HAROLD
-¿Por qué sigue teniendo esos sueños?- cuestiono hacia el jefe Jing, pues los sueños que tiene Rut deberían haber desaparecido desde hace meses.
-La mente humana no es tan fácil de manipular Harold, tengo a más de 10.000 científicos y técnicos monitoreando cada mente de las personas que viven aquí ¿Crees que nos vamos a enfocar en solo una persona?
Me paso la mano por el rostro, pues esto es muy frustrante- Pero ella no es cualquier persona, ella es el virus, no puede saber la verdad de lo que es, por algo vive aquí en el cuartel y no donde están todas las demás personas.
Se voltea hacia mí con los brazos cruzados- Sabemos lo que es, pero mientras tengamos su mente en nuestras manos no recordará nada de su pasado hace seis meses.
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DANIEL
-¡NO!
-¡SI!
-¡NO!
-¡SI!
Coloco mis manos con fuerza sobre el escritorio de Henry haciendo que esta emita un fuerte ruido que se escucha por toda la habitación, lo señalo y lo fulmino con la mirada- He dicho que no, no voy a volver a salir, he tenido suficiente por tres años, hay peligro allá afuera y no quiero volver a pasar por eso.
Henry, sin decir nada más se levanta dejando unos papeles en la mesa, se cruza de brazos y tengo que incorporarme para no estar tan juntos- Es por eso que lo necesitamos.
-Ash- me volteo dándole la espalda por un momento- Pero no quiero, no puedes obligarme a ir.
Vuelvo a girarme hacia él para enfrentarlo, ha interrumpido mi hora de entrenamiento para hablar de esto, aunque lo siga negando una y otra vez, no se rinde.
-Eres el único que sabe cómo es allá afuera, sabes cómo buscar comida, que comida sirve y abrir puertas, a excepción de Marcus.
Lo señalo- Esa es otra razón por la que no quiero unirme, no quiero estar en el mismo lugar que él.
-No lo puedo sacar del grupo, él era cazador y ayuda mucho en estas circunstancias.
Doy dos pasos hacia él para enfrentarlo- Si él no sale del grupo NO entraré.
Y sin nada más que decir doy media vuelta y salgo de su oficina, cierro con fuerza la puerta haciendo que todo se mueva.
En el pasillo me recibe Steve con los brazos cruzados, ya que me encontraba entrenando con él.
-¿Qué pasó?- cuestiona para luego seguirme mientras me voy alejando.
-Ya sabes, lo de siempre, quiere que me una a los recolectores, obviamente me negué.
-¿Sobre Marcus o por lo que no quieres volver a salir?
Me detengo mirando hacia la nada, hay algo que no le he dicho a nadie, porque creo que si lo hago me derrumbaré, lo tengo comprimido mucho tiempo.
-¿Daniel?- me coloca una mano en el hombro al darse cuenta que he parado de caminar y mi mirada está perdida al final del pasillo- ¿Algo ocurre?
Podría decírselo, pero creo que no es el momento y no estoy listo- Sí, es todo lo que dijiste- vuelvo a caminar con el detrás, quiero cambiar de tema- ¿Cómo vas con Alisson?
Veo como sonríe de lado- Perfecto, aunque es un poco testadura ¿Sabes? Cada vez que voy a verla en el trabajo se enoja y me bota a patadas.
No evito reírme tras su comentario- Alguien debe darte una paliza alguna vez, y ella es la adecuada.
Me da un golpe en el hombro llegando otra vez al área de entrenamiento, donde ahora estamos aprendiendo defensa personal.
-¡Hagan parejas! ¡Defensa personal! ¡Uno es el atacador y el otro la victima!
En eso Steve voltea con una sonrisa y me extiende la mano- ¿Desea usted ser mi atacante?
Me cruzo de brazos un tanto divertido- ¿Por qué debo ser yo el atacante? ¿A caso quieres darme una paliza?
-Pues... el atacante siempre recibe una buena paliza de la víctima.
-¿Sabes que no voy a ser gentil?
-Sí, lo sé, ya después tú puedes ser la víctima.
Y nos posicionamos, estamos frente a frente, mirándonos directamente a los ojos, el me sonríe pero yo no lo hago, no lo pienso dos veces y corro directo hacia él.
Pero mi desventaja es ser tan alto, pues lo usa de ventaja agachándose haciendo que mi golpe se dirija al aire y pierda el equilibrio tropezándome con su cuerpo y cayendo directo al suelo en un golpe seco.
Él se incorpora para verme con una sonrisa de victoria y abalanzarse sobre mi colocando un brazo sobre mi cuello, sus piernas teniendo prisioneras las mías, se inclina hacia mi rostro para susurrarme- ¿No que no ibas ser gentil?
Sonrío y sin esperárselo le aparto el brazo que tiene sobre mi cuello, le doy un empujón por el pecho haciendo que caiga de lado y ahora soy yo quien está encima suyo, le agarro un brazo colocándoselo por detrás dejándolo inmóvil y haciendo que suelte un chillido de dolor, me inclino hacia él- ¿Te rindes?
-¡NO! ¡NUNCA ME RINDO!
No sé cómo, no sé cuando, pero en un movimiento rápido logra soltarse de mi agarre, pierdo el equilibrio cayendo hacia atrás, se levanta sobándose el brazo sin borrar su sonrisa.
Me levanto lo más rápido que puedo con la respiración agitada, siento las gotas de sudor bajar por los costados de mi rostro, hacer esto es lo único que me entretiene y hace olvidar sobre Rut.
Steve camina hacia mí para impregnarme un golpe que es esquivado a tiempo, para luego aprovechar que me he agachado para darle un golpe en el abdomen haciendo que retroceda dos pasos.
-Vamos Steve, no te dejes pisotear por tu atacador.
Levanta la cabeza mientras se limpia el sudor, mueve su cabeza de un lado a otro sacando algunos conejos.
-Esto recién empieza.
Ahora soy yo quien da el primer golpe, lo esquiva con éxito y me impregna un golpe en la mejilla izquierda, no pierdo el tiempo en quejarme por el dolor de esta y doy un golpe también en su mejilla.
La desventaja de ser tan alto es que no eres tan rápido, es por eso, que cuando trato de darle otro golpe en la mejilla este se agacha a tiempo, con su pierna me patea la parte trasera de las mías haciendo que caiga de espalda, se coloca encima de mí y la presión de su brazo contra mi cuello es mucho más fuerte, haciendo que deba dar dos golpes al piso indicando que me rindo.
-Eso no vale- me quejo mientras me levanto lentamente del piso.
-Bueno, ahora cambiemos de papeles.
Se ve como Steve ya está más cansado que yo, así que cuando intente dar golpes lo único que hago son esquivarlos, no trato de defenderme, pues mi intensión es que cuando intente descansar aprovecho y lo derroto.
Y eso hago, tras golpes y golpe veo como sus movimientos van bajando de intensidad y velocidad, para un momento y no dudo en saltarle encima para que caiga al piso y yo con él, le sujeto las piernas en una posición para nada cómoda, me mira por unos segundos dándose cuenta del plan maligno que hice y da dos golpes al piso indicando que se rinde.
Lo suelto y se queda tendido descansando, su pecho subiendo y bajando rápidamente.
-Creo que suficiente entrenamiento por hoy- le extiendo la mano para ayudarlo a levantarse y lo recibe sin refutar.
Nos duchamos. Nos cambiamos. Y salimos a cenar con los demás,
Toma asiento al lado de Alisson dándole un beso en la frente, tomo asiento al frente suyo con Emma a mi lado, que pareciese que estuviera esperando que yo también haga lo mismo con ella, pero no lo hago.
Sé que lo que estoy haciendo con ella está mal, sé que la estoy ilusionando, y que tal vez aun no estoy listo para una relación.
-¿Cómo les fue en el entrenamiento?- cuestiona mientras se mete a la boca un poco de lechuga.
-Bien- sí, voy hacer sincero, cuando estoy junto a ella suelo ser distinto cuando estamos en la cama. Y varios lo han notado.
-¿No quieres ir a la habitación a relajarte un poco?- cuestiona a lo bajo, volteo a verla y sus ojos me miran atentamente, impaciente con mi respuesta.
Vuelvo a mirar mi plato de comida- Ahora no- de reojo puedo ver la desilusión, pero tal vez es hora de cambiar, es hora de dejar en claro que mis sentimientos por ella no son mutuos, no van a llegar a algo más que amigos.
La cena es silenciosa, pues pareciese que todos hoy día no tiene ganas de hablar. O eso hasta que Clayton habla.
-Mañana me voy a una ciudad en busca de suministros- no sé porqué, pero siento que esas palabras van más dirigidas a mí que a los demás- Han dicho que se están viendo varios animales salvajes a los al rededores, así que esta vez iremos con más personas y armas.
Levanto mi mirada hacia él, y puedo afirmar mis sospechas, me estaba viendo todo el tiempo, veo a los demás que también se me han quedado viendo- ¿Qué?- cuestiono de mala gana.
-Sabes a lo que nos referimos Daniel, Henry dice...- no lo dejo terminar puesto que me levanto de golpe.
-Yo ya dije lo que tenía que decir, no van a lograr convencerme de que salga otra vez, no lo harán.
Escucho que gritan mi nombre a mis espaldas mientras me voy alejando del comedor, pero no volteo, no lo hago porque sé que no me dejaran tranquilo, que me dirán que tengo que pensarlo ya que les serviría de mucho.
Voy por los pasillos en busca de mi habitación, y justo cuando estoy a punto de abrir la puerta veo por el rabillo del ojo a Emma, corriendo hacia mí.
-¡Ey! ¿Todo bien?- solo asiento sin mirarla. Sus pequeñas manos soban mi brazo de arriba abajo, la otra agarra mi mentón obligándome a mirarla- ¿No Quieres que te ayude a olvidar el mal momento?
Y no lo pienso, abro la puerta con velocidad entrando con ella, la impregno contra la pared juntando nuestros labios en un profundo beso.
El roce de nuestras lenguas, sus manos en mi cabello, empujando mi cabeza para que el beso se profundice, mis manos llegan a su cintura atrayéndola más hacia mí.
En eso nos separamos por un momento para que se quite la camiseta y yo hago lo mismo, la cargo por debajo de su trasero, no pesa nada.
Sin dejar de besarnos nos dirigimos a la cama, con cuidado la recuesto sobre ella besándole en cuello, la clavícula y un poco más arriba del pecho.
En eso, al cerrar los ojos la veo. Rut. En el momento en cuando me atacó el lobo y tuvo que besar mis heridas para sanarlas, me separo rápidamente de Emma dejándola confundida.
-¿Qué pasa?
Me levanto agarrándome la cabeza tras las imágenes que se están repitiendo una y otra vez, imágenes donde aparece ella, en los momentos en que la vi desnuda, en los besos, en nuestros toques descuidados, y que en este momento yo quiero que ella esté aquí y no Emma.
-Vete- digo a lo bajo, siento como se levanta para recoger su camisa del suelo y caminar hacia mi- Vete por favor.
-¿Qué? ¿Por qué? Tú nunca me botas.
-Vete...
-¿Por qué? ¿Por qué quieres que me vaya justo ahora? ¡DIME!
No aguanto más, volteo a verla- ¡PORQUE NO ERES ELLA! – se queda en silencio, se nota la clara confusión en sus ojos.
-¿No soy quien? ¿Rut?
-No digas su nombre.
-¡NO! ¡NO PUEDES USARME COMO UNA CUALQUIERA PARA QUE TE OLVIDES DE ELLA! ¡NO SOY UN OBJETO DANIEL! ¡SOY UNA PERSONA!- se coloca la camiseta y camina hacia la puerta- Solo espero que alguna vez me hayas visto como algo más que una simple distracción- y con eso sale de la habitación.——-
Nota de autora: ¿Piensan que está mal lo que está haciendo Daniel? Leeré su comentario.
No se olviden de votar que me ayudaría mucho.
¡¡¡Besos!!!
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REMEMBER ME (DTM #3) •TERMINADO•
Teen FictionAntes de leer este libro ya debiste de haber leído la primera y la segunda para entenderla, puedes buscarlas en mi perfil. El tiempo pasa y lentamente el corazón de Daniel se va recuperando, dejando atrás al amor que le tenia a Rut. Su muerte lo de...