❝ 'Won't you say what's on your mind? ❞
La mayoría de los personajes son pertenecientes al universo de Marvel, por lo tanto no poseo propiedad sobre ellos.
Portada hecha por @tantadroga
❝But don't ever give me up I could never get back up when the future starts so slow ❞
—Future Starts Slow, The kills.
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Selena se encontraba acostada boca arriba en su habitación, procrastinando como cada día en el que no tenía nada que hacer y estaba aburrida. Ya había tenido su entrenamiento, sus clases, Stark no necesitaba nada y Peter se encontraba en una reunión. Por lo que aquél día era solo ella y nadie más.
Le dio un vistazo a su habitación, realmente había cambiado bastante desde la primera vez hacia dos meses atrás. Las paredes blancas ahora estaban cubiertas con algunas fotos y dibujos que ella había hecho, además de que se había comprado algunas decoraciones por internet para que se vea más acogedora y no pareciera una habitación de hospital constantemente.
Su mirada se fijó en la foto que estaba más arriba, se encontraba una pequeña Selena de trece años sonriendo feliz con su mejor amiga, en ese momento jurarían que serían amigas para siempre. Aquella fotografía fue tomada por la madre de la rubia una noche que decidieron ver películas de miedo, ambas quedaron tan asustadas después que ni siquiera se movieron de ahí para irse a la cama y ni siquiera querían ir al baño; de las pocas veces que Selena había sido realmente feliz antes de ser reclutada.
De pronto le invadió la nostalgia y las lágrimas amenazaban con salir, puede que su amistad haya sido complicada y que fueran dos personas totalmente distintas; pero siempre habían estado allí la una para la otra y extrañaba realmente a Mackenna. Por lo que no lo soportó más, no podía seguir lejos de ella, Stark tenía que entenderlo.
Sacó su celular y marcó el número de la rubia llamándole por videollamada, esperaba que en aquellos dos meses no hubiera cambiado de número ni nada por el estilo. No sabía cómo reaccionaría, conociéndola probablemente estaría enfadada por no haberle dado señales de vida en ningún momento y ni siquiera decirle que se iría, y no la culpaba, probablemente ella igual reaccionaría así. Lo único que esperaba era que no la mandara de paseo y que por favor le dejase explicarse.
Pasaron diez pitidos y la chica contestó, su rostro apareció en la pantalla.
—Oh por Dios, de verdad eres tú.— dijo medianamente sorprendida.— Temía que fuera un viejo de sesenta años que me estuviera pidiendo dinero por tu rescate.
Selena sonrió de lado insegura. La rubia lucía algo diferente, el pelo le creció un poco y estaba usando sus lentes por lo que, dedujo, estaba estudiando.
—Hola Mack.— dijo, sin saber realmente qué decir.
—¿Solo dirás eso?— preguntó algo indignada.— ¿Dónde demonios estabas, Selena Stonem? Me comí la cabeza pensando que estabas enojada conmigo, pero cuando dejaste de ir a la escuela realmente me preocupé porque pensaba que algo te había pasado. Imagínate que incluso fui a la casa de tus horrorosos tíos y me encontré con que vivía otra familia ahí y que te habías mudado.
