Mala hierba; Sofia Carson | G!P

Capítulo 20

-¿Qué demonios te hace pensar que fuí yo la que estaba cenando con la madre de Ivanna?

-¿Crees que hubiera venido aquí si no estuviera segura de ello?

Intento mantener la calma.

Observo a Alisa, se ve calmada pero algo extrañada.

Paso mis manos por mis piernas, inquieta.

-Estuvimos hablando de Ivanna.

-¿Sobre que?

-De que esta cambiando, ya sabes, ya no nos juntamos como antes, y ella esta extrañada, además quería saber por que Ivanna hizo esa fiesta sin su consentimiento...

Alisa pone los ojos en blanco.

Sus mejillas estan algo rojas.

Se acomoda mejor en el sofá y vuelve a observarme.

Su mirada me hace ponerme aún más nerviosa.

-Sé que te estás acostando con ella.

-¡Claro que no!

Me defiendo al instante.

-La mirada que te lanzaba ella, me lo decía, y la mirada con la que le respondías me lo confirmaba.

Frunzo el ceño.

¿Y como mierda se dio cuenta de eso?

Tengo la necesidad de llorar de los nervios.

Puede decírselo a Ben...

O a Ivanna...

-Alisa, ya te dije que no estoy acostándome con la señora Reeves, nose por que piensas esas cosas.

Vuelve a rodar los ojos.

Trago saliva.

-Puedes confiar en mí- susurra- ¿Conoces al profesor Lerman?

Asiento, sin saber que tiene que ver en el asunto.

-Tengo sexo con él por buenas calificaciones.

Mi mente se paraliza por un momento.

Me quedo embobada, sin emitir ni una sola palabra.

¿Qué?

¿Está engañando a Ben?

¿Sólo se acuesta con él por buenas calificaciones?

El profesor Lerman, si bien tenía entendido es que es el único de los profesores más guapos de toda la escuela, a pesar de no ser tan joven, de hecho, tiene la misma edad de ________.

Siempre lo he visto hablar con el director de una forma muy especial, y es que según varios alumnos es la mano derecha del director.

-¿Me estás jodiendo?

Alisa niega con la cabeza mientras se pasa las manos por el rostro.

-No, claro que no, por favor, no digas nada, eres la única persona que lo sabe porque de verás necesitaba decírselo a alguien.

-También me estoy acostando con la señora Reeves.

Admito por fin, sintiéndome con algo más de confianza.

Sin notarlo, lágrimas ya están cayendo por mis mejillas.

Alisa me abraza y me mantiene pegada a ella mientras sollozo.

-Tranquila.

¿Cómo puedo estar tranquila?

Esto nunca debió pasar...