Una gordita con carácter (CANCELADA)

1.

Cap: Cubo de pintura.

Narra Yasmin.

Me desperté por la alarma, la apague y vi la hora. Eran las 6:30 de la mañana y hoy era el primer día de clases. No tenia muchas ganas de ir pero igual me levante y fui directo al baño. Me duché, al salir me seque el cabello y lo peine. Salí del baño y me vestí con: (imagen en multimedia).

Baje las escaleras y fui a la cocina. Para ver a mi familia tomando desayuno. Me senté a lado de mi hermano Javier. Tiene 19 años, contextura media, Ojos cafes, cabello castaño. Social, amigable, atento alto . Así es mi hermano.

Al frente estaba mamá, 46 años, delgada, ojos cafés, cabello castaño. Pequeña, social, extrovertida, amistosa, tolerante. Así es mamá.

Al lado de ella papá, 47 años, gordito, ojos azules, cabello rubio. Alto. Social, tolerante, amistoso. Así es mi padre.

Creo que yo no me he presentado, soy Yasmin Vergara, tengo 17 años y soy tierna, simpática, feliz. Saque el cabello de mi madre, castaño, los ojos de mi padre, azules, y soy alta. Pero también soy una adolescente gordita. Pero no soy de esas gorditas que se sienten mal por tener un cuerpo más grande que el de las otras chicas. Si no soy una gordita feliz de ser como soy y eso me enorgullece.

Bueno, comí las tostadas y el jugo que me sirvió mamá. Me levanté y fui a al baño a lavarme los dientes. Cuando termine me mire al espejo y me observe.

-Yasmin, eres linda, que nunca se te olvide.- me dije a mi misma. Y sali del baño. Baje rápidamente las escaleras. Iba a tomar las llaves se mi mini Cooper cuando, Javier las toma antes que yo.

-Hey, esas son mis llaves.- le dije con el ceño fruncido.

-Consigue la licencia y te daré las llaves- dijo.

-pero.... vale- dije.

-vamos- dijo y salio de casa. Tome mi mochila y lo seguí hasta MI mini Cooper rojo. Subí al asiento del copiloto y Javier al del conductor.

Encendió el auto y nos dirijimos hacia la secundaria. Cuando llegamos me iba a bajar pero tome del cuello a Javier y lo acerque a mi.

-si le pasa algo a mi auto, te juro que te dejo sin hijos.- dije seria.

-ok- dijo. Y lo Solté. Salí del auto. Camine hacia la entrada a esperar a mis amigas. Si, si tenia amigas y son cuatro. Antonia, Fernanda, Angélica y Samanta. Todas ella son mayores que yo, pero solo por un año. Ah, y son delgadas y rubias de ojos verdes. Son las chicas populares y más deseadas de todo el instituto. Yo soy de su grupo, pero no soy muy popular. Pero eso no me importa.

Tocó el timbre y las chicas no llegaron, lo encontré un poco raro pero igual entre a clases, me tocaba matemática. La hora paso rápido. Las demás clases pasaron igual de rápido. Y igual que en todas las clases no vi a las chicas. Y lo que encontre más raro fue que nadie me molesto en todo el día.

Salí de la ultima clase, y fui directo a la cafetería, no había nadie en los pasillos. Pero no le di importancia, cuando abrí las puertas de las cafetería todo el mundo estaba allí hasta mis amigas, y la pesada de Amanda. Mire hacia arriba y había un tarro con un cable, tiraron del cable y me cayo pintura roja en todo el cuerpo.

Mire a todos lados y vi a todos riéndose de mi. Hasta mis, ahora llamadas, ex-amigas.

-Ups, gorda. Creo que tienes un poco de pintura en.... todo el cuerpo.- dijo Amanda riendo.

-esta me las pagas...- dije y....