𝐌𝐞 𝐡𝐢𝐜𝐢𝐬𝐭𝐞 𝐨𝐥𝐯𝐢𝐝𝐚𝐫

𝕮𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 6

Narra _____

Me mordi el labio inferior sin quitar la mirada de ese grupo de chicos en el pasillo.

Vamos _____ avanza, me anime a mi misma y de ese grupo se asomó Nicolás, debo admitir que ese chico me gusta y mucho, es como mi amor platónico. Está en el último año de secundaria, un año mayor que yo, y casi siempre él y su grupo de amigos se paran en el pasillo a hablar y aveces a molestar a los que pasan.

Nicolás es el único chico con el que quisiera salir, lo sé, me contradigo, pero él es la única excepción, siempre me llamo la atención solo que nunca me atreví a hablarle y seguro que el ni sabe de mi existencia pese a que paso por su lado siempre que esta en el pasillo.

Un empujón me saco de mis pensamientos.

—Ups lo siento _____. ¿Vienes? –Luciana, se disculpó por chocarme, como siempre iba distraída chocando a los demás. A su lado estaba Catalina, iban para la cafetería.

Bueno será como todos los días, ni te notará, me dije y dando pasos largos me acerqué hasta alcanzar a las chicas.

Y como pensé estaba más concentrado en burlarse de su amigo.

—¡Es un estupido! –se quejó Catalina con el ceño fruncido.

—Idiota. Es mejor que lo dejes de una vez –le apoyo Luciana.

—¿Qué paso? –me uni a la conversación caminando a la par de ellas.

—Mario que la usa. Como siempre –contesto Luciana resumiendo la vida "amorosa" de su amiga. La verdad no entiendo mucho.

—Bueno y porque no lo dejas –dije dirigiéndome a Catalina que tenía el rostro ligeramente molesto.

—No es fácil –hizo una mueca y pidió en la cafetería.

Rara vez me junto con Luciana y Catalina no las veo como amigas por el simple hecho de que aveces se comportan como ese tipo de chicas tóxicas y como yo no lo soy tomamos distancia, a excepciones como hoy.

—¿Vieron a ese chico guapo de la fiesta? –pregunto Catalina y sin recibir respuesta siguió–. Resulta que estudia en el colegio a unas cuadras de aquí –prosiguió un tono más animada y Luciana soltó un chillido.

—¿Enserio? –le sonrio esperando a que diga que si, la otra solo asintió con la misma sonrisa que su amiga.

—¿Tan bueno está? –les pregunté con una ceja levantada al ver su alegría.

—¡Mucho! –ambas soltaron al unísono.

—Me invito a la salida del cole –Catalina miro a Luciana sonriente.

—¿Irás? –chilló la otra.

—obvio.

En esa conversación ya no me metía. Me concentré en mi desayuno metida en mis pensamientos cuando mi vista se metió una mano con un sándwich. Abri mis ojos y gire a ver quién era.

—Lo prometido es deuda –dijo Izan con una pequeña sonrisa.

Lo miré confundida mirando el sándwich y luego a él.

—Ayer no desayunaste y te dije que hoy te iba a deber –explicó a ver mi cara de confusión.

Estaba con tantas cosas en mi mente que me olvide por completo de eso.

—Cierto –tome el sándwich y le sonreí sin mostrar mis dientes–. Pensé que me...

—¿Hola? –fui interrumpida. Del otro lado de la mesa Luciana y Catalina miraban a Izan con una pequeña sonrisa amistosa.

—¿Qué tal? –respondió Izan devolviendoles la sonrisa.

—¿Quién es tu amigo _____? –Catalina me pregunto levantando una ceja–, esta guapo –comento sin miedo. Aveces es tan directa.

—No es mi... –empecé a aclarar pero al ver que Izan me miraba como sabiendo lo que iba a decir (que no era mi amigo) decidí decir otra cosa–. Se llama Izan –le presente.

—Izan –repitió Luciana con la mirada coqueta puesta en él.

—Un gusto –dijo Izan desviando su mirada de esta–, ya me voy, mis amigos me esperan –y dicho eso se puso de pie y se despidió con la mano.

—Oh y gracias por... –levante el sándwich refiriéndome a eso.

—No hay de que –dijo alejándose poco a poco con una sonrisa y desapareció junto con otros chicos.

—Bye –dije más para mi que para él ya que estaba lejos.

—No nos contaste que tenías a un amigo tan... –Catalina no termino la frase al morderse disimuladamente su labio inferior.

—Ay Catalina yo lo vi primero –le reclamo Luciana, supongo que de broma.

Resople —¿les importa? Llego tarde –y las dejé con la palabra en la boca tras levantarme e irme en dirección a la siguiente clase.

De seguro me llenarían de preguntas estupidas como: esta soltero, lo besaste o otro tipo de cosa que ni quiero pensar y hoy no estoy con ese humor para responder, aparte no se si decir amigo, de seguro ya no volveremos a hablar en la vida, eso es casi seguro.