que dejaba mucho expuesto su cuerpo. Así que lentamente se acercó, aunque sabía que Naruto siempre estaba alerta de su presencia.

-Naruto, no haz mejorado en estos días. Hay que llevarte al hospital muy urgente-

Decía apartando las sábanas mientras Naruto abría sus ojos. Sólo un pequeño brillo había en ellos, estaba a punto de perder la conciencia. Dejarse dominar por este veneno que le obligaba a desear lo molestaba. Pero Naruto ya no podía soportarlo más, así que jalo la manga de Sasuke. El cual lo miró sorprendido, no esperaba una acción así del rubio.

-Sa-Sasuke sólo confió en tí...Ngh...E-Estoy envenenado de afrodisíaco...Solo tú puedes ayudarme...-

Hablaba con dificultad pero ahora mismo Sasuke se regañaba. Recordaba en una clase que explicaron síntomas de un veneno de afrodisíaco. Ahora que lo pensaba bien, Naruto presentaba claramente esos síntomas pero sólo pensaba que era fiebre.

-Sasuke...el efecto no se irá si n-no lo hacemos...Solo confió en tí...por favor...Guh-

El pelinegro sentía su corazón latiendo muy rápido. Jamás pensó que Naruto le pediría algo así, no negaba que se había enamorado de él. Es verdad que quería hacerlo porque lo quería pero sólo si las dos partes se amaban. Pero Naruto lo necesitaba para liberarse del veneno que estaba en su cuerpo. Así que suspiró y tomó la mano de Naruto.

-Esta bien, te ayudaré-

ᴀˡᵐᵃ sᵒˡⁱᵗᵃʳⁱᵃDonde viven las historias. Descúbrelo ahora