Capítulo 11

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Más de lo mismo en todo el recorrido de ayer.

  Pero esta mañana era diferente. No lo noté hasta que me levanté y me estiré un poco para quitarme la pereza.

  El cielo era gris. Gris, liso, homogéneo. Como si nunca hubiera existido nada ahí. No había sol, ni luna, ni nada. 

- ¡Newt, Newt, despierta! – Zamarreé al rubio que todavía dormía.

- ¿Qué, qué sucede? – Pregunta con voz apagada.

- Newt, el cielo, mira el cielo. 

- ¿Qué pasa con el…? – No terminó la frase, abrió los ojos como platos al notar la realidad.

  Nos apresuramos a ir a avisarle a Alby, que se encontraba igual de dormido que todos los demás Habitantes.

- ¡Alby, levántate! – Repetí el mismo proceso para despertarlo.

- ¿Cuál es tu problema, shank? – Dijo somnoliento.

- Las cosas están cambiando… la chica tenía razón. – El líder se incorporó rápidamente.

- ¿Qué? – Señalé el que tendría que ser el amanecer.

  Empezaba a notarse más movimiento en el Área con cada minuto transcurrido. Todos parecían asustados, y la mayoría no estaba trabajando.

  Otros estaban junto a la Caja, quizás esperando que algo sucediera con ella. Entre los tres intentamos persuadir a los Habitantes que volvieran a su rutina y que todo estaría bien. Pedían explicaciones, pero ni siquiera nosotros sabíamos qué pasaba.

  Minho se acercó para ir al Laberinto, pero me negué. Me intrigaba saber sobre el repentino cambio producido, y estar corriendo no iba a ayudar a conseguirlo.

  A las horas Newt venía hacía mí con expresión algo preocupada. 

- La Caja. No subieron las provisiones de esta semana.

- Mierda.

  

  Después del mediodía, los Corredores volvieron y se instalaron en la Sala de Mapas. Minho tenía razón, tal vez hoy podría haber algo diferente. La noticia de la caja corrió como reguero de pólvora causando más temor en el Área. Sin provisiones, sin sol, todo no funcionaría correctamente.

  Alby nos buscó y vi más serio que de costumbre. Casi triste, me animaría a pensar. Newt y yo lo seguimos en dirección a la Sala de Mapas, pero justo salieron a quienes buscábamos.

- Sí encontramos algo. – Dijo Minho.

- Bien, porque todo este lugar se está haciendo pedazos. – Alby tenía algo extraño… podía notarlo.

- ¿Qué más ocurrió?

  Newt dio una breve explicación sobre la Caja y el resultado de los cultivos faltos de luz solar.

- De todos modos encontramos algo. – El asiático se apresuró a contarnos su descubrimiento:

  Cómo siguieron al Penitente, verlo desaparecer por el Acantilado. La prueba con las rocas y la estrecha zona por la que entraban y salían del Laberinto. Una ilusión óptica era la respuesta más lógica.

- La Fosa de los Penitentes. – Agregó Thomas cuando hubo terminado la explicación. 

  Los tres chicos lo miraron como si fuera una molestia. 

- Será mejor que se tranquilicen. – Les repliqué. – Esto es suficientemente raro y no necesitamos que nadie se sienta fuera. Es difícil creer lo del Acantilado.

[#2] The Maze Runner: Life Goes On (Newt y Tú) Correr o MorirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora