extra ; especial 10k

565 66 403
                                    

CAPÍTULO ESCRITO POR MI Y _Vekee_

Era íncreible lo rápido que se pasaban los años, el tiempo, las épocas, las personas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Era íncreible lo rápido que se pasaban los años, el tiempo, las épocas, las personas. Era increíble como un día podes estar en un lugar, con alguien y al otro estar solo.

Pero era linda esa sensación en el pecho. La sensación de que supiste aprovechar cada uno de los momentos que tuviste con alguien o solo. Que supiste aprovechar de cada momento de tu vida.

A veces extrañas, claro que si, pero sería egoísta querer traer a las personas de vuelta. Cada uno tiene un ciclo, algunos se cierran más temprano, otros más tarde. Algunos se cierran repentinamente y otros lentamente.

Así fue como se cerró el de Valentín, lenta y dolorosamente. Se cerró gracias a una enfermedad terminal que lo dejó en cama sus últimos momentos de vida. Aunque no se quejaba, estuvo acompañado todo el tiempo por la persona más hermosa que tenía, Daniel.

Habían varias cosas que llevaron a Valentín a esa enfermedad, pero la peor fue la pérdida de su madre.

La habían internado nuevamente, estaba bastante grave. Y de la noche a la mañana, Maia falleció.

Dani lo acompañó, lo abrazó, lo besó, lo apoyó pero era muy complicado levantar a alguien del suelo cuando estaba aferrado a él.

Dani se encargó de que los últimos días de Valentín sean perfectos, se encargó de dejarle muy en claro su amor, que, desde ese día, nunca estuvo solo.

Ahora, cuando se cumplía un año del fallecimiento de Valentín, Daniel se atrevió a ir a visitar su tumba. No había ido en estos meses, era doloroso ver como la persona que más amabas se encontraba enterrado, solo.

Al entrar al cementerio un escalofrío recorrió su cuerpo. Tenía frío y se sentía desprotegido. Caminó un poco hasta que encontró la lápida que decía

"VALENTÍN OLIVA
1998 - 2051"

Se arrodilló ante esta y la limpió un poco con la manga de su campera. Abrió el bolsillo de la misma y sacó un pedazo de papel, era una carta que Valen había escrito hace exactamente un año, el día que falleció y que nunca se había animado a leer.

Querido Danu:

O mi bebé, también te decía mi amor.
Algunas veces usaba la frase "mi prometido".
Pero, cualquier apodo que use da igual.

Me sigo refiriendo a vos de una forma especial.
¿Cómo no hacerlo?

Mientras escribía está carta recordaba momentos que no eran lindos.
Feos, oscuros, donde yo no veía una salida.
Donde la gente me llamaba "Wosito"
¿Te acordás?
Había entrado en el mundo de las peleas.
Todo por mi mamá.
Yo ya no podía salir, estaba desesperado, hundido. Algunas veces pensaba en morir.
El agobio que sentía esos días era y es inexplicable.
Y un día llegó mi luz.

CURSO (wosani) ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora