Magic School2☆

32🧙🏻‍♀️

El Patronus se disolvió en el aire, dejando a la familia de Fleur mirando atónita el lugar donde se había desvanecido.

- Nosotros no deberíamos estar aquí, - dijo Lupin al instante - Harry... lo siento... te lo explicaré en otro momento...- Agarró la muñeca de Tonks y se la llevó; alcanzaron la
valla, la escalaron, y se perdieron de vista. La Señora Weasley parecía desconcertada.

- El Ministro... ¿pero por qué...? No entiendo... - Pero no hubo tiempo de discutir la cuestión; un segundo después, el Señor Weasley había aparecido de la nada en la verja, acompañado por Rufus Scrimgeour, instantáneamente reconocible por su melena de pelo grisáceo. Los dos recién llegados caminaron por el patio hacia el jardín y la mesa iluminada por linternas, donde todo el mundo estaba sentado en silencio, observándoles acercarse. Cuando Scrimgeour llegó al alcance de la luz de las linternas, Harry vio que parecía mucho más viejo que la última vez que se habían visto, flacucho y sombrío.

- Lamento la intrusión - dijo Scrimgeour, mientras cojeaba para detenerse ante la mesa -Especialmente cuando veo que estoy aguando una fiesta.- Sus ojos se posaron un momento en el pastel con forma de Snitch gigante. - Muchas felicidades.

- Gracias - dijo Harry.

- Debo tener unas palabras en privado contigo,- siguió Scrimgeour- También con el Señor Ronald Weasley y la Señorita Hermione Granger.

- ¿Nosotros? - dijo Ron, que sonaba sorprendido -¿Por qué nosotros?

- Se lo diré cuando estemos en algún lugar más privado- dijo Scrimgeou - ¿Hay un lugar semejante? - exigió al Señor Weasley

-Si, por supuesto, - dijo el Señor Weasley, que parecía nervioso - El, er, salón, ¿por qué no allí?

- Puede usted mostrarme el camino - le dijo Scrimgeour a Ron - No habrá necesidad de que nos acompañes, Arthur. - Sakura vio que el Señor Weasley intercambiaba una mirada preocupada con la Señora Weasley mientras que Harry, Ron y Hermione se ponían en pie, los vio irse hasta la puerta de la entrada.

- Sakura, sé que es mucho pedirte esto, pero crees que podrías... - Dijo el señor Weasley un poco apenado, mientras señalaba su oreja. La pelirosa entendió rápidamente

- Claro, pero necesito silencio por parte de todos - No les dio tiempo a responder que concentró chakra en sus oídos, dio unos pasos más cerca del final de la mesa, para poder escuchar atentamente que es lo que hablaban el ministro y el trio de oro - Es sobre el testamento de Dumbledore-sama - Todos abrieron los ojos con asombro

- Pero Dumbledore falleció hace un mes, porque esperar tanto? - Pregunto el señor Weasley, Sakura sonrio y repitió lo mismo que Hermione dijo

- Querían examinar lo que sea que les dejó... - Siguio escuchando la conversación mientras que todos esperaban a que dijera algo más, miraban las muecas que hacía la pelirosa - A Ronald le dejo su Desiluminador... no tengo idea que es eso - se calló para seguir escuchando, todos seguían a la espera de saber que pasaba - a Hermione le dejó unas copias de los Cuentos de Beedle el Bardo, este ministro no me cae muy bien, que problema tiene con Dumbledore-sama? - preguntó sin esperar respuestas, frunció el ceño cuando seguia preguntando sobre la relación entre ellos y Dumbledore - A Harry le dejó la primera Snitch que atrapo... - Hubo unos cuantos segundos en silencio, una mueca de confusión pasó por la cara de Sakura pero no mencionó nada sobre lo segundo que Dumbledore le habia dejado a Harry, se hizo un recordatorio mental para volver a leer sobre la espada de Godric Gryffindor, siguió escuchando y se dio cuenta que empezaron a discutir, sin darse cuenta apretó su puño y frunció más el ceño, unos momentos después todos pudieron escuchar gritos de plena discusión que provenían adentro, rápidamente el señor y la señora Weasley corrieron hacia el lugar, Sakura dejó de enviar chakra a sus oídos y miró hacia la casa. Cayo sentada en una de las silla, su cabeza dolía.