-Déjeme...
Murmuro, aterrada.
Esto no puede estar pasando.
Siento sus labios sobre mi cuello.
Mordisqueándolo y besándolo.
Y lo peor es que cada vez que lo hace me siento más cerca de caer.
-No haré nada de lo que tú no quieras.
-Yo no quiero hacer
Le respondo aún más nerviosa.
-Mírate.
Y gira mi cabeza bruscamente hacia un lado, mi boca esta entreabierta, al igual que mis piernas, tengo los labios entreabiertos. Suspirando lujuria.
-Si no quisieras esto, hace mucho hubieses escapado, o gritado, hasta tal vez estuvieses llorando, pero mírate.
Suspiro.
Sin saber que decir.
Miro hacia abajo, y me topo con su gran erección cubierta por la tela de su pantalón.
Alzo la mirada al instante.
-No puede hacer esto, soy la mejor amiga de su hija, ¿qué tiene? ¿esta loca?
-Igual o tal vez un poco más que tú- se frota con mi cuerpo, siento toda su erección rozar con mi abdomen no puedo evitar gemir debido a la fricción que causan nuestras anatomías- ¿Crees que no te he visto mordiéndote el labio cuando me quite la camiseta para limpiarme de la mermelada de Ivanna? ¿O poniéndote nerviosa con mi cercanía? Cuando te quedabas a dormir... tus susurros eran "_______", agradezco que mi hija tenga un sueño profundo, porque de lo contrario... ay preciosa.
La observo.
Tiene las pupilas dilatadas.
Una de sus manos, se desliza por la suave piel de mi pierna.
No puedo evitar no morderme el labio inferior.
Me gusta lo que hace.
Me encanta.
Quiero hacerlo pero...
Ivanna...
Suspiro, cierro mis ojos con fuerza, intentando concentrarme.
Haciendo un gran esfuerzo por no dejarme llevar.
"No le hagas esto a tu mejor amiga"
"No perjudiques a la señora Reeves"
"No arruines tu vida por una maldita tentación"
"Eres menor de edad, ella podría ir a la cárcel"
"Pero nadie se enterara de esto...
Sus manos en mis piernas no me dejan pensar con claridad.
Intento alejarme, pero ella no me lo permite.
Y pone toda su fuerza para hacer que me quede en donde estoy.
Contra su cuerpo y contra la pared blanca.
-Me provocaste desde la primera vez que te vi.
Me susurra, queriendo besarme.
Frunzo el ceño y volteo la cara.
¿En qué momento la provoque?
-Yo nunca...
-No digas que nunca intentaste provocarme- dice con algo de frustración- Porque el primer día en el que te conocí, en la escuela el año pasado lo hiciste muy bien, ¿acaso tienes amnesia?
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Mala hierba; Sofia Carson | G!P
RomanceDefinitivamente todo esto sería más fácil si ella no fuera la mamá de mi mejor amiga.